Fomento precisa más de 1.500 millones para ejecutar sus planes en Asturias

Raúl Álvarez REDACCIÓN

ASTURIAS

Íñigo de la Serna presenta el Plan de Vías en Gijón
Íñigo de la Serna presenta el Plan de Vías en Gijón

El ministerio combinará su propio presupuesto con la capacidad de Renfe y Adif para endeudarse y recurrir a los préstamos

16 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Con el plan para la modernización de las líneas ferroviarias de cercanías presentado el jueves en Oviedo, el Ministerio de Fomento acumula compromisos para invertir en Asturias más de 1.500 millones de euros hasta el año 2025. En sus trece meses al frente del departamento, Íñigo de la Serna ha desbloqueado proyectos atascados y ha prometido una lluvia de dinero para atajar el déficit de las infraestructuras de titularidad estatal en la comunidad autónoma. Las malas experiencias históricas de la región con los sucesivos titulares de Fomento, proclives a anunciar actuaciones que se pierden en retrasos interminables o se olvidan sin haberse materializado, y el extremo régimen de austeridad impuesto por Cristóbal Montoro desde que el Partido Popular ganó las elecciones que le devolvieron al poder en el 2011 han rodeado de escepticismo y asombro la acogida a los planes del ministro. ¿De dónde van a salir esas partidas si en el 2017 la inversión conjunta de todos los ministerios en Asturias apenas alcanzará los 211 millones de euros? El ministro, sin embargo, garantizó en el acto celebrado en la Delegación del Gobierno que no faltarán fondos y fuentes de su equipo lo confirmaron ayer a La Voz de Asturias. «Todos los anuncios del ministro son obligaciones que contrae con los asturianos y los ciudadanos podrán ver que se cumplen en los próximos años», señala un portavoz del departamento.

Acostumbrada a largos silencios y a evasivas por parte de los ministros de Fomento, la sociedad asturiana ha visto de cerca a De la Serna con una frecuencia inusual. El exalcalde de Santander ha realizado ocho visitas oficiales a la comunidad autónoma en un año, tiene otra confirmada para antes de que acabe el 2017 y ha prometido volver cada seis meses para que el Principado y los ciudadanos puedan evaluar el cumplimiento de los proyectos. En esas estancias en la región, ha confirmado planes anteriores o anunciado nuevas obras en una lista que no ha dejado de crecer. El grueso de la inversión irá a instalaciones ferroviarias ?el final de la variante de Pajares, la reparación del actual trazado por el puerto para el paso de mercancías, el plan de vías y el metrotrén de Gijón, el remate del soterramiento de la línea de Feve en Langreo y la modernización de las cercanías en toda la región? y eso, según Fomento, es una ventaja a la hora de financiarlas. Tanto Renfe como Adif (el organismo público que gestiona toda la infraestructura y las estaciones españolas), que se encargarán de ejecutar los trabajos, son entidades autónomas, preparadas para operar al margen de los presupuestos generales del estado. Tienen capacidad de endeudarse y de buscar sus propias vías de financiación, pueden recurrir a préstamos del Banco Europeo de Inversiones (BEI) y se escapan de las constricciones de la austeridad presupuestaria. Además, el Gobierno español, para reducir la factura donde pueda, intentará conseguir ayudas europeas en todos los proyectos con opciones de conseguirlas.

Antes de que la crisis económica y el recorte a la inversión pública significaran casi una década de dieta severa para las obras en Asturias, la región había conocido la mejor época de esfuerzo del Estado, en los que llegaban a los grandes proyectos entonces en marcha (la perforación de los túneles de la variante de Pajares y la construcción de la Autovía del Cantábrico) partidas que en el año del récord, el 2008, superaron los 1.000 millones de euros. Con el reparto del presupuesto de las obras en varios ejercicios, De la Serna no necesitará alcanzar ese ritmo, pero deberá convencer a Mariano Rajoy y a Cristóbal Montoro para superar la atonía del último lustro. «La de las cercanías es una apuesta necesaria, porque son el medio de transporte que usan a diario cientos de miles de asturianos y millones de españoles que no tienen coche. A veces, parece que se quedan a la sombra del AVE, pero son muy importantes para el ministerio y ahora va a verse», aseguran las fuentes del ministerio. Fomento sostiene que el dinero no ha sido ninguna cortapisa en la elaboración de la lista de actuaciones, sino que Renfe y Adif evaluaron las necesidades y solo cuando todas estuvieron identificadas se calculó lo que costaría abordarlas.

Pero esos 580 millones representan apenas la tercera parte de los proyectos que Fomento tiene en marcha en Asturias. Entre los planes que De la Serna ha heredado de sus antecesores o impulsado por iniciativa propia, el departamento ha asumido compromisos de gasto que superan la barrera de los 1.500 millones de euros. Estos son los principales:

-Acabar la variante de Pajares y ponerla en marcha para el año 2019 cuesta 250 millones de euros. Además, si las mercancías siguen remontado el puerto por la rampa actual, serán necesarios otros 145 millones para adaptar ese trazado, abierto en 1884, a las necesidades y los requisitos de seguridad del siglo XXI.

-Reanudar el interrumpido plan de vías, construir la prometida estación intermodal e integrar las cercanías en Gijón con el metrotrén costará hasta 500 millones de euros, aportados tanto por el Gobierno central, como por el Principado y el Ayuntamiento. Fomento se comprometió el pasado verano a asumir 270 millones.

-La infraestructura para poner en servicio el túnel que soterrará las vías de Feve en Langreo, entre los distritos de Sama y La Felguera, ya excavado con dinero autonómico costará 20 millones de euros. De la Serna ha anunciado este año que Fomento se haría cargo de ellos para poner fin a un pleito de largo recorrido entre las administraciones autonómica y central. Todo el proyecto debía financiarse con los fondos mineros del 2012, cancelados de forma unilateral por el Ministerio de Hacienda.

-El tercer carril de la autopista Y para descongestionar el tráfico entre Gijón y Oviedo es otra reclamación antigua de la sociedad asturiana. El equipo de la antecesora de De la Serna, Ana Pastor, la asumió y presupuestó el coste de las obras en 110 millones de euros. Los estudios previos ya han empezado para el tramo Oviedo-Lugones.

-En julio, el ministro asistió a la colocación de la primera piedra de la nueva autopista de acceso al puerto gijonés de El Musel. El acceso entre Lloreda y Veriña supone la inversión de casi 44 millones de euros y el túnel para salvar el barrio de Jove se dispara a 78.

-En su Cantabria natal, De la Serna ha prometido mejorar el trazado de la carretera N-621, que une la comunidad vecina con Asturias a través del desfiladero de La Hermida. El arreglo costará 60 millones de euros.

Esa lista, además, no agota las obras pendientes, que aún han de encarecer la factura total y elevarla hacia el umbral de los 2.000 millones de euros. En los próximos meses, Fomento ha de presentar su plan para la eliminación de la barrera ferroviaria de Avilés, un anuncio que la ciudad espera desde el cambio de siglo. Y en el 2018, de acuerdo con el calendario oficial, deben salir a licitación los dos tramos que faltan para completar la construcción de la autovía A-63 desde Oviedo a La Espina. Son el Cornellana-Salas, abandonado hace casi una década en mitad de los trabajos, y la segunda calzada para completar el Salas-La Espina. Y, aunque ese dinero no vaya a contabilizarse como inversión en Asturias, Fomento aún ha de eliminar el fondo de saco de la estación de León y licitar el tramo entre la capital leonesa y La Robla para que en el futuro el AVE pueda rodar sin interrupciones hasta la variante de Pajares.

Las obras ferroviarias, de acuerdo con las previsiones de Fomento, están garantizadas y por eso figuran entre los compromisos públicos del ministro. Las carreteras también son parte de los proyectos para los próximos años, aunque en ese caso sí pueden darse problemas derivados de los vaivenes políticos de la legislatura. Esas obras se financian íntegramente con cargo a los presupuestos del Estado y pueden sufrir altibajos. «Por eso es tan importante para el Gobierno que se apruebe su proyecto. Habrá más dinero disponible y se tendrán en cuenta nuevos proyectos. Si se prorroga el presupuesto del 2017, hay que asumir su techo de gasto y sus limitaciones», señala el Ministerio. Asturias aún debe esperar para descubrir si pueden acometerse en su territorio tantas obras a la vez.