El «enorme» mero de 54 kilos que se sirve por raciones en un restaurante de Oviedo

Esther Rodríguez
Esther Rodríguez REDACCIÓN

LA VOZ DE OVIEDO

Así es el mero que ha adquirido el Llar de La Catedral
Así es el mero que ha adquirido el Llar de La Catedral

El establecimiento no deja de recibir reservas para catar este ejemplar que se prepara a la plancha, a la espalda, al horno y al queso La Peral

23 nov 2023 . Actualizado a las 18:22 h.

54 kilogramos de peso y 150 centímetros de largo. Ese es el tamaño del enorme mero con el que se ha hecho el Llar de la Catedral. Se trata de un ejemplar único, teniendo en cuenta que su peso medio es de unos cuatro o cinco kilos. En esta ocasión, el «gigante» pescado fue capturado en el mar Cantábrico el pasado martes, 21 de noviembre. Tras dejarlo reposar durante unas horas, el pez ya forma parte de la carta del establecimiento ovetense, que no ha parado de recibir reservas de individuos interesados en catar el mismo.

Algunos de los clientes de este restaurante situado en la plaza de la Catedral de Oviedo ya han podido degustar este pescado, muy apreciado por su sabor y su suave textura. «Hemos servido un total de 27 raciones a la hora de la comida», asegura el hostelero José Luis Cuesta, antes de señalar que el mero se servirá también mañana viernes y a lo largo de todo el fin de semana. «Calculo que hasta el domingo tengamos todavía este pescado», apunta.

Tanto en el servicio de comidas como en el de cenas, José Luis Cuesta y el resto del equipo que conforman el Llar de la Catedral, donde su hermano Juan es el cocinero, servirán el mero utilizando diferentes recetas. «Lo preparamos a la plancha, a la espalda y también con salsa de queso La Peral. Lo que es la ventresca la vamos a preparar al horno», detalla el hostelero, quien anima a todo aquel a reservar dado que «es una pieza que no se ve habitualmente».

Junto con este mero salió también otra pieza de grandes dimensiones. Un ejemplar de 48 kilos que fue a parar a un restaurante de Madrid. Algo «extraordinario», puesto que «no se pescan meros así todos los días». «De ocho kilos sí que es más común», asevera José Luis Cuestas, antes de confesar que ya ha probado la pieza y «está muy buena».

«Seguro que hay gente que duda de si al ser tan grande puede estar sabroso pero ya les digo yo que sí. Que no pierdan la oportunidad de probarlo porque es probable que no se vuelva a pescar uno más así», apostilla.

No es la primera vez que el Llar de la Catedral se hace con un pescado de grandes dimensiones. En otra ocasión, sus propietarios compraron una bonita blanca de unos 40 kilogramos de peso aproximadamente. Aunque sí que es cierto que nunca habían tenido en su expositor un pez tan grande como este mero.