El sector, tan voluminoso como desconocido, mueve cantidades que «doblan o triplican en ingresos a industrias clásicas como el cine o la música»
08 dic 2020 . Actualizado a las 19:31 h.La industria del videojuego, esa gran desconocida que todos consumen. De pequeños a mayores, no se salva ninguno. Quizá, lo que a muchos se les venga a la mente de primeras al hablar de ella es la imagen de un adolescente delante de una pantalla o a un niño pequeño sin despegar la vista de la pantalla, asombrado con su juego favorito. Pues bien, este sector va mucho más allá. Se trata de una industria en auge, transgresora y multidisciplinar. Los videojuegos no se deberían entender tan solo como un modelo más de ocio, sino también como una nueva fuente para la educación, la sanidad, el trabajo y la manera de relacionarse y comunicarse.
Como en cualquier otro sector, el talento se cotiza a la alza en la industria del videojuego. «Y en Asturias hay mucho», celebra Luis Delgado, CEO de la empresa de videojuegos asturiana Liquid Games. Sin embargo, a día de hoy todavía no se puede hablar de un sector consolidado en el Principado, según explica Iván Fernández Lobo, director de Gamelab, pero «la región cuenta con algunas iniciativas muy bien orientadas». No obstante, de cara al futuro «la deslocalización que permite el trabajo digital hoy en día debería ser un aliado para que un lugar con las características de Asturias resultase, no sólo una opción atractiva, sino también viable para otros profesionales y equipos creativos en busca de inspiración», señala Lobo.
Por lo tanto, potenciar esta industria en Asturias desembocaría en un sinfín de ventajas como «crear empleo cualificado y de calidad, exportar creatividad, productos y servicios muy valorados, y bien pagados, en un mercado global en imparable crecimiento. Además, de paso, potenciar el crecimiento de otras muchas industrias y sectores, principalmente digitales y de contenidos», asegura Iván Fernández Lobo. El Principado tiene una dirección correcta a día de hoy para que esto ocurra, «pero quizás haría falta conducir ligeramente la atención del talento a la oportunidad que representa el videojuego en el ámbito laboral y empresarial».
¿Qué puede hacer Asturias para potenciar el sector del videojuego?
Pero, ¿qué habría que hacer para que esto acabe ocurriendo? «Lo primero de todo sería perseguirlo como un objetivo», afirma Lobo. En cuanto a medidas concretas, cuenta que es esencial «trabajar con el talento, fomentando desde edad temprana la creación y haciendo una inversión decidida en los más jóvenes para potenciar los conocimientos creativos, técnicos y de negocio que requiere esta industria». En líneas generales, lo que la industria necesita para crecer es apoyo. La celeridad por quererlo todo a la voz de ya, quizás sea uno de los mayores problemas de la sociedad actual. «La de los videojuegos es una industria muy competitiva, con una alta tasa de mortalidad en fases iniciales. Pero también es una industria en la que un sólo éxito, a menudo precedido de múltiples fracasos del mismo equipo de personas, puede generar suficientes ingresos como para dar empleo de calidad a cientos de personas y transformar de paso la economía de toda una región o país». Por ello la paciencia es una de las claves.
Las cifras a nivel nacional son abrumadoras. Tal y como explica el asturiano creador de Gamelab, la industria del videojuego es «el medio más influyente de nuestro siglo. Del motor de la nueva economía digital del ocio y cultura». España cuenta con más de 500 empresas que ya facturan alrededor 800 millones de euros anuales en mercados como Estados Unidos, Europa y Asia, siendo Cataluña «el gran referente en el ámbito estatal y el gran ejemplo a seguir por sus políticas de apoyo al sector».
El 10% de las compañías facturan hasta el 90% del total del mercado. Con una facturación cercana a los 200.000 millones de dólares a nivel mundial, «dobla o triplica en ingresos a industrias culturales clásicas como el cine o la música». Lobo, señala que «por ser un fenómeno económico con un crecimiento comercial imparable, la importancia del videojuego radica sobre todo en que está llamado a transformar directa e indirectamente el mundo tal y como lo hemos conocido hasta ahora»
Un mercado emergente en Asturias lleno de oportunidades
Las oportunidades que ofrece el mundo de los videojuegos son inmensas, ya que se trata de un mercado nacido hace relativamente poco tiempo. Concretamente, en Asturias existen varias empresas, todas ellas pymes, que crean videojuegos para diferentes plataformas como consolas, ordenadores o móviles. Las que operan en el Principado se congregan en la Unión de Empresas de Videojuegos de Asturias (Uneva). Esta asociación, que engloba unas diez empresas asturianas, se encarga de fomentar la colaboración y comunicación entre las mismas, así como de hacerlo ante entidades externas como los organismos públicos. Apoya también la consolidación de un ecosistema en la región que promueva la industria del videojuego. Ulises Martínez, su vicepresidente, considera que el futuro de la industria en Asturias es incierto. Aunque también señala que la base que hay es muy buena y llena de talento. Sin duda, se trata de un sector emergente en Asturias lleno de oportunidades.