La ley LGTBI del Principado rehúye el término «trans»

La Voz

ASTURIAS

Reunión constitutiva del Observatorio LGTBI
Reunión constitutiva del Observatorio LGTBI

Distintas asociaciones y sindicatos rechazan de plano el borrador y denuuncian que no se les ha tenido en cuenta en su elaboración

22 oct 2022 . Actualizado a las 17:51 h.

Las asociaciones LGTBI+ Xega, Faciendo Camin, Llar trans, Colibríes en Acción, Red educativa LGTBI+, y los sindicatos UGT y CCOO han mostrado este sábado el rechazo tajante al borrador de la Ley LGTBI del Principado y han mostrado su «desacuerdo con el gabinete tanto en su forma de proceder como en su negativa a realizar modificaciones sustanciales al texto inicial».

Un texto inicial que recuerdan ya fue señalado por las asociaciones y sindicatos firmantes como «escueto, nada acorde a las necesidades colectivas y con poca profundidad de desarrollo».

Con el nuevo borrador los colectivos firmantes de este comunicado aseguran que no se han introducido la gran mayoría de las propuestas de modificación que realizaron y consideran que el texto legal supone un lavado de cara del gobierno y no responde a las necesidades reales del colectivo en su totalidad, ni da respuesta a las demandas que suponen deudas históricas con las personas LGTBI+.

«Puesto que es un argumento recurrente, queremos dejar constancia de que la Comunidad Autónoma sí posee las competencias para abordar las realidades que exigimos y que no aceptaremos excusas ante lo que es un juego por contentar a todo el mundo. Exigimos tanto al gobierno del Principado de Asturias como a la Dirección de

Políticas LGTBI+ que abandonen sus posturas obstaculizadoras, apostando por la defensa y la consolidación de nuestras libertades y derechos LGTBI+», añaden.

«Mero trámite»

Así, en un comunicado conjunto las asociaciones LGTBI de ámbito autonómico y sindicatos mayoritarios, con representación en el Observatorio contra la LGTBIfobia, muestran una postura «unánime, firme y clara de rechazo, tanto al insuficiente contenido de esta Ley, como al proceder del Gobierno, que presenta al Observatorio el borrador de la ley como mero trámite, sin ninguna intención de diálogo constructivo y cerrado a cualquier propuesta».

Critican que el Gobierno del Principado haya decidido ignorar deliberadamente a los principales agentes sociales implicados en la implementación de políticas dirigidas a la población LGTBI, y denuncian la utilización del Observatorio para legitimar y publicitar un proyecto de ley en el que no se les ha tenido en cuenta.

Los colectivos apuestan por una ley coherente y sólida en la defensa del colectivo LGTBI+ está en consonancia con el trabajo realizado en otras 14 comunidades autónomas donde ya hay normas legales en activo desde hace años en los que se incluyen las demandas realizadas a este gobierno.

«El borrador que se nos presentó en un primer momento implicaba un recorte muy considerable de otros borradores presentados y negociados en legislaturas precedentes, pero, además, pasaba por alto los principales debates que actualmente condicionan las dinámicas políticas en lo relativo a los derechos LGTBI+. Pese a haber introducido algunas mejoras, el texto sigue siendo insuficiente en muchos aspectos», afirman.

Aseguran los colectivos firmantes que su posición en este sentido es «absolutamente tajante: el recorte y moldeamiento del texto legal a los intereses partidistas afecta a nuestras vidas y a nuestras situaciones de vulnerabilidad social frente a las violencias LGTBÍfobas».

En este sentido destacan que el texto legal presentado prescinde de la utilización del término trans y no reconoce el derecho a la autodeterminación de género, ambas cuestiones «irrenunciables» para los colectivos LGTBI+. Así, pese a prohibir las conocidas como «terapias de conversión» no formula con el mismo carácter tajante la prohibición de mutilaciones genitales a criaturas intersexuales, sino que simplemente se «vela por su erradicación».

Critican además que la norma no recoge los cambios fundamentales en materia educativa, donde es escueto y muy descriptivo, evitando incorporar un protocolo educativo específico para las personas LGTBI+; también a nivel sanitario y laboral donde ni siquiera, informa Europa Press.