La Alhacena de Campoamor, en Oviedo, busca nuevo dueño: «Aquí nunca tuvimos problemas con los clientes»

Esther Rodríguez
Esther Rodríguez REDACCIÓN

LA VOZ DE OVIEDO

Arancha y Alberto,  propietarios de La Alhacena del Campoamor
Arancha y Alberto, propietarios de La Alhacena del Campoamor

La tienda situada en la calle Campoamor se ha convertido en un lugar de referencia para comprar a granel

11 ene 2023 . Actualizado a las 09:35 h.

La Alhacena del Campoamor se ha convertido en un lugar de referencia para comprar a granel en Oviedo. Cada vez son más los clientes que transitan esta tienda de alimentación, situada en la calle Campoamor, para adquirir la cantidad deseada de un producto alimenticio, mientras que al mismo tiempo reducen el uso del plástico y reutilizan recipientes respetuosos con el entorno. Sin embargo, hace unos meses en su escaparate luce un cartel en el que se informa de que el negocio se traspasa. «He conseguido sacar una plaza como maestra y no puedo seguir dedicándome a esto. Me da una pena infinita pero lo dejo por mi pasión, que es enseñar», asegura Arancha Álvarez Rodríguez, quien espera que alguien tome las riendas del negocio y vaya en la misma línea puesto que el trabajo «es muy satisfactorio en todos los sentidos».

Fue dos semanas antes de que se decretase el confinamiento por la pandemia por el coronavirus cuando Arancha Álvarez Rodríguez se puso al frente de La Alhacena de Campoamor. «En aquel momento también se traspasaba la tienda y como era clienta habitual, ya que siempre me ha gustado mucho el mundo de lo ecológico y comer de manera sana y saluda; me parecía y me parece la tienda más bonita que vi nunca; transmite unas sensaciones de paz y tranquilidad con los olores pues no lo dude ni un instante», asegura.

Comprar productos al peso y con envases reutilizables

Venta de productos a granel en La Alhacena de Campoamor
Venta de productos a granel en La Alhacena de Campoamor

A partir de ese momento, Arancha junto con su marido Alberto siguió dándole vida a esta tienda que ofrece productos a granel tales como legumbres, cereales, frutos secos, semillas, especias, café o infusiones. «Es muy necesario para el medioambiente que la gente venga a comprar con sus bolsas de tela, sus frascos o tarros de cristal… porque no podemos seguir con este ritmo tan acelerado de consumo de plástico», denuncia Arancha, antes de recordar que esta forma de adquirir alimentos al peso y que cada uno se lleva sus propios envases al comercio «no es nada nuevo», puesto que nuestros antepasados ya comercializaban así. «Me acuerdo cuando de pequeña iba a por huevos y me los ponían en la cesta o llenaba un frasco para que me lo rellenasen de colonia», rememora.

Además el establecimiento cuenta con elaboraciones veganas, sin gluten y gourmet. También tiene a disposición de los clientes productos cien por cien asturianos como galletas, mermeladas, turrones, cremas de cacao o incluso huevos. «Tenemos muchos productos de muchos productores de aquí. Intentamos todo lo posible en volcarnos en productos de cercanía porque por un lado a nosotros nos presta poder ofrecerlo, ya que no sirve de nada que a la gente le guste lo ecológico y los productos tengan que venir por ejemplo de Tailandia en tres aviones. Además a la gente le gusta y lo valora mucho».

De la misma manera, La Alhacena de Campoamor cuenta con súper alimentos como melena de león, macas, rosa mosqueta, maqui berry y una infinidad de bienes exóticos. «Aquí tenemos productos que son muy difíciles de encontrar como el reishi, que es un hongo, o un té matcha que traemos de Japón que es muy especial», detalla Arancha Álvarez Rodríguez antes de asegurar que «si algún cliente necesita cualquier producto que no es muy habitual, nosotros se lo conseguimos o por lo menos lo intentamos».

Variedad de mermeladas que se venden en La Alhacena de Campoamor
Variedad de mermeladas que se venden en La Alhacena de Campoamor

Una gran variedad de productos que entre sí guardan una estrecha relación: la calidad. Además de todos ellos el más demandado es el aceite de oliva virgen extra ecológico, «aunque en esta época del año no damos abasto con los dulces navideños». También las cestas regalo que Arancha y Alberto preparan para las navidades o para sorprender a un cumpleañero, al amigo invisible o demás protagonistas de otras celebraciones son un gran reclamo para los clientes. Unos clientes «que son lo mejor que nos ha pasado en estos casi tres años».

La Alhacena de Campoamor cuenta con una fiel y responsable clientela

Bajo esta premisa, Arancha Álvarez Rodríguez señala que «aquí la gente lo respeta todo, no estropea nada. No es como en un centro comercial o en tiendas grandes que todo el mundo va a revolver y deja las cosas por donde pinte, aquí todo lo contrario». Además, aunque trabajar de cara al público no es una tarea fácil, «este trabajo es muy satisfactorio porque no es como por ejemplo atención al cliente que todo el mundo va a gritarte sino que salen y entran muy contentos. Siempre tienen buenas palabras para ti». «Es increíble», añade la ahora maestra, quien agradece también el trato con los proveedores. «Fue una suerte todo. No puedo decir nada mal de nadie porque nunca tuve ningún problema ni con los clientes ni con los proveedores», asevera.

Ahora Arancha Álvarez Rodríguez tendrá que despedirse de todos ellos, mientras tanto buscará a alguien para que tome las riendas de La Alhacena de Campoamor. «Ya hay varias personas interesadas, pero lo que buscamos es el perfil de una persona que quiera continuar con el negocio tal y como lo tenemos nosotros. Había individuos que querían cambiar totalmente el negocio y les dijimos que no porque aquí contamos con productos y detalles que la gente valora y quieren que siga habiendo», asegura.