El Lolín Ibérico, elaborado por el local gijonés La Manoleta Gastro, logró un sitio en la final del I Campeonato de Bocatas de España celebrada el pasado martes en Oviedo
06 jun 2024 . Actualizado a las 13:19 h.Un bocadillo asturiano se cuela entre los finalistas del Campeonato Best Sandwich Spain. El emparedado creado por Juanjo Bueno, cocinero y responsable de cátering de La Manoleta Gastro, compitió contra más de 120 participantes, hasta llegar a posicionarse como uno de los dieciséis mejores de España.
Fue el pasado martes cuando se disputó en Oviedo la final del I Campeonato de España de Bocatas donde dieciséis establecimientos se han jugado el título a mejor bocadillo del país, entre ellos, La Manoleta. El local gijonés presentó una de sus mejores creaciones, el Lolín Ibérico, «un brioche de carrillera ibérica de Bellota cocinada a baja temperatura, que lleva además una salsa de alioli ligera y unos dados de tomate concassé», describe Juanjo. Además, «elaboramos una salsa de boletus que echamos por encima y rematamos con una salsa demiglace que hacemos con el jugo de cocinar la carrillera».
La convicción y la confianza que Juanjo depositó en su creación le hicieron presentarse «de calentada al campeonato a mejor bocadillo de España». Durante el proceso, «que duró aproximadamente un mes», cuenta el cocinero, «un día a una hora concreta una jueza asistió al local, probó el bocadillo y se marchó. Después vinieron dos o tres inspectores, pero en esta ocasión fueron de incógnito, no sabíamos quiénes eran».
El público también tuvo la oportunidad de participar en la elección de los ganadores. Tras probar el bocadillo, «les dábamos un ticket para que pudieran votar al que ellos considerasen el mejor». Finalmente, el Lolín Iberico, se hizo con el primer puesto a nivel autonómico, lo que le dio un pase directo a la final nacional.
La final, celebrada el pasado 4 de junio en el espacio MESTURA, en Oviedo, contó con la participación de jueces como el cocinero asturiano Nacho Manzano, el crítico gastronómico José Carlos Capel, o la periodista Julia Pérez. «Fue un día que vivimos con muchos nervios. Acudí allí con Lorena Iglesias, quien me ayudó en la creación y elaboración de bocata. Teníamos una hora para preparar ocho bocadillos, siete para el jurado y uno de presentación, en las cocinas del Hotel España».
¿La clave del éxito del Lolín Ibérico? «No la sé decir, solo sé que gusta. De primeras el bocadillo de carne no suele llamar la atención, pero todo el mundo que lo prueba repite». El bocata continúa en la carta de La Manoleta, por un precio de 12 euros.
Otros de los éxitos populares del local son su bocadillo de costillas, cocinado a baja temperatura, el brioche de pollo, el de solomillo o algunas de sus hamburguesas.
Este campeonato no es el único logro del local gijonés, quien cuenta con otros títulos como Mejor Pincho Asturiano 2023, una segunda posición en el Campeonato de Tapas de Mahu y una tercera en el Campeonato de España de Food Trucks, entre otros. El equipo de La Maloneta no descarta presentarse a nuevos campeonatos. «Si el año que viene se celebra repetiremos sin duda. Aunque a veces llegan tantas propuestas, como el campeonato de pinchos, que comenzó la pasada semana, o el de tacos, que es imposible presentarse a todo».
Historia de La Manoleta.
El local gijonés abrió sus puertas en 2012 en el barrió de Pumarín bajo el nombre «La esquina de los Manolitos». En el 2015 y tras su gran éxito, decidieron comprar su primera caravana, «La Manoleta», quien daría nombre a sus siguientes proyectos. «Convertimos la caravana en una Food Truck y comenzamos a asistir a eventos como Metrópoli, gastromarkets y mercazocos. Una vez metidos en el asunto empezaron a llamarnos de eventos privados, a los que ahora nos dedicamos en exclusividad». En el 2021, se hicieron con el local situado en la plaza 6 de agosto donde abrieron La Manoleta Gastro, un establecimiento especializado principalmente en desayunos y comidas, en el que «algunas tardes o noches también realizamos eventos a puerta cerrada».
Una de las últimas incorporaciones fue el kiosko situado en el paseo de Begoña donde los viandantes pueden disfrutar también de algunos de sus productos. Además, cuentan con un local en la calle Covadonga, «donde se encuentra la oficina en la que gestionamos el tema de cátering y eventos privados y donde llevamos a cabo las exposiciones para que los clientes puedan ver los emplatados, los platos, las vajillas, los manteles, bueno, que vea un poco de todo».