Maroto viajará a Estados Unidos para negociar con la cúpula de Alcoa

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

La ministra de Industria, Reyes Maroto durante su intervención en la sesión de control al gobierno celebrada en el Congreso.
La ministra de Industria, Reyes Maroto durante su intervención en la sesión de control al gobierno celebrada en el Congreso. Javier Lizón

La ministra explica que irá  «allí donde están quiénes deciden»

26 nov 2018 . Actualizado a las 19:42 h.

La ministra de Industria, Reyes Maroto, ha anunciado que viajará a Estados Unidos para hablar con la dirección de Alcoa, que ha anunciado el cierre de las plantas de Avilés y A Coruña, porque es allí donde están quiénes deciden. Maroto, durante el turno de réplica a los grupos parlamentarios en su comparecencia en la Comisión de Industria, ha indicado que su intención con ese viaje es hablar con el «decisor» en la compañía, dado que la interlocución de Alcoa en España es un «transmisor de noticias» que no puede hablar de proyectos.

Reyes Maroto, que ha indicado que en el caso de Alcoa la interlocución con la empresa, en principio, «no ha sido fácil», ha dicho que en los casos en que sí existe esa capacidad de tomar ciertas decisiones, como en el de Vestas, para cuya planta de Villadangos del Páramo (León) se ha buscado un comprador, es más fácil llegar a una solución, aunque haya que trabajar duro para cerrar la venta, recoge EFE.

No obstante, ha señalado que, aunque en el caso de Alcoa en un principio existía «bloqueo», ahora no es ya así, y la empresa acepta sentarse para ver qué inversores podrían adquirir sus fábricas, cosa que hace un mes no quería. Asimismo, ha manifestado que desde el Ministerio de Industria se están manteniendo reuniones para buscar inversores que puedan quedarse con las plantas que la multinacional quiere cerrar, pero no va a facilitar sus nombres por la «discreción» que es necesaria para que fructifiquen estos procesos.

Maroto ha afirmado que en cualquier caso lo que buscarán es que la transmisión de plantas se haga con las «máximas garantías» y que se quedarán con la oferta que dé más garantías de continuidad de la actividad industrial, como ha ocurrido con Vestas.