Javi Hernández, el príncipe de los derbis

ALFONSO SUÁREZ OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Javi Hernández y Mossa celebran la victoria frente al Sporting
Javi Hernández y Mossa celebran la victoria frente al Sporting Óscar Cela

El joven defensa se ha convertido en un estilete en los clásicos asturianos

18 nov 2018 . Actualizado a las 12:35 h.

Fue la sorpresa en la alineación de ayer. Javier Hernández Carrera, 20 años y natural de Jerez de la Frontera, aparecía en el once inicial para enfrentarse al Sporting de Gijón en un encuentro de máxima rivalidad y trascendencia. En un ambiente que invita más a esconderse que a destacar, el central demostró una vez más que esta temporada puede convertirse en un futbolista de suma importancia para el Real Oviedo. 

Debutó con el primer equipo en Copa del Rey. En la jornada 8, contra el Albacete, lo hacía en Liga. Desde entonces, su participación ha sido sobresaliente y no parece que tenga techo. Se da la circunstancia, además, que ha participado y ganado el derbi con el primer equipo y también con el filial. 

El Sporting, su rival favorito

El pasado 9 de septiembre, en El Molinón, el andaluz formó parte de la defensa azul que venció al Sporting B. El Vetusta tomaba el feudo en el que no hace mucho caía el primer equipo. En el minuto 80, Javi Hernández aprovechaba un saque de esquina para hacer el 1-2 definitivo. Para el recuerdo, su celebración mostrando el escudo del Real Oviedo. En poco más de un mes en Asturias, el andaluz mostraba su total implicación. 

Ayer, en el Carlos Tartiere, repetiría en un derbi. Esta vez el de «mayores». Lo mejor es que no desentonó para nada. Javi Hernández ha ido creciendo poco a poco desde que cogiera la titularidad ante el Albacete. De hecho, la semana pasada poca gente entendió su suplencia en Riazor. 

Tras su nueva exhibición, el andaluz se ha consolidado como titular en la zaga azul, el dueño del flanco izquierdo en esa línea de tres centrales tan característica del Real Oviedo. Los cuatro encuentros que ha disputado con el Vetusta parecen ya lejanos. Su lugar, y ojalá su futuro, están ligados al primer equipo