El cambio de manos de la Asturias empresarial

Marcos Gutiérrez ASTURIAS

ASTURIAS

Piezas de transición para «monopiles» de Windar en el puerto de Avilés
Piezas de transición para «monopiles» de Windar en el puerto de Avilés Beatriz Couce

La de Windar Renovables por parte de Bridgepoint es solo la última de una serie de operaciones que han derivado en la disolución del espíritu 100% asturiano de varias empresas del Principado en los últimos años

28 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La compra de Windar Renovables por parte de Bridgepoint es la última de una serie de grandes operaciones que han tenido como resultado el cambio de manos del control (total o mayoritario) de empresas asturianas. Unos cambios que, en algunas ocasiones, tienen como resultado que la asturianía de esas compañías se diluya hasta casi desaparecer, salvo en la memoria. Estos son algunos ejemplos de las principales operaciones que, en esta línea, han sido protagonizadas por firmas del Principado.

Windar Renovables

La semana pasada la firma de inversión privada británica Bridgepoint, una de las principales del mundo en este segmento de actividad, que cotiza en la bolsa de valores de Londres y forma parte del índice FTSE 250 se hacía con la compañía asturiana del grupo Daniel Alonso Windar Renovables, especializada en la fabricación de aerogeneradores, por una cantidad de en torno a 700 millones de euros.

La operación supondrá la salida de Siemens Gamesa del accionariado de Windar (cuenta con casi una tercera parte de los títulos), así como de varios integrantes de la familia Alonso que cuentan con las acciones restantes.

Orlando Alonso Villarón continuará siendo el presidente ejecutivo y mantendrá una participación minoritaria en la compañía, mientras que Siemens Gamesa seguirá siendo cliente estratégico, sin parte en el accionariado.

En la actualidad Windar cuenta con un millar y medio de trabajadores en todo el mundo, 26 años de experiencia en el sector de las renovables y una decena de centros productivos. La firma con sede en Avilés se encarga de la fabricación de torres on y offshore, así como de otras subestructuras. En 2021 tuvo unos ingresos de 210 millones de euros y 10 millones de beneficios.

Hidroeléctrica del Cantábrico

En 1913 se constituía Saltos de Agua de Somiedo, en virtud de un acuerdo entre un grupo de hombres de negocios y empresarios, tales como José Tartiere, Policarpo Herrero, Narciso Hernández Vaquero, Ignacio Herrero de Collantes, Martín González del Valle, Celestino García López, José González Herrero y Benito Collera Duyos. Algunos de estos nombres perviven aún en el callejero de varias ciudades de la región. Pues bien, este fue el origen de Hidroeléctrica del Cantábrico, constituida en Sociedad Anónima el primer día del año 1920.

A partir de 2005 la empresa pasó a denominarse HC Energía tras haber sido comprada por la portuguesa Energias de Portugal (EDP), que transformó la matriz en EDP España. EDP entró en el capital de la eléctrica asturiana HC en 2001 mediante una alianza con Cajastur.

Ese año el grupo energético estadounidense Texas Utilities (TXU), accionista de HC desde el 98, lanzó una opa a la que se sumaron entre 2001 y 2011 otras cuatro ofertas de compra por parte de Unión Fenosa, Energie Baden-Württemberg (EnBW) en alianza con Ferroatlántica, Rheinisch-Westfälisches Elektrizitätswerk (RWE) y Cajastur con EDP. También la belga Electrabel y Eléctricité de France quisieron sumarse a este fervor, sin éxito.

EnBW y Ferroatlántica plantearon la oferta más alta, si bien el blindaje estatutario de HC otorgó el poder a Cajastur-EDP. En 2004, EDP se quedó con el 95,7% de los títulos y ya en 2013 pasó a controlar el 99,87%.

General de Alquiler de Maquinaria

Otra importante operación por el que una enseña de referencia en el Principado cambiaba de manos tuvo lugar ell 25 de abril de 2019. Ese día Gestora de Activos y Maquinaria Industrial (GAMI), sociedad controlada por el presidente de Gestamp, Francisco José Riberas, se hacía con el 54,56% de General de Alquiler de Maquinaria (GAM) por 17,7 millones de euros, como parte del acuerdo marco de reestructuración de deuda.

El acuerdo de reestructuración fue aprobado por el consejo de GAM el mes anterior y suscrito por la banca acreedora (Santander, Sabadell, Liberbank, BBVA, Kutxabank, Bankia y Caixabank, y por el ICO, Hiscan Patrimonio y Aldaiturriaga). 

En 2021 Francisco José Riberas traspasaba una participación conjunta del 15% de sus acciones de la empresa, aproximadamente 4,730 millones de títulos (representativos del 5% del capital), a cada uno de sus hijos, Mónica, Patricia y Francisco José.

El traspaso de acciones se vehiculó a través de las sociedades Sietecontres Inversiones en Tecnología y Desarrollo, Ryoku Inversiones e Iniciativas y Arthesta Gestión de Inversiones, todas ellas propiedad de los hijos de Riberas.

Alsa

 Alsa es, sin duda, una de las empresas históricas de referencia del Principado de Asturias. Fundada en 1923, la compañía no ha sido en absoluto ajena a las grandes operaciones como las que se están describiendo en este artículo.

El 11 de octubre de 2005 el gigante británico del mundo del transporte se hacía con Alsa por 670 millones de euros, cediendo casi un 10% de capital a la familia Cosmen, asumiendo 289 millones de euros de deuda y pagando en efectivo 217 millones más por la integración del grupo asturiano. Así, se puso fin a dos años y dos meses de negociaciones entre ambas empresas.

De este acuerdo se mantuvieron fuera parcelas como el negocio de la empresa asturiana en Asia y la compañía Alsa Rail, ambas pertenecientes a los Cosmen. La que hasta ese año era una empresa 100% familiar y no cotizada (eso sí, el mayor grupo del sector en España) pasaba a erigirse en parte esencial de un gigante internacional del transporte.

Un autobús de Alsa
Un autobús de Alsa

Alsa obtuvo un beneficio operativo de 122 millones de euros en 2022, lo que supone un crecimiento del 85% respecto al año anterior, gracias a la recuperación de la demanda tras el impacto de la pandemia.

Duro Felguera

Los últimos años de Duro Felguera se puede decir que han sido de todo menos plácidos. La empresa fundada en 1858 por Pedro Duro llevaba arrastrando desde hacía tiempo una pesada carga.

En octubre de 2020, la presidenta del Consejo de Administración de Duro Felguera, Rosa Aza, confirmaba el inicio de las negociaciones con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para que esta inyectase 100 millones de euros (70 millones aportados por el Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas y 30 millones, mediante una ampliación de capital, para que la SEPI adquiriera el 40% del accionariado de la compañía).

En 2021 Finalmente el rescate se materializó en dos fases, con un primer desembolso de 40 millones de euros en abril de 2021 y una segunda línea de avales de 80 millones cerrada a finales de ese año, con una aportación total estatal de 120 millones.

En febrero de este año Duro Felguera llegaba a un acuerdo de entendimiento para la entrada en su capital como socios industriales del mexicano Grupo Prodi y de Mota-Engil México, que aportarían 90 millones de euros para hacerse con un máximo del 55% de la multinacional española, ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La firma asturiana resaltó que, con este acuerdo, se avanzaba «exitosamente con un hito clave en la hoja de ruta» iniciada tres años antes para la implementación de «una solución definitiva» a la situación de la sociedad.

El objetivo final, era el de «asegurar la viabilidad a largo plazo y el crecimiento sostenible» de la empresa.

Telecable

La compañía Telecable estaba integrada en Euskaltel desde el año 2017, tras ser vendida por el fondo británico Zegona. Ese año ésta última vendía su filial asturiana por un importe de 686 millones de euros, ampliable a 701 millones.

En 2019 Euskaltel llevaba a cabo una reorganización societaria mediante la fusión de Telecable, su marca en Asturias, y R, su marca en Galicia. El 24 de julio de 2022 MásMóvil y Orange anunciaban que habían llegado a un acuerdo definitivo para fusionar sus respectivos negocios en España.

MasMóvil aportaba una docena de marcas entre las que se encuentran la asturiana Telecable, la gallega R o la vasca Euskaltel; pero también otras como Yoigo, Pepephone o Llamaya. 

Asturiana de Zinc

Asturiana de Zinc, S.A.U. (AZSA) fue constituida como empresa el 8 de octubre de 1957 en Castrillón. Tres años después se obtuvo en sus instalaciones de San Juan de Nieva el primer zinc electrolítico producido en España.

En 1994 el Santander se hacía con Banesto después de la intervención del banco. En ese momento AZSA era una de las joyas de la Corporación Industrial de Banesto.

Tres años más tarde y 40 después de su fundación, Glencore, multinacional dedicada a la explotación de recursos naturales y uno de los líderes de producción de zinc a nivel mundial, se hacía con el 44,41% del capital de la empresa. Ese año 1997 no había resultado especialmente plácido en AZSA. No en vano acababa de firmarse un ERE en la empresa, que venía arrastrando números ojos en sus cuentas a lo largo de todo el lustro precedente. La entrada de Glencore supuso un respiro y un determinante impulso para la compañía.

En el año 2001, Xstrata AG, sociedad participada por Glencore, adquiere la práctica totalidad de los títulos. En 2013, ambas se fusionaban creando un gigante mundial en el segmento de la minería y la energía. AZSA cuenta con alrededor de un millar de empleados y tiene una producción de 510.000 toneladas anuales.