Pablo Casado en Galicia: «Hemos captado el mensaje»

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

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El líder del PP modera el discurso y escenifica junto a Feijoo  el espíritu de «unidad» y las ganas de «remontada»

04 may 2019 . Actualizado a las 17:10 h.

El Partido Popular ha regresado a sus orígenes para recuperarse del hundimiento electoral del pasado domingo. Pablo Casado se ha puesto de nuevo detrás de un atril tras la campaña, y lo ha hecho en Galicia en una romería multitudinaria en O Pino organizada por la agrupación provincial coruñesa, que ya lo tenía previsto antes de que se convocasen las elecciones del 28A, con la vista puesta en las municipales.

El presidente del partido, que esta semana recibió críticas por la estrategia de los últimos meses, fue contundente. «Hemos captado el mensaje, somos conscientes de los errores y estamos dispuestos a mejorar» tras unos resultados que calificó como «muy malos». Casado moderó su discurso respecto a las últimas semanas y suavizó sus referencias a sus rivales políticos. De hecho, admitió la victoria exigua de los socialistas y les advirtió que no les iba a dar «una autopista libre» para gobernar, y que su formación va a ejercer «como contrapeso».

El líder palentino indagó en las claves de la derrota, pero no puso el foco en los giros ideológicos cuestionados por algunos referentes y prefirió fijarse en la clave de «la dispersión». Para marcar diferencias, dijo no entender a los que se referían a «las tres derechas», porque la opción del PP era clara: un partido «abierto, reformista, centrado, que suma y que habla de lo que nos une y no de lo que nos divide», afirmó antes de admitir que eran «muchos» los que dejaron de votar a su partido, pero también los que seguían apoyándolo.

Pablo Casado, aprovechando que el acto se celebraba a poca distancia del Camino de Santiago, puso como ejemplo la Ruta que él hizo hace unos años y que comparó con el PP y el centroderecha. «Hay que llegar al mismo punto común, uniendo territorios y sentimientos, y regresar a los orígenes», que a su juicio es recuperar la vocación de ayudar a los vecinos.

Al inicio de su intervención, como en otras visitas a Galicia, tuvo unas palabras generosas con Feijoo, muy aplaudidas por los presentes en la carballeira de Castrofeito. El presidente del PPdeG, al que Casado consideró «un referente nacional», acababa de hablar con más contundencia todavía que el líder del partido para transmitir dos ideas sencillas: «Perdón por lo que habéis sufrido, perdón por los errores cometidos, os debemos una remontada», dijo el titular de la Xunta. Feijoo también fue cariñoso con Casado, al que agradeció que hubiese dado la cara esta semana, «que es el primer mandamiento de un político», y que tuviera una actitud determinante «para reconstruir una nueva mayoría». El gallego no tuvo reparos en ponerle nombre a lo que el PP necesita recuperar: «A la mayoría de los votantes de Ciudadanos y a los más moderados de Vox y del PSOE», enumeró, para augurar que «si nos unimos» se volverán a ver en España mayorías «con diez millones de votos». Para ello, dijo en tono didáctico, «no tenemos que pensar lo mismo», pero sí tener ideas comunes como «no querer ver al populismo y nacionalismo cómo se reparten España, que es un país único».

Antes de ceder la palabra a Casado, para el que pidió todo el apoyo, lamentó que Vox hubiese sido el domingo «un juguete de Pedro Sánchez para dividirnos, valiente hazaña», valoró, y cree que tanto la ultraderecha como Ciudadanos «engañaron a los votantes, pero jugaron sus cartas. Lo que nos duele es el daño que le han hecho a la mayoría de los españoles y a España». Para animar a la concurrencia, Feijoo trató de ser firme, y se dirigió a Pablo Casado para decirle que «en el PPdeG se acabó el duelo, la decepción y la derrota. Estamos a la orden para construir mayorías, para unir el voto y para remontar. Pero para eso hay que aceptar errores y tener espíritu ganador, y por eso estamos aquí arropando a Pablo Casado, para llevarlo a la victoria», zanjó.