El transporte augura una hecatombe con el nuevo peaje de las autovías

Carmen Liedo REDACCION

ASTURIAS

Peaje del Huerna
Peaje del Huerna

UITA y Cesintra aseguran que el sector está al límite y que con cargas impositivas como la que plantea Fomento «destruyen tejido empresarial». No descartan salir a la calle para oponerse a la propuesta

14 nov 2018 . Actualizado a las 09:08 h.

El sector del transporte rechaza frontalmente la propuesta de implantar peajes en todas las autopistas de la red nacional de carreteras incluidas, por supuesto, las autovías de Asturias. Una medida así supondría para este colectivo una hecatombe, y es que algunas voces ya apuntan que el sector «está a punto de estallar» dadas las «condiciones pésimas» en las que se encuentra por los diferentes costes que ha tenido que asumir en los últimos meses, uno de ellos el incremento de entre un 20 y un 25% de los carburantes. Desde la Unión Independiente de Transportistas Autónomos (UITA) y desde Cesintra aseguran que el sector está al límite y advierten que con las nuevas cargas impositivas que plantea el Ministerio de Fomento «está destruyendo tejido empresarial». Así, no descartan llevar a cabo medidas de presión para oponerse a la propuesta, medidas que desde Cesintra apuntan que habría que consensuar con el Comité Nacional de Transportes.

«De sacar esto adelante sería la gota que colma el vaso y que lo haría revosar por todo los sitios», manifiesta el presidente de la Central Empresarial de Servicios Internacionales y Nacionales del Transporte (Cesintra), Alejandro García Monjardín, que deja claro que la posición del colectivo es «contraria» a pagar por circulas por todas las autopistas «porque nosotros ya contribuimos con numerosos impuestos». Según el planteamiento de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan) el peaje general para los vehículos pesados sería de entre 5 y 14 céntimos por kilómetro. De este modo circular de Oviedo a Gijón podría costarles a los transportistas hasta 5 euros. 

García Monjardín señala que ese coste no podrían asumirlo, y ha recordado que los transportistas han tenido que afrontar la subida del gasoil «sin repercutirlo en el cliente», con lo que asegura que «la presión fiscal sobre el sector es inaguantable ya» y que la situación que viven es que «todos los días nos está cayendo algo encima». Ante esto, el presidente de Cesintra dice que «está claro que no podemos descartan medidas de presión», aunque considera que hay que valorar «cuántas y cuáles». En su opinión, lo más efectivo sería «hacer un paro», pero entiende que para llegar a algo así lo suyo sería «que estuviera consensuado con el Comité Nacional de Transportes» y se hiciera «de forma conjunta, seria y responsable», ya que no es partidario «de que cada uno vaya por su lado». Sin embargo, a la par, tiene «dudas de que en el Comité Nacional se llegue a una posición unánime».

El mismo quiso poner de relieve la situación concreta de Asturias, donde entiende que la implantación de peajes en las autovías sería «aún más grave» por la situación de «aislamiento» que ya padece como consecuencia del peaje del Huerna, que se convertirá en uno de los más antiguos al prolongarse su vigencia durante un total de 75 años. «Quieren cobrarnos por todo», ha señalado el presidente de Cesintra apostillando que «no lo podemos consentir». Monjardin ha aprovechado para criticar la medida del Gobierno socialista de que la Guardia Civil pueda desviar a los camiones por autopistas de peaje. «Eso no lo pueden hacer, que nos lo dejen como algo voluntario, ya haremos nuestras cuentas», ha manifestado el responsable de los transportistas, que tiene claro que si ponen nuevas tasas por circulas por las autopistas el sector al que representa sería «el más perjudicado». «Lo seríamos sobremanera por las dificultades de repercutir esos costes en nuestros clientes, porque entonces ya no seríamos tan competitivos», argumenta Alejandro García Monjardín, que lamenta que «siempre paguemos los platos rotos los mismos».

Con el coincide el presidente de la Unión Independiente de Transportistas Autónomos (UITA), José Fernández, que destaca que «el sector está en condiciones pésimas» y «a punto de estallar» después de asumir la subida de un 25% de los carburantes como para que desde el Gobierno se planteen poner peajes en todas las autopistas. Así, reprocha al ministro de Fomento, José Luis Ábalos, que con medidas como esa y con la vuelta atrás de no meterse en la alianza del transporte con países como Alemania y Bélgica «está destruyendo tejido empresarial en el sector».

«Si sigue con esta historia él solo va a forzar un paro en el transporte», advierte José Fernández, que recuerda que aún tienen pendiente la devolución del céntimo sanitario. «Ahora nos quieren gravar más y desde enero hemos tenido que asumir una subida del carburante de casi el 25%. ¿Cómo quieren que podamos subsistir?», pregunta el responsable de UITA, que comenta que mientras en países del este «salvaguardan a las empresas del transporte porque no tributan, aquí las echan», señala con una crítica directa a que se pongan peajes en todas las autopistas. «Es la gota que colma el vaso, con lo que con aquellas organizaciones que pienses como nosotros, tendremos que hacer algo», apunta sin descartar las medidas de presión porque concluye que «el sector está hasta arriba».