El informe de Ecologistas en Acción confirma que la polución que genera el área central y las cuencas se traslada a todas las comarcas rurales. Señala que la caída del ozono mejora la situación de la vegetación
23 jun 2020 . Actualizado a las 14:05 h.La totalidad de la población asturiana volvió a respirar en 2019 un aire perjudicial para la salud de acuerdo a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), según el informe sobre calidad del aire que elabora anualmente Ecologistas en Acción. El estudio llega a la misma conclusión que hace un año, al advertir del aire perjudicial que se respira en toda la comunidad autónoma. Sin embargo, a diferencia de lo que ocurrió en 2018, el informe indica que la caída del ozono hizo que todo el territorio estuviera libre de niveles de contaminación que dañaran a la vegetación.
Algunos de los puntos de contaminación mencionados en el análisis son «los polígonos industriales que se reparten por todo el territorio asturiano» y los puertos de Avilés y Gijón, de los que se señala que además del tráfico marítimo albergan una gran cantidad de actividades industriales básicas y de movimiento de graneles sólidos. A estos focos se suman el tráfico rodado de las áreas metropolitanas de Oviedo y Gijón y las centrales térmicas de carbón pese a la reducción de actividad. El informe apunta que Oviedo, Gijón, Avilés y las cuencas son las zonas del Principado que presentan una peor calidad del aire.
Desde la zona central, añade, la contaminación se traslada a las comarcas rurales, donde se forma y acumula el ozono troposférico, en general «en niveles moderados». Como consecuencia de ello, el informe concluye que «toda la población asturiana respiró en 2019 un aire perjudicial para la salud según las recomendaciones de la OMS», aunque «por la caída del ozono la totalidad del territorio estuvo libre de niveles de contaminación que dañaran la vegetación», informa EFE.
Ecologistas en Acción valora de manera positiva la revisión de los planes de mejora de la calidad del aire puesta en marcha en 2017 para las zonas de Gijón y Avilés y la aprobación, un año después, de los protocolos de actuación en episodios de contaminación del aire.
Según el informe, en todo el país respiraron aire contaminado 44,2 millones de personas, el 94 por ciento de la población española, de acuerdo a los valores recomendados por la OMS. Esta cifra ha descendido en un millón respecto a 2018 y se mantiene en niveles similares a los de la anterior década.
