Con las altas temperaturas estivales, lo que más apetece comer es algo fresquito, ligero y fácil de preparar. Las sopas y cremas frías son frescas, saludables y deliciosas, por eso se convertirán en tu mejor aliado cuando aprieta la canícula

En invierno solemos recurrir al abrigo de una buena sopa o crema. Por el contrario, en verano queremos algo totalmente diferente y que nos ayude a superar las altas temperaturas del día. Es en esta época del año, cuando el sol no deja de calentar, en la que lo más fácil es hacerse una ensaladita pero, un buen gazpacho, una sopa fría o una vichysoisse son también una magnífica opción.

Estas recetas veraniegas son una elección deliciosa en las que podemos mezclar vegetales, frutas de temporada y otros ingredientes naturales que aportarán vitaminas, minerales, fibra, antioxidantes y otros nutrientes a nuestro organismo. Además, son muy fáciles y rápidas de preparar y se sirven muy frías, pudiendo añadir hielo en ellas para, de este modo, conseguir un efecto más refrescante. 

Vegetales con cuchara ideales para el calor

Vivimos en una sociedad que está obsesionada con la imagen. Si bien es cierto que los meses previos al verano se ha puesto muy de moda la “operación bikini”, una vez llegado el buen tiempo y la época estival, solemos descuidar un poco más nuestra alimentación.

Si queremos seguir guardando la línea en verano, las sopas frías son una oportunidad muy buena para incluir vegetales en nuestra dieta. Con una sopa fría de pepino, calabacín y aguacate conseguiremos un plato muy refrescante y completo, perfecto para tomar como entrante o como cena ligera. Si lo consumimos como entrante podemos acompañarlo, por ejemplo, de verduras salteadas o unos crutones de pan para conseguir un plato todavía más completo.

Gazpachos que te dejaran al borde de un ataque de nervios por su increíble sabor

Esta quizás sea la receta más popular del verano junto a las ensaladas. Su origen es incierto pero la palabra gazpacho ya aparece en el primer diccionario general monolingüe del español, en 1611, definido como comida propia de segadores y gentes rústicas. Actualmente, esta receta popularmente a base de tomate es consumida por todos, pero muchos la han reinventado.

Si eres de los que apuesta por probar cosas diferentes, este verano es una buena oportunidad para preparar un gazpacho de lechuga y yogur. La lechuga da mucho más juego que comerla únicamente en ensaladas. Podemos utilizarla para elaborar wraps y tacos, por ejemplo, pero en la opción de gazpacho nos dará un resultado fresco y original que llevará a esta creación al top de tu recetario básico de verano.

Si queremos seguir innovando, pero somos más de fruta que de lechuga, podemos elaborar un gazpacho de piña, una receta que se queda a medio camino entre lo salado y lo dulce. Esta refrescante receta perfecta para los días de calor será realmente eficaz para rehidratarse y nutrirnos con todas sus propiedades. Podemos disfrutar de ella como desayuno, merienda, postre o como entrante en la comida o cena. Otra opción es beberla acompañando nuestras comidas.

Estas recetas de verano son tan fáciles y rápidas de preparar que no te harán perder el tiempo en la cocina con recetas muy elaboradas. Será prepararlas, consumirlas y, de nuevo, tomar el sol en la playa o piscina tras habernos refrescado e hidratado con esta delicia de sabores.

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