El juez del caso Alvia llamará a declarar al director de Seguridad de Renfe

Pablo González
Pablo González REDACCIÓN

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Paco Rodríguez

Pide identificar a este cargo y a los técnicos de Ineco que evaluaron la línea

16 sep 2017 . Actualizado a las 10:02 h.

La confirmación de la imputación del exdirector de Seguridad en la Circulación del ADIF, Andrés Cortabitarte, abre la vía a más declaraciones, bien como investigados o como testigos, de otros responsables que tuvieron algo que ver en la puesta en servicio y en los análisis de riesgos de la línea de alta velocidad Santiago-Ourense, donde se produjo el accidente del Alvia. El juez del caso, «a la vista de la declaración del investigado Andrés Cortabitarte», solicita a la representación procesal de Renfe que en el plazo de cinco días identifique al director de Seguridad en la Circulación de la operadora «a la fecha de inauguración de la línea y, en su caso, a la fecha en que se produjo la desconexión del ERTMS embarcado en el tren».

Es obvio que el juez Andrés Lago Louro pretende que Antonio Lanchares, que sigue a día de hoy ostentando la Dirección de Seguridad en la Circulación de Renfe, preste declaración sobre el accidente del Alvia, pues la petición de identificación es el paso previo para este tipo de trámites procesales. Falta por saber si lo llamará como imputado o como testigo, aunque fuentes del procedimiento dan por hecho que lo hará como investigado, de forma que los dos principales responsables de seguridad cuando se puso en marcha la línea, el del ADIF y el de Renfe, den explicaciones sobre sus decisiones en sede judicial al mismo nivel de responsabilidad.

En paralelo, el juez pide al ADIF que identifique a los técnicos o personas responsables de la redacción del informe de evaluación independiente que se encargó a Ineco, empresa pública de ingeniería. De acuerdo con la declaración de Cortabitarte, eran los responsables de «evaluar y gestionar los riesgos inherentes» a la línea. En este caso, fuentes del procedimiento vaticinan que podrían declarar como testigos.

Se trata de la primera vez que se implica a un responsable de Renfe en la investigación matriz del accidente que causó 80 muertos y 144 heridos a las puertas de la estación de Santiago en julio del 2013. Otros responsables de la operadora declararon a raíz del aviso del jefe de maquinistas de Ourense, José Ramón Iglesias Mazaira, sobre la peligrosidad de la curva de Angrois. Antonio Lanchares figuró en muchas peticiones de imputación de las partes, pero solo fue interpelado sobre este descarrilamiento durante su comparecencia en la subcomisión de estudio del sistema ferroviario que se constituyó en el Congreso de los Diputados después del accidente.

También es la primera vez que se da relevancia procesal a la desconexión del ERTMS embarcado en el Alvia pues, según el perito judicial César Mariñas, este sistema podría haber evitado el accidente. El maquinista se vería obligado a reconocer la transición entre ERTMS y ASFA y, en caso de no hacerlo, el propio sistema de seguridad habría detenido el tren automáticamente antes de la curva de Angrois.

La aseguradora de Renfe, QBE, incide en un escrito en la importancia de esta decisión, solicitada por el propio Antonio Lanchares en junio del 2012 por un período de un mes y autorizada de inmediato por Andrés Cortabitarte. Pero la desconexión no duró un mes: se prolongó hasta la fecha del accidente, el 24 de julio del 2013, e incluso después.

QBE solicita ahora que se reformulen algunas cuestiones incluidas en el oficio remitido a la Agencia Ferroviaria de la Unión Europea para que elabore un dictamen sobre el accidente. En este sentido, piden que se pregunte si la desconexión del ERTMS puede ser considerado un cambio significativo en la operación de la línea y, por tanto, susceptible de evaluar los riesgos que implicaba esta decisión y, posteriormente, mitigarlos. Este hecho, aducen, «sí podría haber contribuido en la causación del accidente».

La aseguradora de Renfe también solicita que Allianz, la aseguradora del ADIF, preste fianza para asegurar las responsabilidades civiles a la vista de la confirmación de la imputación de Andrés Cortabitarte. QBE culmina así buena parte de su estrategia procesal, consistente en intentar compartir las indemnizaciones por el accidente con el seguro del administrador ferroviario.

Por otra parte, la solicitud del informe sobre el accidente del Alvia a la Agencia Europea del Ferrocarril tendrá que volver a enviarse. Debido a un error en la dirección del ente de la UE, el oficio ha llegado devuelto al juzgado de Santiago que investiga el caso. Habrá que reenviarlo.