Rebelión ante la apertura de escuelas infantiles: «No son aparcaniños»

M.D. OVIEDO

ASTURIAS

Un padre pasea con su hijo en Oviedo
Un padre pasea con su hijo en Oviedo J.L Cereijido | EFE

UGT exige un protocolo claro que ofrezca seguridad tanto a los niños, padres y educadores

11 may 2020 . Actualizado a las 18:25 h.

La federación de Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) rechaza con contundencia la vuelta a las aulas de las escuelas infantiles «porque no son aparca niños» y exige un  «protocolo claro que ofrezca seguridad» en la vuelta tanto a los niños como a los padres. En un comunicado, muestra su oposición tajante al hecho de que se utilice a las escuelas infantiles como un elemento imprescindible para la vuelta al trabajo de madres y padres. «Las escuelas infantiles no son aparca niños, forman parte de la primera etapa del sistema educativo junto con la Educación Infantil de 3 a 6 años. Con la apertura antes de que finalice el estado de emergencia serían nuevamente discriminadas en relación al resto de etapas educativas», afirman.

Recuerdan que durante el cierre, los profesionales que en ellas trabajan han venido desarrollando, de manera telemática, una importante labor de acompañamiento, sostén y orientación a familias, además de complementar las programaciones y «avanzar trabajo para que no les pille el toro cuando se produzca esa vuelta a las aulas». Señalan que tras casi dos meses de estar en sus casas, «los niños necesitarían un periodo de adaptación similar al que se produce en septiembre, tras las vacaciones de verano y que esa relación de confianza se realiza «cuerpo a cuerpo». Explican que son niños y niñas de 0 a 3 años, «los profesionales están expuestos constantemente a la saliva, los mocos o las lágrimas de las criaturas. Tienen crisis por la angustia que ocasiona la separación de sus familias. Hay que acogerles, y no nos imaginamos hacerlo con mascarilla o pantalla, entre otras cosas porque no les reconocerían». Por ello, consideran que en las actuales circunstancias «la posibilidad de contagios en estos momentos de acogida entre educadoras y educadores, niños y familias está muy presente».

Por todo ello, el sindicato dice recibir «con sorpresa y profunda preocupación» el anuncio del Gobierno en relación con la vuelta a las aulas de las escuelas infantiles en las próximas semanas, entre otras cosas, «por la falta de criterios claros hasta llegar a tomar esta decisión». Indican que la ministra de Educación y FP, Isabel Celaá, aseguraba hace pocos días que en esa fase 2 se abrirán las escuelas infantiles, 0-3 y 3-6, con el fin de ayudar a los padres y madres en la conciliación de la vida laboral y familiar, recordando que el objetivo sería que puedan usar este servicio «las familias que o bien no puedan teletrabajar o que no tengan flexibilidad horaria para conciliar». Para UGT, «es precisamente la conciliación de la vida familiar y laboral el que, en buena medida, censuramos quienes nos dedicamos a la educación infantil; el hecho de que las cuestiones relacionadas con el trabajo sean las que determinen lo que va a pasar con la infancia, dejando a un lado los derechos de niñas y niños».

Por otro lado, está la desinfección de objetos. La federación de Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) considera necesario explicar a los técnicos que realizan la desinfección que lo habitual en niños tan pequeños es que se lo lleven todo a la boca y que lo comparten con los demás. «Se tendría que desinfectar cada objeto que ha estado en las manos o en la boca de un bebé después de que éste lo abandone. Y así innumerables veces teniendo en cuenta que hay 8 bebés en el aula», indican. Otra pregunta que se plantean es cómo conseguir mantener la distancia de seguridad de dos metros entre niños de un año que están moviéndose continuamente o «como sentarles en los inodoros cuando no alcanzan manteniendo la distancia de seguridad para que no exista riesgo de contagio».