El PP pide ERTES de fuerza mayor para el sector pesquero

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

Un barco pesquero entra en el puerto de Avilés
Un barco pesquero entra en el puerto de Avilés J.L.Cereijido

Los populares alegan que la actividad acumulada una descenso superior al 60%

03 may 2020 . Actualizado a las 14:27 h.

El diputado del PP en la Junta General del Principado Javier Brea ha emplazado este domingo al Gobierno regional a solicitar del Ejecutivo central que los pescadores asturianos puedan acogerse a ERTES de fuerza mayor ante la caída de las ventas provocada por la crisis sanitaria del COVID-19. Según Brea, el sector pesquero lleva acumulada una caída superior al 60% en número de embarcaciones en las últimas décadas, es una actividad con unas particulares condiciones de dureza que además se ve sometida a una excesiva burocracia y una gran incertidumbre derivada de las regulaciones de las pesquerías.

«Si añadimos a esto una bajada en el consumo de pescado debido a la pandemia, se dan todas las condiciones para hablar de un sector de crisis», añade el parlamentario popular que incide en que se trata de sector poco flexible dado que las pesquerías «son en la época que son y los pescadores deben ir a faenar independientemente de la situación de crisis».

Hasta ahora, al formar parte de la cadena de abastecimiento, se les considera servicio esencial por lo que no pueden acogerse a un ERTE «agravando la ya de por sí difícil situación económica de las cofradías» por lo que el PP pide que puedan adoptar esa medida «que provocaría una disminución de trabajadores en los buques y haría viable la actividad». Además, añade, la disminución de las capturas ayudaría a la sostenibilidad de los recursos pesqueros facilitando la recuperación de las especies «al actuar como una parada biológica parcial» y reclama también una línea de medidas de financiación y ayudas económicas.

El diputado del PP denuncia además que los pescadores asturianos acuden diariamente a trabajar sin haber realizado test de diagnóstico al contrario de lo que ocurre, asegura, en Cantabria y País Vasco donde tienen a su disposición test rápidos para los que están inmersos en la campaña de la anchoa y, si dan positivo, se reconfirma el diagnóstico con una prueba PCR. De cara a la inminente costera del bonito, prevista para finales del mes de mayo y en la que los buques permanecen faenando en la mar durante semanas, es imprescindible realizar test a los 350 tripulantes antes de embarcar para evitar riesgos sanitarios de graves consecuencias, añade.