Así cae la curva del coronavirus en Asturias

s.d.m.

ASTURIAS

Casos nuevos diarios por cada 10.000 habitantes, en Asturias
Casos nuevos diarios por cada 10.000 habitantes, en Asturias ISPA

Las estadísticas reflejan que el máximo pico de nuevos casos se registró hace más de dos semanas y el de mortalidad, hace diez días. El perfil de los fallecidos son varones, mayores de 75 años con enfermedades coronarias o diabetes

03 abr 2020 . Actualizado a las 08:57 h.

Unos dicen que la curva se aplana. Otros prefieren hablar de la fase meseta. Ambas expresiones vienen a decir algo muy similar. El ritmo de nuevos casos de coronavirus parece ralentizarse. Lo reconoce el Gobierno del Principado pero todavía con la boca pequeña. No quiere que un mal día le corrija. Por esa razón, el jefe del servicio de Epidemiología, Ismael Huerta, explica que «parece que empieza la curva de descenso pero es algo que hay que confirmar día a día». Los números recogidos desde el lunes 16 de marzo, casi 48 horas después de iniciar el confinamiento, apuntan en esa dirección. El porcentaje de nuevos positivos está por debajo del 10% e, incluso, ha llegado a bajar al 3,5% y el de curaciones ya se sitúa por encima del 20%. Aún así los totales asustan. Asturias tiene confirmados más de 1.400 contagiados y 70 fallecidos.

El momento más crudo, al menos en Asturias, se registró al final de la primera semana de confinamiento, el viernes, 20 de marzo. Esa jornada los indicadores estaban desatados. Hubo 144 nuevos positivos, lo que lanzaba la curva en una peligrosa verticalidad, con un crecimiento en menos de 24 horas del 44%. Todavía la mortalidad era muy baja pero pasó de dos a cinco, lo que hacía presuponer que ya era imparable. Porcentualmente, supuso un crecimiento del 150%, aunque en datos todavía tan bajos no eran tan significativo. 

En estas dos semanas y media de aislamiento, la jornada con una estadística más luctuosa se marcó apenas 72 horas después del máximo en los contagios. En la jornada del lunes, 23 de marzo, fallecieron 10 pacientes diagnosticados con COVID-19, lo que supuso un crecimiento proporcional del 83%. El domingo había 12 muertos. El lunes eran 22.

De dónde salen los datos

Todos estos son datos que la Consejería de Salud del Principado facilita a última hora de la jornada. La actualización se realiza cada 24 horas y se cierran los balances a las ocho de la tarde, así que, en realidad, los números están a caballo de dos días, de ocho de la tarde de uno a ocho de la tarde del siguiente. Son los mismos que unas horas después facilita el Ministerio de Sanidad, con la evolución puntual de todas las comunidades autónomas y Ceuta y Melilla. La fotografía de Asturias no es ni mucho menos la que reflejan otros territorios.

El ritmo de nuevos casos en la región está por debajo del 20%  desde ese viernes 20 marzo y no ha vuelto a alcanzar el 10% desde el viernes siguiente, el del 27 de marzo. Los positivos oscilan entre el 3,5% y el 8%. Es mejor que la media nacional. Lo mismo sucede con los fallecidos. En números globales en estas últimas jornadas entre los ocho, como peor dato, y uno registrado ayer, jueves. 

Pero las estadísticas también hablan de curaciones. Empezó tarde y con una evolución lenta. El recuento de pacientes restablecidos comenzó el 16 de marzo con solo uno. Entonces se explicó cómo era al proceso. No solo tenían que cesar los síntomas, fuese graves o leves. Para certificar que se había superado el COVID-19 era necesario someterse a dos test y debía arrojar resultados negativos de manera consecutiva. La semana apenas se registró 12 en total. Hubo días consecutivos sin ninguno. Era curva fue plana durante bastantes jornadas pero en este caso esto no suponía ninguna buena noticia. A partir de la segunda semana de confinamiento, la tendencia cambió. Cinco curados un día, otro 12, alguno de 13. Porcentualmente, es más inestable, se ven muchos picos en la gráfica. Hay balances con solo dos. Sin embargo, las últimas tres jornadas han sido las más positivas, con 19, 26 y 19, consecutivos.

Los propios médicos lo reconocen. Llegar al domingo con menos de 100 pacientes críticos sería importante para que así la próxima semana puedan comenzar a verse los frutos de las altas de los pacientes de la semana pasada. La versión del propio Ismael Huerta va en esa línea. Está convencido de que el confinamiento está dando resultados y el seguimiento telefónico de los casos leves que se está realizando desde Atención Primaria, también. En esos dos pilares cree que radica básicamente.

Perfiles

Ismael Huerta ha ofrecido información adicional sobre el perfil de los pacientes, que ayuda a entender con quién se está cebando este nuevo coronavirus. Los fallecidos son mayoritariamente varones de más de 70 años y la gran mayoría con otras patologías previas importantes que les convertían en población vulnerable no solo por la edad. No obstante, el jefe de Epidemiología ha especificado que los que están fallaciendo son mayores pero que no todos los mayores diagnosticados mueren. Algunos incluso presentan cuadros leves. Ayer mismo se dio el alta en Aviles a una paciente de 100 años. el HUCA hizo lo propio con un residente de Grado, de 95 años, la semana pasada. 

Hay más variedad en el perfil de los ingresados. La media de edad ya baja a los 60 años y hay más mujeres. Incluso hay casos de pacientes sin patologías previas. La mortalidad, en cambio, está asociada a persona con otras enfermedades, principalmente con hipertensión y enfermedades cardiovasculares crónicas o diabetes. Pero Huerta ha especificado que, al contrario de lo que podría parecer a priori, la patologías pulmonares no tienen tanta influencia.

El sistema sanitario público parece estar resistiendo. Esta misma semana el gerente del área especializada IV, Luis Hevia, señalaba que el HUCA estaba al 60% y que todavía había margen para atender a más pacientes en la UCI. Ayer, la gerente del Servicio de Salud (Sespa), Concepción Saavedra, ha asegurado que los hospitales públicos todavía no están al máximo de su capacidad. Ha contactado con centros privados como medida de precaución, dentro del plan de contingencia que se tiene en marcha, para ponerles sobre aviso por si fuese necesario utilizar sus recursos. A día de hoy, Saavedra asegura que no lo ha sido.