Miguel de la Fuente señala que el sector industrial «no sufrirá tanto» las consecuencias como el turístico
24 abr 2020 . Actualizado a las 16:30 h.Los colegios de economistas de Galicia y Asturias han previsto un menor impacto de la crisis derivada de la propagación de la COVID-19 en estas comunidades, así como en la de Cantabria, dado que los sectores más afectados por esta situación presentan un menor peso en sus economías. Tras la presentación del informe Declaración de Renta y Patrimonio del Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF), el decano del Colegio Gallego de Economistas, Miguel Vázquez Taín, ha explicado que es posible que el impacto de la pandemia en esta comunidad no resulte «tan fuerte». Así, ha achacado esta previsión al hecho de que la economía gallega y asturiana presentan una menor dependencia del turismo que otras regiones, como las situadas en la costa Mediterránea.
En la misma línea, el decano del Colegio de Economistas de Asturias, Miguel de la Fuente, ha previsto que el sector industrial «no sufrirá tanto» las consecuencias de la crisis sanitaria como el turístico. De este modo, ha considerado que esta comunidad, Cantabria y Galicia se encuentran «en mejor posición» para afrontar esta situación que otras regiones.
No obstante, el decano del colegio gallego ha incidido en la necesidad de «no minimizar el impacto» de esta situación en Galicia, que, según recordado, suma más de 224.000 personas afectadas por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) tramitados en el contexto de la crisis sanitaria. En este sentido, este economista ha señalado el descenso registrado en marzo en el número de afiliaciones a la Seguridad Social en Galicia (33.000 menos que en febrero) pese a que el estado de alarma solo estuvo vigente en la segunda mitad de ese mes.
Consecuencias
Vázquez Taín ha incidido también en la necesidad de que se adopten medidas que minimicen el impacto de la paralización de parte de la actividad en la economía y ha abogado por que se articulen de acuerdo con la evolución de la situación. Además, ha explicado que el desconocimiento de la intensidad que alcanzará esta crisis y su duración impiden avanzar cómo afectará a la economía de esta comunidad de un modo concreto.
A ese respecto, Miguel de la Fuente ha considerado muy difícil prever las consecuencias de la propagación de la COVID-19 en Asturias, aunque ha advertido de que una dilatación en el tiempo del periodo de confinamiento conllevará un mayor impacto. Asimismo, ha subrayado la importancia de habilitar medidas que permitan que, tras la finalización de la propagación de la pandemia, «la actividad económica vuelva a funcionar». Así, ha insistido en que resulta "fundamental" inyectar liquidez a las empresas para que se alcancen niveles similares a los anteriores a la crisis.
