«Los sindicatos piden calma, pero a nosotros nos pueden dar la carta de despido de un día para otro»

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Concentración delante de Hunosa
Concentración delante de Hunosa Carmen Liedo

Trabajadores de las contratas de Hunosa secundan un paro de 24 horas en protesta por la falta de un plan de empresa, a 19 días del fin de la minería

12 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los centros de trabajo de Hunosa vivieron ayer, martes 11, una jornada con paros intermitentes motivados por la falta de un plan de empresa cuando el fin de la minería está a la vuelta de 19 días. Tras conocer los trabajadores vinculados al ente estatal que la reunión del pasado lunes entre empresa y sindicatos había sido infructuosa al acudir Hunosa sin propuestas industriales, de reactivación y de diversificación, la respuesta de los mineros fue inmediata y en el área Sueros tomaban la decisión de no entrar al relevo de la noche, siendo secundado ese paro en los otros dos pozos y en el lavadero de El Batán en todos los relevos durante 24 horas, sobre todo, por los trabajadores de las contratas. Éstos aseguran estar viviendo una «incertidumbre» mayor incluso que la de los empleados de Hunosa puesto que temen que ante la falta de concreciones de qué pasará a partir del 1 de enero de 2019 podrían empezar a recibir cartas de preaviso de despido en los próximos días. Las subcontratas de Hunosa suman entre los trabajadores de interior, exterior, lavadero y limpieza más de 400 trabajadores, una cifra todavía superior a la plantilla de la factoría asturiana de Alcoa, que estos días también se moviliza contra el cierre de planta de Avilés.

«No se ha concretado nada ni para la plantilla de Hunosa ni para las contratas en cuanto a la extracción de carbón, pero la incertidumbre para los que estamos en subcontratas es muy grande», trasladaba a La Voz de Asturias un trabajador de Carbomec destinado al pozo Carrio, que admitía que desde los sindicatos les habían pedido tranquilidad. «Nos piden calma, pero a nosotros nos pueden dar la carta de despido de un día para otro», señalaba el mismo con el temor ya en el cuerpo de que a finales de esta semana les puedan llegar cartas de preaviso de despido en tanto en cuanto la empresa les debe notificar el cese con 15 días de antelación.

De hecho, él ya pasó por una situación similar hace exactamente dos años, cuando se dejó de extraer carbón en el pozo María Luisa, en el que trabajaba sacando mineral antes de ser trasladado para Carrio. La diferencia que marca es que entonces había un plan de desmontaje de maquinaria, «pero en este caso no hay nada y si se deja de sacar carbón el 31 de diciembre, a nosotros nos van a cesar porque es lo que estamos haciendo, sacar carbón. Esa es la incertidumbre», confiesa este trabajador de Carbomec.

El mismo asegura que comprende que los sindicatos están en plena negociación y que por eso «nos piden calma», pero reprocha que esta situación se da cuando quedan poco más de 15 días para el fin de la minería «y si no firman un plan que de continuidad a la extracción, nosotros a finales de este mes nos vamos para casa». Esa preocupación la manifiesta pese a que desde los sindicatos insisten que tratarán de negociar un plan industrial que garantice el empleo para todos los trabajadores vinculados a la empresa estatal minera, bien sean de plantilla o de contratas.

Protestas en la calle

Otra de las medidas de protesta llevadas a cabo en la jornada de ayer, martes, fue una concentración delante de las oficinas centrales de Hunosa en Oviedo. En la misma participaba un trabajador también de subcontrata, en este caso, del lavadero del Batán. Éste advertía que «la gente ya se ve muy nerviosa» como consecuencia de que no se haya avanzado nada en la negociación cuando «cada día esta más cerca el 31 de diciembre». «Esa es la causa de los paros», señalaba el mismo, que se hacía eco de las palabras de los representantes sindicales llamando a la calma ante las reuniones que están previstas para hoy miércoles, mañana jueves y el viernes. Sin embargo, pone el acento en que «si todo sigue igual, al final de semana podrían llegar las cartas de preaviso de despido».

El secretario de CCOO de Hunosa, Rubén García, confirmaba que se habían producido «paros intermitentes» en los diferentes centros de trabajo de Hunosa secundados, sobre todo, por los trabajadores de las contratas de Hunosa. El representante sindical se hacía cargo «de la intranquilidad que nos trasladan que tienen por el poco tiempo que hay para dar una solución a la minería» y volvía a insistir en sus declaraciones en que desde CC OO exigirán a Hunosa una transición energética justa que, a su entender, pasa «porque se garantice el empleo a todos los trabajadores vinculados a la empresa estatal, tanto los propios como los de las subcontratas». No obstante, aseguró comprender «la intranquilidad» de los mineros de las subcontratas «porque son la parte más débil del proceso».

Rubén García explica que para agilizar el proceso de negociación, y como ya se hicieran en anteriores planes, se celebrarán subcomisiones en lo que resta de esta semana. El mismo espera que «muy a principios de la próxima semana» se fije ya una reunión global en la que espera que Hunosa ya presente un plan industrial concreto, así como proyectos para la reactivación y diversificación de las comarcas mineras. De no ser así o no ser ese plan «el que estamos exigiendo» las organizaciones sindicales, asegura que pasarán «a medidas de presión y movilización». No obstante, el mismo matiza que «si hay intención por parte de SEPI, tengo claro que queda tiempo, pero es cuestión de actitud y voluntad», insiste el secretario de CCOO de Hunosa, que recuerda que el ente estatal «debe presentar un plan de reactivación para las comarcas mineras como empresa que tiene un compromiso con estos territorios».