El grupo presenta varias enmiendas a la Ley de Memoria Democrática pidiendo suprimir la referencia a «víctimas del franquismo»
30 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.En las próximas semanas llegará al pleno de la Junta General el debate sobre la Ley de Memoria Democrática, una propuesta de IU que coalición destacó como una de sus prioridades para culminar la legislatura en el pasado debate de Orientación Política, y que incluye propuestas como la elaboración de un censo de víctimas (no sólo de los desaparecidos en las cunetas, sino también de aquellas personas que padecieron la represión de la dictadura) o la creación de un Instituto y un Consejo de la Memoria que coordinen todas las medidas relacionadas con la búsqueda de esos desaparecidos y las investigaciones sobre el franquismo. De cara a ese debate, los grupos parlamentarios han comenzado a presentar sus enmiendas a la ley, muchas de ellas ya recogidas en la página web de la Junta General.
Entre ellas se encuentran las presentadas por Foro Asturias con propuestas como incluir su ámbito de actuación más allá de la Guerra Civil y la dictadura, para ampliar a un extenso periodo que arranque ya desde la proclamación de la II República y, de modo singular, con referencias a la revolución de octubre de 1934. En una de esas enmiendas, el grupo llega a tachar la definición «víctimas del franquismo» para dejarla en una referencia a las «víctimas», sin más; cambio que justifican «por razones de interés histórico, conviene no contextualizar los hechos, los cuales deben observarse mediante un enfoque global de todas las circunstancias acaecidas, que derivaron en hechos que provocaron víctimas de todo tipo por razones ideológicas, desde la instauración de la II República hasta la entrada en vigor de la Constitución de 1978».
En otra de sus enmiendas de modificación, Foro propone cambiar el texto de los propósitos de la ley, en los que se refiere a «la promoción del derecho a una justicia efectiva y a la reparación para las víctimas asturianas», para extenderlas no sólo a las de la dictadura sino también a «sucesos como la revolución del 1934, el levantamiento militar de 1936, la guerra civil, la conocida como 'lucha en el monte' llevada a cabo por el denominado 'maquis' durante la II República Española, con episodios como la Revolución de 1934, la guerra civil y la dictadura franquista». En este punto en concreto, Foro tacha una de las definiciones de «golpe militar» para el episodio de rebelión contra el orden constitucional con el que comenzó el conflicto bélico, y lo deja en «levantamiento militar de 1936».
El apartado 1 del artículo 9 de la ley hace referencia a las medidas propuestas para la localización e identificación de víctimas de la Guerra Civil y la dictadura, pero de nuevo Foro insiste en una modificación del texto para incluir también a los desaparecidos «durante la II República con episodios como la Revolución del 34». Lo cierto es que los historiadores difieren sobre el número exacto de fallecidos durante la revuelta asturiana de octubre, con cifras que oscilan entre uno y dos millares, incluyendo las constatadas desde el mismo final de la contienda, de 33 religiosos y sacerdotes pero ninguno de ellos desaparecido.
Inclusión en el currículo escolar
En noviembre del año pasado, IU inició la tramitación de esta ley, que recibió apoyos matizados tanto de Podemos, como de Ciudadanos, como del PSOE (ya que los socialistas discrepan sobre el encaje de determinados puntos en el ordenamiento jurídico estatal) y el rechazo de PP y Foro. En esa presentación, el portavoz de la coalición en el parlamento asturiano, Gaspar Llamazares, resaltó que «se la debemos a muchos ciudadanos que han luchado contra la dictadura y por los derechos democráticos. Se lo debemos porque el futuro está hecho del trabajo de nuestros hijos y de la memoria de nuestros abuelos».
Además de las medidas para reunir y coordinar los trabajos de investigación de fosas de desaparecidos y vestigios de la dictadura, la propuesta de IU apuesta porque los contenidos de memoria democrática se incluyan en la enseñanza, en los currículos «de la Educación Secundaria Obligatoria y en el Bachillerato, como elemento de fortalecimiento de los valores democráticos; la actualización de los contenidos curriculares para ESO y Bachillerato en el área de Ciencias Sociales, Geografía e Historia».
El pasado mes de junio, el portavoz del Gobierno asturiano, Guillermo Martínez, destacó que el PSOE comparte «el espíritu de la norma» aunque reclamó que en la negociación haya aclaraciones respecto a su encaje legal en el marco jurídico estatal y a su adecuación del ámbito competencial del Principado; además de sobre aspectos relacionados con su impacto presupuestario, dado que incluyela creación de un instituto de la memoria democrática, un consejo de memoria democrática y un comité técnico de expertos.
