Estas son las razones por las que julio está siendo tan inestable en Asturias

Carmen Liedo REDACCIÓN

ASTURIAS

Oviedo en julio
Oviedo en julio

Aunque este mes está siendo algo más tormentoso de lo habitual, la precipitación acumulada está siendo menor de lo normal, según la Aemet

29 jul 2019 . Actualizado a las 16:58 h.

En lo que va de verano, poco más de un mes, Asturias ha tenido un poco de todo meteorológicamente hablando sin que el buen tiempo acabe de instalarse como es deseable en esta época: unos pocos días de sol espléndidos y temperaturas elevadas que enlazan con tardes tormentosas y, de repente, varios días de orpín y caída de los termómetros y vuelta a unas cuantas jornadas soleadas que con la entrada de una nueva borrasca agua el último fin de semana del mes. ¿Por qué está teniendo la región un julio tan inestable? ¿es lo normal para este mes en Asturias? ¿por qué no se acaba de instalar el buen tiempo si estamos en verano?

Las claves para entender lo que está pasando en este comienzo de estación las da a La Voz de Asturias el delegado de la Aemet en el Principado, Ángel Gómez, que parte de la situación geográfica de nuestra comunidad autónoma: «debido a que Asturias está situada en el noroeste de la Península Ibérica junto al Mar Cantábrico, y a la presencia de la cordillera Cantábrica, en Asturias también llueve durante el verano, aunque menos que el resto del año». Según apunta como ejemplos, lo normal es que en julio en Oviedo se acumulen 45 litros por metro cuadrado y en el Aeropuerto 47 litros por metro cuadrado. Por tanto, matiza que «es normalmente el mes menos lluvioso del año tanto en Oviedo como en el Aeropuerto». En el caso de este mes de julio, al que todavía le quedan unos días, la precipitación acumulada hasta el día 24 en Oviedo ha sido de 23 litros por metro cuadrado, y en el Aeropuerto de 22 litros por metros cuadrado. Esto implica que aunque la percepción que tenemos es que el comienzo del verano ha sido inestable, la realidad es que en cuando a precipitación «está siendo menor de lo normal, aunque aún faltan los últimos días del mes por sumar», comenta Ángel Gómez.

En lo que respecta a las tormentas, el delegado territorial de Aemet en Asturias explica que «es normal que las haya en verano en situaciones con aire cálido y húmedo junto al suelo y aire frío en altura, que hace que se dispare la convección profunda». Es decir, hace que el aire que hay en capas bajas ascienda, al ascender se enfría y condensa en forma de gotas de agua el vapor de agua que contiene, esta condensación libera calor, que hace que ese aire flote y siga ascendiendo de forma continuada hasta llegar a la cima de la troposfera (a unos 10 kilómetros de altitud), formando lo que se llama «una nube cumulonimbo que descarga precipitación en forma de chubascos y también en ocasiones granizo; y provoca descargas eléctricas (rayos)».

«La mayor parte del verano está por venir»

El número total de descargas eléctricas asociadas a rayos en Asturias entre los días 1 y 24 de julio de 2019 ha sido de 2.319. En julio de 2018 hubo 7.790 (fue un mes con muchas descargas eléctricas), sin embargo, en ese mes de 2017 hubo 1.549, en el de 2016 tan sólo 696 y en el de 2015 hubo 1.379 rayos. «Es decir, julio de 2019 está teniendo bastantes más descargas eléctricas que los julios de los años 2015, 2016 y 2017; pero muchas menos que julio de 2018», precisa Ángel Gómez, que se refiere, en concreto, a lo que llevamos de julio porque «el verano es mucho más que julio y la mayor parte aún por venir».

Aún faltan unos días de este mes por tener en cuenta; por lo que el balance que hace del mismo es que «se puede decir que está siendo algo más tormentoso de lo normal en Asturias, y que la precipitación acumulada está siendo menor de lo normal». La previsión meteorológica que se hace desde la Aemet llega como mucho hasta cinco días de forma fiable. La predicción estacional se hace en bloques de tres meses para que sea estadísticamente significativa y no para meses independientes. Las indicaciones que se avanzaron desde la Agencia sobre como iba a ser el verano en Asturias hablaban que en cuanto a precipitación había la misma probabilidad (33%) de que el verano fuera seco, normal o húmedo. Respecto a las temperaturas la estimación fue del 50 por ciento de probabilidad de que sea cálido, 30% de probabilidad de que sea normal y 20% de probabilidad de que sea frío.