El Defensor del Paciente pide a la Fiscalía la derivación «inmediata» de Eduardo Moráis a la clínica Ruber

L.F. REDACCIÓN

ASTURIAS

Eduardo Morais en un fotograma del vídeo desde el HUCA
Eduardo Morais en un fotograma del vídeo desde el HUCA

La presidenta de la asociación justifica su reclamación por «la situación grave del paciente, sin medios en la pública»

15 oct 2021 . Actualizado a las 13:52 h.

La estremecedora historia de Eduardo Moráis corrió ayer como la pólvora por toda España. El vídeo en el que el joven asturiano de 35 años que sufre un trastorno neurológico funcional pide ayuda para conseguir su traslado del HUCA a la clínica Ruber de Madrid -la única en la que asegura que se puede tratar su enfermedad- se hizo viral y las reacciones no se han hecho esperar. El primero en reaccionar fue el Principado, que aseguró que está evaluando su situación y que «en el momento en el que identifiquemos la prestación adecuada se la haremos llegar tanto a él como a su familia». Ahora es el Defensor del Paciente quien ha solicitado la intervención de la Fiscalía para que la derivación a la clínica privada sea «preferente e inmediata».

Carmen Flores, presidenta del Defensor del Paciente, a petición de la familia de Moráis, solicita la intervención del Fiscal Superior de Asturias para pedir el traslado a la clínica Ruber «por la situación grave del paciente, sin medios en la pública». Flores recuerda en su escrito el «derecho constitucional a la salud» y sostiene que este debe ser en el sector privado si no hay medios en el público. La presidenta considera que ese traslado «puede salvar una vida».

La situación de Moráis

En el vídeo compartido en redes sociales, Moráis explica que los facultativos del HUCA le indicaron que debido al daño neurológico sufrido, con consecuencias persistentes tras la hemiplejia, precisaba un tratamiento multidisciplinar que en España únicamente dispensa la Clínica Ruber, en Madrid. En consecuencia, el HUCA solicitó al Servicio de Salud del Principado (Sespa) autorización para derivarle a dicha clínica, pero se encontró con «una negativa improcedente por parte del servicio sanitario, que ha manifestado a día de hoy que solo es posible una derivación cuando se agotan las posibilidades del Sistema Nacional de Salud», afirma la familia del afectado. «Como quiera que en el presente caso se han agotado tales posibilidades, es preceptivo actuar con celeridad», insisten los familiares.