¿Tiene Asturias un gobierno de calidad?

ASTURIAS

Los estudios sobre diferencias regionales en Europa revelan un descenso del Principado aunque se mantiene en una zona media

06 feb 2019 . Actualizado a las 12:01 h.

La medición de la calidad de los gobierno es un cálculo difícil, tanto por las variables que deben tomarse en cuenta como por las diferencias en las estructuras territoriales de los Estados de Europa, que es espacio del que se han ocupado, a lo largo de casi toda la última década, los investigadores Nicholas Charron y Víctor Lapuente, para llevar a cabo sus análisis en el estudio «Quality of Government in EU Regions: Spatial and Temporal Patterns», de la Universidad de Gotemburgo.

En ese periodo, en tres tandas repartidas entre los años 2010, 2013 y 2017; Asturias ha perdido posiciones aunque no sale mal parada respecto a un contexto de descenso generalizado en las calificaciones de buena parte de las comunidades autónomas. El estudio revela que hay hondas diferencias territoriales en España entre el norte y el sur, pero también en los casos de comunidades que han mejorado sus resultados se ubican al noroeste peninsular mientras el noroeste languidece.

La medición se llevó a cabo a través de una serie de encuestas en las que se tomaron como referencia conceptos como la imparcialidad de los gobiernos regionales, la calidad de los servicios públicos y el nivel de corrupción, con preguntas sobre si hay diferencias en la asistencia sanitaria o la educación recibida por los ciudadanos de una región, o la existencia de casos de sobornos en las autoridades. En los años 2010 y 2013, Asturias recibió una calificación media alta; pero en 2017 cosechó un resultado menor en la escala, aunque todavía en la gama media.  

El estudio destaca que hay variaciones por el modelo de organización territorial en los estados europeos, de manera que en países muy centralizados, los encuestados en ocasiones no se sienten apelados al referirse a su región o área, mientras que en casos como Alemania o España, los gobiernos autonómicos cuentan con muchas competencias, con capacidad fiscal y gobiernos reconocibles así como la potestad de redistribuir recursos mediante los servicios públicos.

El informe también señala que se dan grandes diferencias entre países del este y el oeste. Con todo, los autores resaltan que las buenas calificaciones se han mantenido fuertes en los países del norte de Europa mientras los del sur declinaban, empujados en buena parte por Italia, Grecia «y varias regiones españolas, aunque Portugal y algunas regiones del norte de España han hecho grandes progresos desde 2010». No es el caso concreto de Asturias; entre las comunidades que han mejorado con el paso del tiempo, el estudio destaca a Cantabria, País Vasco y Navarra. Entre las comunidades que han sufrido un descenso más acusado se encuentra Galicia.

En sus conclusiones, los autores advierten que, si bien la entrada en la UE representó una oportunidad de crecimiento general para la mayor parte de las regiones que padecían problemas económicos y sociales antes de su ingreso, lo cierto en que existe un riesgo de que, con el paso del tiempo, las diferencias entre regiones no se hayan aminorado si no que hayan aumentado «en crecimiento económico, en productividad y empleo».