IU dará libertad a los concejos para concurrir con Podemos en Asturias

Luis Ordóñez
Luis Ordóñez REDACCION

ASTURIAS

Acto de inicio de campaña de Unidos Podemos en Avilés
Acto de inicio de campaña de Unidos Podemos en Avilés Podemos Asturies

Los acuerdos se limitan por el momento a Avilés y Langreo y la dirección descarta que la fórmula sea una agrupación de electores

21 mar 2018 . Actualizado a las 17:46 h.

La fórmula de Unidos Podemos -con la que el partido morado e Izquierda Unida concurrieron juntos en las pasadas elecciones generales- se complica a la hora de trasladarla al ámbito autonómico y local. Las elecciones a la presidencia del Principado y para los ayuntamientos tendrán lugar en 2019 y si en al ámbito estatal los líderes nacionales de ambas formaciones tienen predisposición a buscar un modelo de entendimiento que aún no está maduro ni en cuanto a la marca ni a la configuración de listas, en Asturias las diferencias son a hoy en día casi insalvables para el parlamento asturiano aunque no para los concejos. El coordinador regional de IU, Ramón Argüelles, apuesta por dar vía libre a las agrupaciones locales para elegir sus vías de confluencias con Podemos aunque ha fijado un límite, que se trate de coaliciones y no agrupaciones de electores y, además, la «visibilidad» de IU debe estar clara y «presente».

Desde IU consideran que se dan las condiciones para un pacto de este tipo en Langreo (donde hay un gobierno conjunto de ambos grupos) y también en Avilés y quizá Pravia, donde el entendimiento en la oposición está muy consolidado. Pero poco más. «Lo que no vamos a hacer es forzar a que en sitios en los que no haya escenarios de encuentro haya que hacerlo obligatoriamente porque no tiene sentido y porque los vecinos no lo entenderían», señaló Argüelles el pasado lunes durante una visita a la agrupación de Sobrescobio. El coordinador de la coalición --que votó de forma muy reciente con un respaldo del 70% de la militancia mantener su «identidad» en los próximos comicios asturianos-- apuntó en todo caso que «en aquellos sitios en los que sea posible una confluencia y puedan plasmarlo en una candidatura conjunta nos parece bien» y además «va en la línea federal de intentar un acuerdo lo más amplio posible». Pero insistió en que la marca de IU debe de ser visible y descartó las agrupaciones de electores por la pérdida de recursos que supondrían.

A las elecciones en España pueden concurrir partidos y agrupaciones de electores, que se definen como asociaciones temporales de ciudadanos para acudir a unos comicios, para formarlas se requiere un número mínimo de firmas que varía en función de la población del territorio en el que se presentan. Pero también tienen amplios inconvenientes: no pueden aparecer en los bloques electorales obligatorios que se difunden en medios de comunicación públicos, tampoco reciben subvenciones públicas, ni participan en los debates de candidatos.

En un entrevista concedida a La Voz de Asturias, el secretario general de Podemos Asturies, Daniel Ripa ya avanzaba que «en lo local nosotros apostamos por una confluencia flexible para que en los lugares donde haya un trabajo conjunto desde la base tanto en los partidos como en los movimientos sociales se puedan presentar conjuntamente». Los morados anunciaron esta semana que celebrarán también consultas en el ámbito local para decidir las fórmulas de confluencia en las próximas elecciones.

La experiencia de Unidos Podemos en Asturias no fue buena para ninguna de las dos formaciones, no consiguieron los resultados esperados, ambos interpretan que les fue impuesta desde el ámbito estatal sin llegar a consultarles y además se desarrolló en un complicado proceso de agravios especialmente a la hora de elaborar las listas. De cara al congreso de Vista Alegre II, Podemos Asturies presentó un documento en que consideraba «un lastre» la coalición con IU y reclamaba autonomía para decidir sus alianzas electores. Desde IU de Asturias consideraron que la dirección federal no había tenido en cuenta la fortaleza de la formación en Asturias (con el gobierno de varios ayuntamientos importantes, un grupo parlamentario consolidado y una larga trayectoria autonómica) muy lejos de las de otros territorios del Estado. Además su entonces coordinador, Manuel Orviz, se vio relegado a un tercer puesto en la lista común (encabezada por los morados Sofía Castañón y Segundo González) con pocas expectativas para lograr un escaño en un proceso además con muchas tiranteces y que fue considerado humillante para IU.

Dentro de IU de Asturias hay diferentes sensibilidades acerca de su relación con Podemos aunque después de dos votaciones internas en las que el apoyo a mantener la propia marca recibió un amplio respaldo de los afiliados y también después de los resultados infructuosos de todas las tentativas para aunar esfuerzos en iniciativas parlamentarias y singularmente sobre pactos presupuestarios sin hallar eco en los morados han terminado por hacer replegarse a los más partidarios de la confluencia. En buena parte de la coalición se siente en todo caso que muchos de los partidarios de esa convergencia pretendían diluir el partido y señalaron que «por lo menos ya está fuera del debate la fórmula de desaparecer». En este sentido destacaron que la tradición de la formación es dejar libertad a las agrupaciones locales para decidir sus alianzas aunque advirtieron que debe buscarse un sistema que garantice una cierta homogeneidad y que no haga chocar a posibles pactos locales con una relación que en el ámbito autonómico no siempre se caracteriza por la cordialidad.