El Real Oviedo cae en un partido gris de los de Anquela que recuerda a épocas pasadas
10 mar 2018 . Actualizado a las 09:25 h.El Tenerife venció con claridad al Real Oviedo (3-1) y abre oficialmente estado de crisis en la capital del Principado. Son ya cinco encuentros los que acumulan los azules sin vencer y esta jornada pueden abandonar el playoff. Dos puntos de los últimos 15 y, lo que es peor, la sensación de que por tercer año consecutivo puede repetirse la misma historia.
El encuentro en el Heliodoro Rodríguez López fue un monólogo local. Los de Etxeberria dominaron de principio a fin. Más rápidos, más intensos, más incisivos. Un partido que se empezó a perder desde la alineación y que solo un balón parado permitió una pequeña opción irreal para los oviedistas.
Como se venía intuyendo, Juan Antonio Anquela apostó por adelantar a Juan Forlín al centro del campo para acompañar a Rocha y sustituir al sancionado Folch. De esta manera, el andaluz prefería modificar dos líneas del equipo ante la baja del catalán. Héctor Verdés era el hombre elegido para completar la zaga azul frente al Tenerife.
El comienzo del partido fue lo esperado. Los azules no salieron de forma distinta a encuentros anteriores. Los asturianos prefirieron esperar atrás, cerca de su portería, como lo hicieran en La Romareda o en el Ramón de Carranza. Toda la iniciativa para los locales. El Tenerife no desaprovechó la ocasión ante un Real Oviedo excesivamente defensivo y que volvía a pecar de defensivo, de no exponer, de no proponer en campo contrario, sino esperar algún chispazo de los suyos.
Confiados en su poderío defensivo, los asturianos se arropaban cerca de Alfonso Herrero, sabiendo que su entramado defensivo podía desactivar cualquier ataque del Tenerife. Pese a ello, en el minuto 18 Milla buscó a Longo en el área. Un balón largo para que el delantero luchara entre los tres centrales oviedistas. El italiano supo bajar el esférico y deshacerse de Christian y Verdés con demasiada facilidad. Con la pierna izquierda, de primeras tras un buen control con el pecho, batió al cancerbero azul e hizo el 1-0 para los suyos.
No reaccionaron los asturianos, carentes de juego y profundidad. No aparecía Saúl, ni Aarón, ni Toché. Los atacantes oviedistas estaban faltos de balones y, cuando recibían, era en situaciones nada ventajosas para ellos. Ni Rocha ni Forlín eran capaces de aguantar al Tenerife y, mucho menos, construir algo para los suyos.
Llegado el minuto 38, de nuevo Longo peleó un balón de espaldas con la defensa del Real Oviedo. El balón quedó suelto para que Mula, desde fuera del área, enganchara un gran disparo que se coló en la portería de Alfonso Herrero. Era el 2-0, un resultado que castigaba el planteamiento asturiano.
Cambios para la segunda parte
Movió Anquela el equipo tras el descanso. El técnico azul dio entrada a Diego Fabbrini en lugar de Mossa. Los asturianos modificaban su dibujo. Línea de cuatro atrás y tres enganches detrás de Toché: Fabbrini, Aarón y Saúl.
El italiano dispuso de una buena ocasión nada más iniciar la segunda parte. Jugada en banda derecha y pase atrás para que Fabbrini rematara solo y Alberto despejara casi sobre la línea. Un primer susto al que respondió el Tenerife con dos buenas ocasiones de Acosta, que comenzaba a hacer mucho daño a la defensa asturiana.
Trataba de volcarse el equipo de la capital del Principado, pero los que llevaban peligro eran los locales. El Tenerife perdonó el 3-0 en un rápido contraataque por banda derecha que Alberto envió arriba en el mano a mano con Alfonso Herrero.
Apenas unos minutos después, Forlín daba vida a los suyos al rematar en el primer palo un buen saque de falta de Saúl Berjón. El argentino, bien desmarcado, cabeceaba cruzado lejos del alcance de Dani Hernández. Quedaba por delante media hora de partido.
Pese a la superioridad durante una hora del Tenerife, volvió a avisar el Real Oviedo en el minuto 68. De nuevo, Berjón puso un gran balón parado al que llegó Carlos Hernández. El defensa remató demasiado alto cuando tenía dos compañeros detrás suyo. Los asturianos trataban de volcarse sobre la portería chicharrera.
Con los asturianos volcados sobre el área rival, el Tenerife enlazó un rápido ataque tras un fallo de Rocha. Acosta cedió a Mula en la frontal y el atacante picó el balón perfectamente ante la salida de Herrero. El 3-1 volvía a hundir las esperanzas asturianas.
Los últimos 20 minutos no sirvieron para nada. El Tenerife se gustaba y tampoco buscó demasiada sangre. Los asturianos, en cambio, eran incapaces de crear ninguna ocasión de peligro.
Pitido final y quinto partido consecutivo en el que el Real Oviedo no consigue vencer. Lo que fue un pequeño bache se ha convertido ya en una crisis en mayúsculas para los azules que la semana que viene recibirán al Granada sin Toché, Linares ni Johannesson.
Tenerife: Dani Hernández; Luis Pérez, Carlos Ruiz, Aveldaño, Camille; Alberto, Luis Milla; Mula (Juan Carlos, min 85), Bryan Acosta (Raúl Cámara, min 79), Suso (Aitor Sanz, min 65), Longo.
Real Oviedo: Alfonso Herrero; Johannesson (Viti, min 59), Carlos Hernández, Héctor Verdés, Christian Fernández, Mossa (Fabbrini, min 46); Forlín, Rocha; Aarón Ñíguez, Saúl Berjón (Yeboah, min 81), Toché.
Goles: 1-0 Longo (min 18). 2-0 Mula (min 38). 2-1 Forlín (min 63). 3-1 Mula (min 71).
Tarjetas: El colegiado, Eiriz Mata, mostró amonestaciones a los locales Mula, Carlos Ruiz y Alberto, y a los visitantes Linares, Toché, Johannesson y Forlín.
