Un asturiano, repatriado desde Wuhan por el brote de coronavirus

Juan M. Arribas

ASTURIAS

Jaime Santirso
Jaime Santirso Kelly Dawson

El periodista Jaime Santirso no presenta ningún síntoma. Será puesto en cuaraentenca durante 14 días cuando llegue a España

31 ene 2020 . Actualizado a las 13:58 h.

La veintena de españoles que permanecían atrapados en Wuhan, epicentro del coronavirus, abandonaron esta madrugada la ciudad china a bordo de un avión fletado por el Gobierno británico que volará directamente a Londres y posteriormente Madrid, informaron a Efe fuentes diplomáticas. Entre ellos se encuentra un asturiano, el periodista y escritor Jaime Santirso, que estaba cubriendo la información para el diario El País. Santirso no presenta ningún síntoma de estar infectado y cuando llegue a España será puesto en cuarentena durante 14 días en el hospital militar Gómez Ulla de Madrid, donde ocuparán una planta completa.

Ni Santirso ni niguno de los españoles presentó fiebre o algún otro síntoma de estar infectado por el virus en los diferentes controles de temperatura realizados en el aeropuerto, por lo que todos pudieron embarcar en el avión, indicaron las mismas fuentes. El avión, de la línea aérea española Wamos Air y alquilado por Londres, despegó a las 09.45 horas locales (3.45 hora peninsular española) del aeropuerto de Wuhan, cerrado al tráfico comercial desde que hace ocho días el Gobierno chino decretó el aislamiento de la ciudad.

La salida, que en principio estaba prevista para las cinco de la madrugada local (21.00 GMT del jueves) se retrasó varias horas, debido a la tardanza en conceder los permisos por parte de las autoridades locales y a que los chinos no reconocían los documentos consulares de emergencia que llevaban un grupo de menores británicos.

El avión volará desde China directamente a Londres, donde desembarcarán los británicos -bastantes menos de los 150 previstos en principio- y, sin que los españoles pisen suelo del Reino Unido, continuará viaje hasta Madrid, donde se espera su llegada a lo largo del viernes.

Una vez en España, la veintena de nacionales serán puestos en cuarentena durante 14 días en el hospital militar Gomez Ulla de Madrid, donde se les ha reservado una planta completa, según confirmó hoy el Ministerio de Sanidad español.

Además de los españoles y los británicos, viajan en el avión ocho daneses, siete húngaros, cuatro búlgaros, cuatro checos, un noruego y un finlandés, entre 30 ciudadanos de diferentes nacionalidades sin contar los británicos y los españoles.

La planificación de la evacuación ha sido complicada y funcionarios británicos han tenido que negociar intensamente con el Gobierno chino para cerrar todos los detalles, en permanente contacto con la diplomacia española en Pekín.

Las autoridades chinas no recomiendan evacuar a los extranjeros de Wuhan, ya que consideran que podría ser contraproducente para la lucha contra la propagación de la enfermedad, aunque han asegurado que no lo impedirían. En cualquier caso, no están dispuestos a que ningún extranjero que presente fiebre o síntomas de haber sido contagiado pueda subirse a un avión de repatriación.

Pekín tampoco permite que los cónyuges chinos de los extranjeros repatriados viajen con ellos, situación que afectaba en el caso de los españoles a seis parejas mixtas.

Finalmente, una mujer china embarazada, pareja de uno de los españoles, fue la única que consiguió subirse al avión .

Aumenta considerablemente el número de muertos e infectados

Por otra parte, el número de muertos e infectados por el nuevo coronavirus creció hoy considerablemente hasta los 213 muertos (43 más que el jueves) y 9.692 casos confirmados a nivel nacional (1.981 más).

Según el informe diario de la Comisión Nacional de Salud, actualizado a las 04.00 hora local (22.00 en la España peninsular), el número de pacientes en estado grave se sitúa en 1.527, mientras que 171 personas superaron la enfermedad y fueron dadas de alta.

Este dato se conoce unas horas después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) haya declarado la emergencia internacional ante el rápido aumento de los pacientes afectados por una enfermedad que ya ha llegado a 19 países, aunque el 99 % de los casos se han diagnosticado dentro de China.

Hasta el momento se han detectado 15.238 casos sospechosos (3.071 más que ayer) -que corresponden a personas que presentan síntomas pero todavía no se ha confirmado que hayan contraído el coronavirus- y se sigue a más de 100.000 personas que han estado en contacto con enfermos.

De las 43 muertes que se han producido en las últimas 24 horas solo una ha tenido lugar fuera de la provincia de Hubei (centro-este del país) donde se originó el brote. Es el caso de un enfermo que falleció en Heilongjiang (noreste del país).

Según datos de la Comisión de Sanidad de Hubei, la provincia ha agregado en las últimas 24 horas 1.200 nuevos casos de personas infectadas, 378 de ellas en Wuhan y el resto en otros municipios como Huanggang (77), Ciangyang (123) o Jingzhoy (70).

En la ciudad de Wuhan, epicentro del brote, que se encuentra desde el pasado día 23 con todos los accesos cortados para tratar de contener la expansión del virus, fallecieron 30 personas el jueves, mientras que 26 fueron dadas de alta.

En esta ciudad -donde quedan 9 millones de personas dentro de la ciudad, según las autoridades locales- han fallecido 159 personas, mientras que 204 han muerto en toda la provincia.

Los síntomas del nuevo coronavirus, denominado 2019-nCoV provisionalmente por la Organización Mundial de la Salud (OMS), son en muchos casos parecidos a los de un resfriado, pero pueden venir acompañados de fiebre y fatiga, tos seca y disnea (dificultad para respirar).

Los casi 10.000 contagios comprobados implican que está a punto de duplicarse el número de afectados registrado durante la epidemia del síndrome respiratorio agudo y grave (SARS, enfermedad también causada por un coronavirus), ya que la cifra oficial -aunque China fue criticada por su falta de transparencia entonces- entre noviembre de 2002 y agosto de 2003 fue de 5.327 casos.