El diluvio que casi ahoga a Rioseco y Felechosa

s.d.m. REDACCIÓN

ASTURIAS

Presa de Tanes desembalsando a causa del temporal de lluvias
Presa de Tanes desembalsando a causa del temporal de lluvias

Las estaciones meteorológicas de ambas localidades registran los máximos históricos de lluvia

06 feb 2019 . Actualizado a las 13:51 h.

Cortinas de agua que duraron horas, ríos desbordados y embalses abriendo compuertas por primera vez en una década. Los temporales de enero golpearon duro al Principado. Los vecinos sufrieron desde el primer momento las consecuencias, ahora conocen los datos exactos de lo ocurrido. El avance del boletín climatológico de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) reconoce que en las estaciones de las localidades de Rioseco y Felechosa se batieron los máximos históricos de precipitaciones durante las jornadas del 22 y 23 de enero. En esas 48 horas, en el medidor de Rioseco depuradora se recogieron hasta 275,2 litros por metro cuadrado y en Cuevas de Felechosa, 202,8 litros por metro cuadrado. Nunca antes habían presenciado tanto agua desde que comenzaron sus observaciones. Si se mide únicamente lo currido el 22 de enero, nuevamente en Rioseco depuradora se batió un récord: 167,8 litros por metro cuadrado. 

«Extremadamente húmedo o muy húmedo y muy frío o frío», en estos términos califica Aemet el resumen del mes en el Principado, en función del territorio en el que se encuentren las estaciones. Es decir, en general, tanto las precipitaciones como las temperaturas estuvieron fuera de los parámetros habituales. No obstante, hubo dos eneros bien diferenciados en los meteorológico. La persistencia del tiempo anticiclónico y la ausencia de vientos marcaron la primera decena del año, con tiempo seco pero temperaturas muy bajas. Esto se rompió con la entrada de aire marítimo húmedo y lluvia. La segunda quincena el cambio ya fue drástico, debido a la entrada casi encadenada de frente marítimos. Al margen del diluvio registrado, la temperatura mínima más baja se captó el día 8 de enero, en Camporriondi, en Amieva.

En general, las temperaturas estuvieron por debajo de los valores normales, sobre todo, en las mínimas. Aemet explica que «alcanzaron valores especialmente bajos en la primera decena del mes debido al enfriamiento radiativo nocturno del suelo en presencia de cielos despejado». Noobstante, fue más fría la primera quincena que la segunda. Ayudaron mucho las heladas registradas durante los primeros días del año en los valles del interior. Las temperaturas bajo cero se detectaron más bien en zonas altas y en los valles del sur del Principado, como Degaña, Leitariegos, Felechosa, Pola de Somiedo y Pajares-Valgrande. 

Oviedo también puede ser un buen ejemplo de cómo fue enero. Si la temperatura media del mes es de 8,3 grados, en este 2019 cayó a sólo 6,7 grados. Si la precipitación media del mes es de 83,6 litros metro cuadrado, en este 2018 se acumularon hasta 237 litros por metros cuadrado. Esa ha sido la tónica general del balance, que tiñó los mapas del boletín climatológico mensual de Aemet del azul correspondiente al frío y del verde intenso con el que se representa la lluvia.