La experiencia va más allá de la Santa Cueva y los Lagos con intrépidos rincones que rodean este espectacular paraje natural
06 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Si hay un lugar emblemático en Asturias es Covadonga que, junto a sus lagos y su entorno, constituye uno de los parajes más turísticos de la región. Situado en el Parque Nacional de los Picos de Europa y a tan solo 8 kilómetros de Cangas de Onís, Covadonga es el sitio idóneo para comenzar a conocer Asturias. Además, las distintas actividades y el paisaje que lo rodea no dejan indiferente a nadie.
La Santa Cueva, conocida como la Cueva de la Señora, es un lugar de peregrinación donde cientos de asturianos acuden al año para rendir culto a la Virgen de Covadonga. La cueva que aguarda a la virgen se encuentra ubicada en el Monte Auseva, además, en ella se hallan restos de Don Pelayo, el primer rey de la monarquía asturiana. Junto a la Cueva se encuentra también la Colegiata de San Fernando excavada en la pieza caliza de los Picos de Europa, según explica Turismo Asturias a través de su web.
El lugar se encuentra rodeado de leyendas, como la de los siete caños. A la orilla del «pozón», un estanque situado bajo la cueva donde los visitantes tiran una moneda pidiendo deseos, se encuentra la Fuente de los Siete Caños a la cual se le atribuyen poderes sobrenaturales. La sabiduría popular cuenta que, si se consigue beber de los siete caños, la persona se casará en menos de un año.
La basílica de Santa María la Real, conocida durante mucho tiempo como «Catedral de Covadonga», fue construida frente al monte Auseva desde donde se pueden obtener unas vistas privilegiadas a la Santa Cueva. La basílica fue construida entre 1877 y 19010 por el arquitecto Federico Aparici y Soriano y hoy supone una de las construcciones más destacadas del Principado. Su imponente altura da la sensación de que la construcción acaricia el cielo.
La subida a los Lagos de Covadonga es otra de las actividades preferidas por el turismo. Se encuentran situados a 12 kilómetros de la Basílica y están rodeados por un espectacular paisaje montañoso. Por un lado, el Lago de Ercina situado frente a la Peña Santa de Enol, que se proyecta hacia el cielo junto al sonido de la fauna, encandila a los visitantes. El Lago Enol esconde en sus profundidades réplicas de la virgen de Covadonga que los buzos hacen emerger cada 8 de septiembre, día de Asturias.
Covadonga conserva uno de los mayores secretos del Principados, pues lejos de lo que pueda pensar la gente, los Lagos no son dos, sino tres. Conocida como El Bricial, esta laguna está considerada el tercer lago de Covadonga. Se encuentra a los pies del pico homónimo, y se puede observar llena de agua en contadas ocasiones, aunque la mejor época para visitarla es la primavera tras el deshielo.
Para disfrutar del entorno, Covadonga se encuentra rodeada de infinidad de miradores. A dos kilómetros de la Santa Cueva, en la carretera de los Lagos, se encuentra el Mirador de los Canónigos, un lugar tranquilo desde el que poder disfrutar de las profundidades de los Picos de Europa. Por su parte, el Mirador de la Reina se ubica a unos 8 kilómetros de la Basílica, consta de aparcamiento y desde él se puede apreciar todo el paraje natural que rodea la Cueva de la Santina, desde la sierra hasta el río Güeña e incluso la costa cantábrica.
En el Mirador del Rey situado al final de la pista que recorre la Vega de Enol, se encuentra la gran atalaya al hayedo conocida como el Fayéu de Pome donde disfrutar de un espectacular paisaje natural caracterizado por su color verde intenso en primavera y su variación cromática llena de matices en otoño. Este mirador cuenta además con paneles interpretativos.
La Vega de Comeya puede ser observada desde el Mirador del Príncipe, ubicado en los alrededores del área de Buferrera, desde el que se puede apreciar una impresionante llanura conocida como el Lago Ausente. Otro de los miradores destacados es el de la Princesa. Dedicado a Leonor de Borbón, fue el último en inaugurarse en 2018, está ubicado a más de 1000 metros en el pico Sohornín y cuenta con el lago Enol a sus pies. Por último, se puede disfrutar de este paraje natural desde el Mirador de Entrelagos, que se encuentra ubicado en una loma que separa el Lago Enol del Lago Ercina. En sus inmediaciones se puede disfrutar de un agradable paseo y disfrutar una impresionante panorámica que incluye ambos dos lagos.
Escondidas entre las montañas se encuentran también las minas de Buferrera. En el entorno de Covadonga se desarrolló actividad hasta los años 70 a través de la extracción de minerales como el hierro, magnesio y mercurio. Los túneles han sido acondicionados para que los turistas más intrépidos puedan visitar el suelo subterráneo de la zona.
Para conocer en mayor profundidad el ecosistema de los Picos de Europa se puede visitar el Centro de interpretación Pedro Pidal. Este centro adopta el nombre del impulsor de la ley de Parques Nacionales de 1916. Pidal también fue el responsable del primer parque de la Montaña de Covadonga en 1918, precedente a lo que hoy conocemos como el Parque Nacional de los Picos de Europa.
Cangas de Onís y el entorno de Covadonga ofrecen también diversas actividades como rutas de senderismo, visitas a queserías donde se elaboran quesos tradicionales como el Cabrales o el Gamonéu o actividades