Ribera reconoce que será «complicado» el cambio de modelo energético

L.O. / Agencias REDACCION

ASTURIAS

Teresa Ribera promete su cargo como nueva ministra de Transición Ecológica del Gobierno de Pedro Sánchez ante Felipe VI
Teresa Ribera promete su cargo como nueva ministra de Transición Ecológica del Gobierno de Pedro Sánchez ante Felipe VI J.J. Guillén

La Ministra de Transición Ecológica defiende el beneficio para «todos» aunque aprecia que «hay quien se siente en riesgo de perder en ese proceso»

07 jun 2018 . Actualizado a las 10:29 h.

La nueva ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha defendido hoy el cambio hacia un modelo energético «mucho más biodiverso» y «en el que probablemente salgamos ganando todos», pero ha reconocido que «es complicado» y «hay quien se siente en riesgo de perder en ese proceso».

«Sabemos que vamos caminando hacia un modelo energético muy diferente, mucho más plural, mucho más biodiverso, mucho más positivo desde el punto de vista de impactos en salud y de costes. Y hacer todo ese cambio es complicado», ha dicho Ribera en declaraciones a la Cadena Ser. La elección de Ribera como ministra ha sido acogida con cautela en Asturias, tanto entre el partido socialista como entre los sindicatos, ya que sus tesis respecto al cierre anticipado de las centrales térmicas choca frontalmente con los planteamientos del Principado.

La ministra ha reiterado en varias ocasiones su apuesta por una descarbonización acelerada, ya que la quema de carbón es una de las fuentes más contaminantes, sino la principal, en la producción energética. Desde el gobierno asturiano y los agentes sociales, sin embargo, se ha manifestado su preocupación por el impacto sobre el empleo y la garantía del suministro eléctrico a la industria regional de un cierre repentino de plantas como la de Lada, a la que Iberdrola ya ha puesto fecha de caducidad. Todos ellos han reclamado una «transición justa» aunque en declaraciones anteriores, la ministra consideró este concepto una excusa para frenar el cambio de modelo de producción energética.    

A su juicio, «lo más difícil siempre es salir de un modelo en el que hay una serie de inversiones, de intereses creados, e ir hacia otro modelo en el que probablemente salgamos ganando todos, pero hay quien se siente en riesgo de perder en ese proceso de cambio».

Ha insistido en que será «fundamental» poder conciliar clima, energía, agua y medioambiente, «porque será la manera de facilitar esa incorporación de forma natural en todas las políticas sectoriales del Gobierno».

«Hacerlo junto evita incoherencias, facilita la puesta en común de los desafíos y la reflexión sobre cómo identificar toda esa senda de cambio», ha añadido y ha destacado que ya en otros países europeos, como Francia, Alemania o el Reino Unido «estos debates se intentan abordar de forma conjunta».

Ribera ha explicado que el próximo lunes tendrá un «consejo importante» de Energía en Luxemburgo, donde se discutirá aspectos clave de lo que se conoce como «el paquete de invierno», es decir, algunos de los elementos más relevantes de cara a facilitar las políticas europeas para llegar a 2030 «de una forma compatible» con los objetivos acordados en París.

Ha recalcado la importancia de que «Europa pueda hacer ese proceso de cambio de modelo económico y de su modelo social mucho más compatible con los límites del planeta», algo en lo que «la energía es absolutamente capital».

«La alianza entre los países más progresistas con capacidad de transformar las cosas es la única manera de hacer creíble e ilusionar y de gestionar algo tan complejo», ha concluido.