El Gobierno estudia aprobar un decreto para facilitar la salida de empresas de Cataluña

La Voz / Agencias BARCELONA

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YVES HERMAN | Reuters

Esta modificiación evitaría que grupos como La Caixa tuviesen que llevar la decisión a una junta de accionistas, como recogen sus propios estatutos. El consejo de Caixabank se reúne mañana de forma extraordinaria para estudiar el posible cambio de sede

05 oct 2017 . Actualizado a las 19:46 h.

El Gobierno está estudiando aprobar mañana un decreto ley que permita a las empresas catalanas cambiar su sede social sin tener que pasar por la junta de accionistas. 

En concreto, la medida que podría estudiar el Consejo de Ministros supondría una modificación de la disposición de la Ley de Sociedades de Capital, aprobada en el 2015, que establece que «el órgano de administración será competente para cambiar el domicilio social dentro del territorio nacional», salvo disposición contraria de los estatutos. 

Con la nueva modificación se eliminaría la salvedad de los estatutos, de forma que se facilitaría que las empresas puedan cambiar su domicilio social sin necesidad de pasar por la junta de accionistas, según informaron las mismas fuentes.

El decreto facilitaría el cambio de sede a compañías como Caixabank, ya que sus estatutos no permiten el cambio de domicilio social solo con un acuerdo del consejo de administración, sino que precisa del visto bueno de los accionistas.

La medida sería estudiada en el Consejo de Ministros de este viernes. Fuentes del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad declinaron hacer comentarios al respecto, al igual que fuentes de Caixabank.

Según informa el diario Ara, el grupo CaixaBank está buscando fórmulas para cambiar de sede sin tener que pasar por junta de accionistas. Aunque el consejo apruebe el traslado del domicilio, esa decisión debería ser avalada por los accionistas, proceso que se dilataría al menos un mes y su convocatoria podría traer problemas de orden público.

Según Ara, incluso hubo contactos con Moncloa para abordar esta situación y en este escenario surgió la posibilidad de un cambio normativo para falicitar una salida exprés. Tras el cambio de sede del Banco Sabadell, la entidad ha asegurado que adoptará las «decisiones necesarias en el momento oportuno, siempre con el objetivo de hacer prevalecer los intereses de los clientes, accionistas y empleados». Esta misma semana, CaixaBank remitió una nota interna a sus empleados en la que explicaba que «es importante comunicar proactivamente» a sus clientes su compromiso en la defensa de sus intereses, que «guiará las decisiones futuras que, en caso de ser necesario, hayan de tomarse».

El consejo de Caixabank se reúne mañana de forma extraordinaria 

Esta misma tarde se ha conocido que el consejo de administración de CaixaBank se reunirá mañana de forma extraordinaria para estudiar el posible traslado de su sede social. 

De este modo, el banco que preside Jordi Gual seguiría los pasos de Banco Sabadell, cuyo consejo de administración ha aprobado esta tarde trasladar su sede social de Barcelona a Alicante.

Los títulos de Caixabank han subido un 4,93% al cierre de la jornada bursátil ante la posibilidad de que el banco decida trasladar su sede fuera de Cataluña y eliminar así incertidumbres.

CaixaBank, uno de los principales bancos de España

CaixaBank, que preside Jordi Gual y cuyo consejero delegado es Gonzalo Gortázar, es uno de las principales bancos de España, con una red de más de 5.400 oficinas -de las que unas 1.390 están ubicadas en Cataluña, 15,8 millones de clientes -de los que unos dos millones corresponden a BPI- y cerca de 37.336 trabajadores. La entidad, que obtuvo un beneficio de 839 millones de euros en el primer semestre de 2017, un 31,6 % más que en el mismo período del año anterior, gestiona asimismo unos recursos de clientes de cerca de 350.000 millones de euros y cuenta con unos créditos sobre clientes brutos de más de 228.000 millones.

La entidad ha crecido notablemente en los últimos años, especialmente durante la crisis económica, gracias a diversas adquisiciones, como las de Caixa Girona, Bankpyme, Banca Cívica, Banco de Valencia, el negocio de Barclays en España y, más recientemente, el portugués BPI. En el mercado español posee una cuota del 29,5 % en penetración clientes, un 25,9 % en nóminas, un 24,9 % en seguros de ahorro, un 23,3 % en planes de pensiones y un 18,2 % en fondos de inversión, según datos al primer trimestre del año.