El Museo de la Sidra de Asturias explica a sus visitantes el proceso de elaboración de la bebida asturiana por excelencia
25 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.La cultura sidrera atrapa no solo a los asturianos, también a los turistas que vienen a Asturias atraídos por esta bebida tan especial. Todos quieren conocer sus secretos, y Nava, pone al alcance tanto de habitantes como de visitantes la elaboración de la sidra, desde la recolección de sus selectas manzanas hasta que se escancia, bien fría haciendode de la tradición una delicia. Pero, ¿en qué parte de Nava podemos aprender se proceso de creación? Como no podría ser de otra manera, en el El Museo de la Sidra.
Este enigmático lugar esta destinado tanto para los turistas como los locales pues su objeto es mostrar la sidra en todo su significado: histórico, cultural, económico y social y lúdico. Además, no solo se habla de los trabajos necesarios para crear la bebida, viajando de lo tradicional a lo moderno, también se aprenden otros aspectos de los ambientes ligados a esta cultura y a toda la tradición asturiana: el llagar o bodega, el chigre o bar, los juegos tradicionales como los bolos o el juego de la rana, y el folclore, que incluso ofrece la posibilidad de tocar una gaita electrónica.
Inaugurado en 1996 este museo vivo ofrece una experiencia inolvidable. Aunque antes de aventurarse a explorar esta cultura, el visitante debe saber que los tours están organizados siguiendo el ciclo de la sidra. El recorrido comienza en primavera y termina también en la misma estación debido a que es cuando las abejas, claves en el proceso de la creación de la sidra, polinizan los manzanos. Una vez aprendido esto, el museo lleva al espectador por las distintas etapas de elaboración del producto.
Etapas de elaboración
Preparación:
La recogida de manzanas tiene lugar entre los meses de octubre y noviembre. Una vez seleccionadas las mejores, se meten en la trituradora para facilitar el prensado de la fruta.
Prensado:
En el museo se pueden observar varias clases de prensas en un recorrido por la historia sidrera: desde las más rudimentarias a las más modernas.
Los chigres:
El lugar por excelencia de consumo de sidra. El museo escenifica este escenario para mostrar al visitante una costumbre heredada que data de tiempos muy antiguos.
El folklore:
Una gaita electrónica, un tambor y algunos juego tradicionales como el de la rana o los bolos ejemplifican la cultura popular asturiana e invitan a los visitantes a participar en ellas.
El escanciado:
La visita termina en la zona de escanciado, donde ilustran cómo echar un buen culín e invitan a todo aquel que lo desee a servir y tomarse uno.
Otros aspectos:
La fermentación el embotellado o los distintos tipos de sidra existentes (sidra natural, dulce, achampanada) son otros de los aspectos que los que allí acuden podrán aprender de martes a domingo, a partir de las 11.00 horas, en el Museo de la Sidra.