La «situación límite» del hospital de Jove: 36 pacientes con una sola enfermera

E. G. B. GIJON

GIJÓN

Hospital de Jove en Gijón
Hospital de Jove en Gijón

«El hospital está totalmente saturado y con todas las unidades llenas. La carga de trabajo es inasumible», denuncian desde el comité de empresa

17 sep 2019 . Actualizado a las 19:38 h.

El comité de empresa de la Fundación Hospital de Jove denunciaba hoy la «situación límite» que se está viviendo en el centro y que, de no adoptarse «medidas urgentes», provocará consecuencias «importantes con respecto a la atención de nuestros pacientes». El cierre alternativo de plantas iniciado en julio ha derivado en situaciones de «nivel crítico» con el hospital «totalmente saturado» y ocasiones en las que una sola enfermera tenía que atender a 36 pacientes ante la decisión de que fueran los propios trabajadores de las plantas cerradas quienes sustituyeran al personal de vacaciones.

«Queremos denunciar públicamente esta situación y alertar a la ciudadanía sobre el riesgo que todo esto supone para ellos, ya que evidentemente, y pese al esfuerzo del personal de este centro (y les aseguramos que es de grado superlativo), la carga de trabajo es inasumible por nosotros y no podemos garantizar la prestación de cuidados con la suficiente seguridad y garantía», advierten.

También hacen un llamamiento a la Consejería de Salud y a las personas responsables del Servicio de Salud del Principado (Sespa), como encargados de negociar el concierto con el hospital de Jove («recordamos que somos centro de referencia en el área V»), para que tomen las medidas oportunas que ayuden a subsanar las «deficiencias» que comenzaron cuando la gerencia inició el cierre de plantas, de forma alternativa, el pasado mes de julio.

«Imaginamos que con el fin de realizar obras de mantenimiento como por ejemplo cambiar todas las televisiones y el sistema de tarificación, por supuesto al alza», pero remarcan: «Decimos que imaginamos porque por mantener su dinámica habitual, el comité no fue informado y, además, todo el personal fijo de esas plantas se redistribuyó por las demás unidades dando las vacaciones del resto de personal». Es decir, que cubrir las vacaciones tuvo «coste cero».

¿Cómo se llevó a cabo esa «autocobertura»? Desde el comité explican que, desde julio hasta septiembre, la unidad del primero norte se fusionó con la planta de corta estancia, una unidad que habitualmente funciona solo de lunes a viernes y que pasó a hacerlo como una unidad de hospitalización al uso de forma ininterrumpida. «Después de un mes de julio de relativa calma en cuanto a sustituciones, arrancamos un mes de agosto en el que el caos fue protagonista de nuestro centro: la gerencia decide no sustituir prácticamente ninguna de las ausencias, ya sean programadas o no programadas».

¿Las consecuencias? Que «los números hablan por sí solos», dicen en el comité de empresa de Jove. Así, en agosto, aseguran que hubo más de 80 ausencias no sustituidas registradas, aunque «hay muchas no registradas», y, en septiembre, «la espiral de caos en la que el centro está sumido alcanza su clímax» al decidir la gerencia cerrar el segundo este, «planta que suele tener ocupación plena», y trasladarla al primero norte. «Pero no queda ahí la cosa, ya que la unidad de corta estancia ahora sí que funciona como tal, por lo que el viernes se cierra y el hospital deja de disponer el fin de semana de esas camas».

La consecuencia, añaden, es un hospital «totalmente saturado y con todas las unidades llenas», especificando que son plantas con 36 camas en el caso de los nortes y 34 en los estes. Ante esa saturación, explican que la gerencia ha buscado como solución el uso de más camas supletorias, «ni más ni menos que cinco en cada unidad de 34 camas, o lo que es lo mismo, el hacinamiento de tres pacientes en habitaciones diseñadas para dos, entre otras cosas porque el tercero no dispone ni de armario».

Esta situación provoca que «ahora mismo tengamos plantas con 36 y 39 pacientes respectivamente y, por supuesto, manteniendo la misma dinámica del mes de agosto en cuanto a sustituciones». Relatan además que ha habido tardes en algunas plantas en las que, con esos 36 pacientes, hubo una sola enfermera e incluso solo un auxiliar. «Se ha dado el caso, como el pasado domingo, que una unidad de tarde con 34 pacientes ha tenido que ser atendida tan solo por una enfermera y una auxiliar», añaden.