El Real Oviedo podría jugar amistosos antes de volver a la competición

La Voz / EFE

AZUL CARBAYÓN

Tejera, con Sangalli al lado y Nieto detrás, conduce un balón ante el Sporting
Tejera, con Sangalli al lado y Nieto detrás, conduce un balón ante el Sporting César Quian

La RFEF incluye los encuentros no oficiales entre sus recomendaciones para el regreso de los entrenamientos

12 may 2020 . Actualizado a las 18:05 h.

Las recomendaciones de salud para la vuelta a la competición del departamento médico de la Federación Española de Fútbol (RFEF) incluyen la posibilidad de que los equipos técnicos programen partidos amistosos, con un límite de participación por jugador de 45 minutos en el primero de ellos.

El documento publicado este martes por la RFEF indica que «en los dos días posteriores a cualquier partido amistoso la actividad a realizar por quienes hubiesen jugado más de 40 minutos debe ser de menor intensidad», para controlar la carga «en esta fase de rendimiento», posterior a la inicial denominada de «reentrenamiento».

«Si el tiempo de confinamiento se prolongase más de 6 semanas, y la duración del periodo entre el inicio de entrenamiento autorizado en grupo y el primer partido de competición fuese de más de 3 semanas, a partir de ese momento los criterios de entrenamiento deberían de ser los mismos que en circunstancias normales», añade.

La RFEF recordó que las recomendaciones de su departamento médico fueron presentadas en una primera instancia al Consejo Superior de Deportes para que, junto con otros, se elaborara el Protocolo aprobado este con el aval del ministerio de Sanidad y publicado en el Boletín Oficial del Estado.

En lo que denomina «Adaptación de las normas intra-partido», además de los cinco cambios la RFEF alude a las pausas de refresco y descanso ya habilitadas para los minutos 30 y 75, para «producir una pausa en el juego que permita reducir la fatiga de los jugadores».

«Estas pausas se deberían habilitar para los cinco primeros partidos oficiales independientemente de la temperatura ambiental, y en las condiciones previstas en el documento de Influencia de las altas temperaturas en la práctica del fútbol de la RFEF, dado que como acreditan los estudios científicos, jugar al fútbol soportando más de 30 grados centígrados provoca un aumento de la temperatura corporal del futbolista y se desencadenan los mecanismos que alteran la termorregulación y que pueden dar lugar a los Síndromes por Calor», señala.

Ante las altas temperaturas que pueden registrarse en muchas zonas de España en verano, propone que «cuando la temperatura ambiental sea igual o superior a 30 grados centígrados, se protejan determinadas franjas horarias en las que no deberían disputarse encuentros, eliminando las horas centrales del día, entre las 12:00 horas del mediodía y las 19.00 h, para celebrar partidos de fútbol en los meses de verano, siempre y cuando la temperatura ambiental sea igual o superior a 30 grados centígrados».

La RFEF apuntó que su protocolo «es una ayuda a los clubes y a los futbolistas para la protección de su salud y servirá de referente para las competiciones que organice la propia Federación en los próximos meses en todo aquello que no se contradiga con el protocolo del ministerio de Sanidad», «para evitar los riesgos» y «favoreciendo el estado de forma de los/as futbolistas».