Medio Ambiente calcula que la chimenea propuesta por Arcelor reducirá las emisiones en un 21%
GIJÓN
Los informes técnicos que se están analizando en la consejería señalan que con el plan inicial la disminución era «prácticamente equivalente»
30 nov 2021 . Actualizado a las 13:59 h.El Gobierno asturiano considera favorable desde un punto de vista técnico y de afección al medio ambiente el cambio propuesto por ArcelorMittal para reducir la contaminación provocada por el sínter B de Gijón, ya que la nueva solución prevista mantiene la reducción de las emisiones contaminantes en niveles similares, según el consejero de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático, Juan Cofiño.
Su departamento estima que la chimenea que propone construir ArcelorMittal en vez del filtro inicialmente previsto para el sistema depurador secundario del sínter B disminuiría hasta un 21,3% las concentraciones anuales de partículas contaminantes PM10 en la zona oeste de Gijón.
La multinacional siderúrgica Arcelor Mittal tiene previsto destinar 7,2 millones a un plan de inversiones para reducir la contaminación de su planta de Gijón con la construcción en 2022 de una chimenea de 60 metros que reduzca las emisiones del sínter B y la instalación, en 2023, de un sistema de captación de emisiones en el sínter A.
En respuesta a una pregunta formulada en el pleno del parlamento autonómico por el coordinador de IU, Ovidio Zapico, Cofiño ha apuntado que el cambio aún se está analizando, pero en principio la modificación del plan inicialmente previsto se considera positiva teniendo en cuenta además que la vida del sínter B tiene una «duración brevísima» si se mantienen los planes de la empresa para su transición hacia el acero verde.
El filtro se considera ahora económicamente inviable, dado que el plan que acometerá la empresa en tecnologías para la descarbonización de sus operaciones en la factoría de Veriña incluye el desmantelamiento del sínter en 2025.
La vida útil de la chimenea, sin embargo, sería superior a la del propio sínter B, ya que servirá a futuras instalaciones incluidas en el plan de descarbonización de la empresa.
Los informes técnicos que se están analizando, según Cofiño, señalan que con el plan inicial la disminución de la contaminación era del 22,8% y con el actual «sería prácticamente equivalente», informa Efe.
