Los fallecimientos por esta causa están muy por encima de la media nacional en todos los municipios asturianos, con nueve entre los 10 que más riesgo presentan de España
29 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Las caídas accidentales son la primera causa de muerte en 19 de los 78 concejos del Principado de Asturias. También son una de las tres primeras causas de muerte en 53 de los 78 municipios de Asturias, en donde el riesgo de mortalidad por una caída accidental se multiplica como mínimo por dos en comparación con el riesgo promedio en el conjunto de España. Al menos así fue en el periodo comprendido entre los años 2012 y 2014, en los que todos los concejos asturianos estaban por encima del riesgo medio de mortalidad por caídas accidentales de los 8.063 municipios de España.
Por este orden, Villaviciosa (1), Nava (2), Cangas de Onís (3), Caravia (4), Parres (5), Ribadesella (7), Colunga (8), Sariego (9) y Sobrecosbio (10) son los nueve concejos asturianos que lideran el riesgo de mortalidad por caídas accidentales en ese periodo en toda España. Solo El Herrumblar, un pueblo de Cuenca, rompe la hegemonía asturiana al situarse en sexta posición. En estos nueve concejos asturianos, el riesgo de morir por una caída accidental cuatriplica la media del resto de España.
En Villaviciosa, ese riesgo se multiplica por cinco. Villaviciosa es también el segundo municipio de España con mayor riesgo de mortalidad por esta causa entre 1989 y 2014, que es el periodo que abarca el recientemente publicado Atlas Nacional de Mortalidad en España (ANDEES), elaborado por investigadores de la Fundación FISABIO y la Dirección General de Salud Pública de la Generalitat Valenciana.
El atlas se ha elaborado con datos de casi 10 millones de muertes entre 1989 y 2014, procedentes del Instituto Nacional de Estadística (INE), y sus resultados se basan en el indicador de riesgo de mortalidad conocido como Razón de Mortalidad Estandarizada suavizada (RMEs), que estima la relación entre el número de muertes observadas por una causa de defunción en cada uno de los 8.063 municipios españoles y el número de muertes para esa misma causa que se esperarían según sus habitantes y sus edades.
Así, un valor de 100 indicaría que se han observado el mismo número de muertes que las que cabría esperar en ese municipio, que se situaría por lo tanto en el riesgo promedio de toda España para una causa concreta de mortalidad. Y un valor superior a 100 indica que se han observado más defunciones de las que cabría esperar en ese municipio, lo que se traduce en que el municipio presenta un exceso de riesgo en comparación con el promedio de toda España.
Villaviciosa, que encabeza el listado de municipios en el periodo comprendido entre 2012 y 2014 con una RMEs de 502, presenta un riesgo de muerte por caídas accidentales cinco veces superior al promedio de España en su conjunto. La RMEs de Gijón, que ocupa la posición número 20 en ese mismo periodo, es de 358, con lo que el riesgo es tres veces superior a la media de los municipios españoles. En Oviedo, en la posición número 40, también sería tres veces superior a la media al igual que en Avilés, que se sitúa en el puesto 92 del ranking.
De estos datos también se extrae que, pese a que Asturias siempre ha presentado cifras de mortalidad significativamente más elevadas que la media española en mortalidad por caídas accidentales, en ese último periodo analizado (2012-2014) el riesgo de morir por esta causa se incrementó aún más en los concejos asturianos. Si entre 2006 y 2008 eran solo seis los municipios de Asturias que se situaban entre los 100 pueblos españoles con más riesgo de mortalidad por caídas accidentales, entre 2012 y 2014 pasaron a ser 31.
Incidir en la prevención es uno de los objetivos de desarrollar este atlas interactivo que, además de las caídas accidentales, sitúa el suicidio, el asma y la tuberculosis entre las principales causas de mortalidad en los concejos asturianos.
En España, ocho de cada diez caídas accidentales afectan a personas de más de 65 años, pero en Asturias también es la principal causa de muerte entre quienes tienen de 30 a 65 años. Los estudios realizados sobre la mortalidad por caídas accidentales indican que se dan con mayor frecuencia entre personas que viven solas, que presentan cuatro o más enfermedades, que tienen una enfermedad del aparato locomotor y del tejido conectivo, enfermedades de los ojos, enfermedades del aparato digestivo o que consumen tres o más formatos de forma habitual.
Según la Organización Mundial de Salud (OMS), los programas eficaces de prevención de las caídas deberían incluir elementos para identificar y modificar los riesgos, como por ejemplo la evaluación del domicilio y la modificación del entorno en casos con factores de riesgo conocidos o antecedentes de caídas, la prescripción de dispositivos asistenciales apropiados para paliar los problemas físicos o sensoriales, el fortalecimiento muscular y ejercicios de equilibrio prescritos por profesionales sanitarios, programas grupales comunitarios que pueden incorporar componentes como la educación para prevenir caídas y ejercicios tipo tai-chi o de equilibrio dinámico o intervenciones clínicas como el examen y la modificación de la medicación, el tratamiento de la hipotensión, la administración de suplementos de calcio y vitamina D o el tratamiento de los trastornos visuales corregibles.