Estos son los mejores lugares para bucear en Asturias

La Voz REDACCIÓN

ASTURIAS

Submarinista
Submarinista Pixabay

Los deportes acuáticos son una buena opción cuando el buen tiempo acompaña, pero se necesita de preparación

24 ago 2019 . Actualizado a las 14:18 h.

El calor veraniego se puede combatir de diversas formas: bien con un refrigerio, bien atechándose a la sombra o bien dándose un buen chapuzón. Refrescarse es una de las mejores opciones para luchar contra las altas temperaturas que vive la región este fin de semana, y combinar esta idea con una buena dosis de adrenalina es un cóctel que ayuda a digerir mejor el calor. Por ello proponemos una serie de puntos de la comunidad donde puedes disfrutar en su máximo esplendor del buceo, esta espectacular actividad acuática que cuenta con numerosos adeptos y varios clubes en Asturias. El litoral cantábrico encierra en su seno rincones ideales para la inmersión a las profundidades marinas, donde se puede descubrir el fondo marino en todo su esplendor.

Descubrir los cañones de Oviñana

Este lugar se trata de uno de los puntos de buceo más populares del occidente asturiano, debido principalmente a su fácil acceso y al espectacular panorama que se despliega ante los buceadores una vez llegados al laberinto de rocas submarino. El emplazamiento se sitúa cerca del Faro de Vidio, y el punto desde el que se puede comenzar la inmersión es el propio puerto de Oviñana, desde donde una cuesta marca la zona donde se puede entrar caminando al mar. Moverse por los pasillos de este lugar incomparable permite descubrir una gran variedad de fauna marina, como las esponjas, sargos, moluscos, o lubinas, sin olvidar la flora que se muestra como un espléndido bosque de algas. Los animales que pueblan este rincón de la costa asturiana resultan muy esquivos para los buceadores, y dan una divertida nota de color a esta experiencia. 

Contemplar un arcoiris submarino bajo la Playa del Silencio

Los secretos de esta zona están reservados solo a los más valientes, ya que se trata de una zona submarina de difícil acceso, y que solo puede realizarse desde el propio arenal, que es considerado como uno de los más bonitos de toda la región. Este paraje único en la región se localiza en Cudillero. Para adentrarse en las profundidades y asistir al espectáculo que se extiende en el fondo marino, se debe tener en cuenta que hay que descender numerosos peldaños de piedras, por lo que el peso del equipo de submarinismo puede suponer que más de uno decida echarse atrás ante estos obstáculos. La vegetación es el mayor atractivo de este escondrijo subacuático, y hace que todas las dificultades que reviste llegar hasta este punto merezcan la pena. Si bien existe un gran número de especies animales que habitan estos fondos, las diversas tonaliades de color que aportan las algas, desde el verdor de las laminarias hasta los pigmentos más exóticos que presentan otras variedades de flora.

 El Castrón de Santiuste alumbra un área de buceo excepcional

Entre el Castrón de Santiuste y los islotes de Pesues se despliega una zona de buceo excepcional, muy recomendada por el entorno y que se extiende desde Llanes hasta Cantabria. El ecosistema de los acantilados de San Emeterio es la joya de la corona de este emplazamiento, y uno de los puntos de la región más espectaculares para las incursiones subacuáticas. Su entramado de galerías y cuevas submarinas situadas justo debajo de estos acantilados vírgenes, en los que habitan numerosos crustáceos, algunos de grandes dimensiones, que pese a la gran afluencia de visitantes a este rincón todavía se dejan ver. Los preciosos tapices que embellecen las formaciones rocosas cuentan con el amparo de bellos erizos de mar que también aportan un interesante toque de color a esta red de conexiones submarinas. 

El Cabo Peñas, un lugar muy exclusivo

El mar Cantábrico muestra en este enclave su cara más brava, por lo que el buceo en esta zona solo se puede realizar contadas veces al año. En caso de poder hacer una inmersión, se debe llevar a cabo mediante una embarcación. Situado en la mancomunidad del propio nombre, formada por los concejos de Gozón y Carreño, es uno de los parajes más increíbles de Asturias, y no menos son los restos que se esconden bajo sus aguas en el pequeño islote de Erbosa, donde yace lo que queda del Costa Africana. Además de los objetos que pueden quedar de la estructura de la nave, uno se puede topar con los habitantes del lugar, como el caso de enormes congrios y diversos crustáceos. Debido al estado salvaje que muestra el mar en este punto, el hecho de poder bucear en este enclave ya es un logro, por la exclusividad que el Cantábrico otorga a los afortunados submarinistas que pueden adentrarse en sus aguas en esta zona.

Otras playas para descubrir sus entresijos

El litoral cantábrico cuenta con infinidad de arenales idílicos para la práctica de este deporte acuático. A los enclaves anteriormente citado, se les une una serie de playas de Asturias que no tienen nada que envidiar a las zonas descritas en esta información. De entre los numerosos arenales perfectos para el buceo destacan la playa de Plumineru, en Valdés; Porcía, El Franco; Mexota, Tapia de Casariego, o la del Merón, en Villaviciosa. Además de estos hay muchos más, por lo que si no encuentras alguno en este listado siempre puedes compartirlo como comentario.