El brote de coronavirus en la residencia de Grado, desbocado con 70 positivos

La Voz

ASTURIAS

Residencia de ancianos del ERA en grado
Residencia de ancianos del ERA en grado

El Principado ha decidido medicalizar las instalaciones. Un total de 17 enfermeras refuerzan la plantilla. El ERA contabiliza 80 casos entre residentes y trabajadores

20 mar 2020 . Actualizado a las 20:40 h.

57 residentes y 13 profesionales han dado positivo en la residencia del ERA en Grado, que se ha convertido en el segundo gran brote de coronavirus en Asturias, después que el colegio Masaveu marcara la llegada de la epidemia al Principado. La Administración, que esta misma mañana ya decidió medicalizar este centro para poder garantizar la atención, ha confirmado estos 70 casos. No son los únicos en la red de establecimientos públicos de la tercera edad. El de Palacio del Villar, en Piedras Blancas, que ayer tenía dos, ya suma seis. El resto permanece igual. El positivo de un trabajador del centro de El Cristo, en Oviedo, es el de un profesional sanitario itinerante, que también trabaja en Grado y que ya está incluido en esos 70. En la residencia Santa Teresa de Oviedo, hay un profesional afectado y también un residente, que ha recibido el alta por su evolución positiva pero que todavía no se encuentran entre los que han pasado los dos exámenes que confirman la curación. Además, se ha detectado otro más en un usuario de la residencia de Moreda. En total, el balance del ERA asciende a 80. 

Entre los 70 casos de la residencia de Grado se encuentra el de la anciana de 96 años, que permanecía en estado crítico en el HUCA y que falleció el jueves por la tarde, convirtiéndose en la segunda víctima mortal en Asturias. La administración ha explicado que los casos más inestables ya han sido derivados al hospital y que los leves se encuentran siendo tratados en la propia residencia. 

El Principado decidió adoptar medidas contundentes para garantizar la asistencia de todos los residente en Grado. La Consejería de Derechos Sociales y Bienestar y la gerencia de los establecimientos residenciales de ancianos de Asturias (ERA), en coordinación con la Consejería de Salud, «medicalizaron» el centro. Esto ha supuesto la incorporación a la plantilla de 17 enfermeras, que completaan la labor asistencial sanitaria. También realizó análisis a todos los trabajadores y a todos los residentes de este equipamiento, tuviesen o no síntomas, ante el temor de que hubiese un foco en expansión. Los resultados así lo han confirmado.

Otro motivo de preocupación era la incomunicación de las personas mayores alojadas en los centros, no solo en el Grado, ya que las visitas están suspendidas. La gerencia del ERA ha explicado que todos sus centros están en constante contacto con las familias de los residentes para trasladarles el estado en el que se encuentran. Este organismo ha pedido, además, que no se donen televisiones, tal y como se estaba realizando, ya que temen que puedan ser una fuente de trasmisión del COVID-19.

Comienza a llegar material

Por su parte, delegados sindicales del ERA reconocen que los centros han comenzado a recibir el material que llevaban días reclamando a la gerencia. Los primeros suministros se distribuyeron la tarde del jueves. El reparto ha continuado a lo largo de la mañana del viernes. No obstantes, matizan que llega con cuentagotas y que solo cubrirá la asistencia durante unos días. Marcos Fernández, de SAE, pone un ejemplo práctico. Para una residencia con 27 auxiliares, cuatro enfermeras y 70 residentes se han recibido 50 mascarillas. Generosa Tamargo, de CCOO, critica que durante días no se les dejara usar el material, para reservarlo para cuando hubiera un positivo. «El problema es que los trabajadores podemos ser los que estamos infectando a los usuarios, que son la población más vulnerable», explica.

Los profesionales consultados por La Voz han explicado que en los últimos días se han vivido situaciones «sangrantes» y que han estado trabajando con las medidas de seguridad estándar, sin ningún tipo de refuerzo. Solo se usaban mascarillas, de manera excepcional y allí donde las había, con residentes muy concretos, si se aconsejaba por su estado de salud. Esto supone que sí tenían guantes pero poco más. El pasado 4 de marzo recibieron un protocolo de actuación que es el que han estado siguiendo hasta ahora. La semana pasada en una reunión del comité de prevención ya se adelantó que no se estaban adoptando todas las medidas necesarias.  

Petición al Estado

Por su parte, la consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, ha solicitado para Asturias más material sanitario de protección para los profesionales del sistema de servicios sociales y para los colectivos vulnerables. También ha trasladado la conveniencia de extremar la coordinación entre los ministerios de Sanidad y Derechos Sociales y Agenda 2030. Álvarez ha expresado estas peticiones durante el pleno extraordinario del Consejo Territorial de Servicios Sociales y del Sistema para la Autonomía y la Atención a la Dependencia, celebrado por videoconferencia, recoge Europa Press.

La consejera ha manifestado la necesidad de proveer de material protector a las plantillas de las residencias públicas y privadas, centros de personas con discapacidad y personal del servicio de ayuda a domicilio, así como a quienes están en situación de mayor vulnerabilidad. «No parece sensato que en esta situación, en la que las personas mayores son uno de los colectivos de mayor riesgo, se haya obviado el peso de la población potencial en riesgo a la hora de establecer el reparto», ha subrayado la consejera.

Asturias, ha recordado, registra la edad media más elevada de toda España, cinco puntos por encima de la media. «Un 25,7% de nuestra población supera los 65 años y la inversión total en recursos y servicios para personas mayores y dependientes supera los 257 millones, el 30% del presupuesto de la consejería. No estamos conformes con los criterios planteados hasta ahora para el reparto del fondo social extraordinario destinado exclusivamente a las consecuencias del Covid-19»,  ha subrayado la titular de Derechos Sociales. A su juicio, resulta fundamental tener también en cuenta la regla de redistribución que apoya a las comunidades con menos renta per cápita. «Sin embargo sí se han incorporado al reparto las que tienen régimen foral», ha añadido Álvarez.