El Consejo General señala que ninguno trabaja en farmacias abiertas al público y que no hay ningún establecimiento cerrados
16 abr 2020 . Actualizado a las 15:16 h.Seis farmacéuticos asturianos han dado positivo en COVID-19. No obstante, ninguno está trabajando en farmacias abiertas al públicas y no ha sido necesario cerrar ninguna botica por la epidemia. Así lo ha explicado el Consejo General de Farmacéuticos que ha ofrecido un balance de situación de la profesión en todo el país. Alrededor de 493 farmacéuticos están ingresados o en cuarentena y nueve han fallecido. Respecto a los datos de la semana pasada, se produce un incremento en el número de afectados y se reduce el número de farmacias cerradas de 65 a 48. est eincremento del servicio se ha producido por la recuperación de sus profesionales y pero también por la respuesta organziada de colegios y consejos autonómicos que han establecido turnos de refuerzo y soluciones para cubrir las bajas y los cierres.
Dsde el comienzo de la crisis 11 profesionales de la farmacia, nueve farmacéuticos y dos técnicos en farmacia han muerto tras infectarse del nuevo coronavirus, de los cuales seis estaban en Madrid y uno en La Rioja, otro en Granada, otro en Ciudad Real, otro en A Coruña y otro en Alicante.
Por territorios
En concreto, en Andalucía hay actualmente 43 profesionales de farmacia ingresados o en cuarentena; en Aragón 14; en Asturias 6; en Baleares 11; en Canarias 44; en Cantabria 4; en Castilla y León 58; en Castilla-La Mancha 85; en Cataluña 42; en la Comunidad Valenciana 37; en Extremadura 7; en Galicia 35; en Madrid 40; en Murcia 1; en Navarra 2; en el País Vasco 46; en La Rioja 16; y en Ceuta 2.
El Consejo General de Farmacéuticos ha destacado la necesidad de que todos los farmacéuticos y profesionales de las farmacias «extremen» la precaución, y ha recordado a la población la necesidad de seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias, acudiendo a las farmacias solo en los casos necesarios. Por último, el organismo ha subrayado la importancia de que se incluya a los farmacéuticos entre los profesionales sanitarios a los que se les realiza las pruebas de detección del Covid-19.
