Asturias cerrará colegios con un «brote global»: tres o más casos sin relación entre ellos

l.f.

ASTURIAS

un alumno en un aula, clase, vacía

Salud traslada a los centros que hay que hacer PCR ante cualquier síntoma sospechoso. Insiste en que el aula es el espacio básico y en que hay que limitar los contactos

30 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

«Vamos a tener brotes y brotes en el ámbito educativo». La Consejería de Salud es consciente de que hay que comenzar a vivir con los diagnósticos positivos y así lo ha trasladado a los equipos directivos de los colegios e institutos públicos, privados y concertados con los que se ha reunido, en una primera videoconferencia liderada por el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño. En este encuentro se han comenzado a desvelar las guías de actuación ante la conformación de casos de COVID-19 en las aulas. Las instrucciones son sencillas. Ante cualquier sospecha, hay que aislar y realizar pruebas PCR. La unidad de convivencia es el aula. Se cerrarán colegios con un «brote global», lo que supone tres o más casos extendidos y sin vínculos entre ellos.

La reunión de coordinación con las direcciones tuvo lugar la mañana del viernes. Los docentes pudieron expresar las dudas que tenían tanto a Cofiño como a responsables de la Consejería de Educación. Se habló, por tanto, de aspectos puramente sanitarios y de otros educativos, como el retraso en el inicio del curso, anunciado por el Gobierno del Principado ese mismo día. Algunos directores expresaron su malestar por la demora, entre ellos, algunos de la red privada, que tenían previsto abrir incluso antes del día 10 de septiembre.

La guía de actuación

La guía de actuación para casos COVID-19 que se ha esbozado a los centros señala que hay que atender cualquier sospecha y por sospecha se entiende desde fiebre a dolor de garganta, tos o falta de aire tanto en los alumnos como en los profesionales de los centros, docentes y no docentes. Lo primero, en todos estos casos, es realizar una prueba PCR al sospechoso para confirmar o descarta la presencia de coronavirus. Mientras no haya una confirmación de un positivo, no es necesario adoptar medidas concretas, explicó Cofiño a los equipos. Si finalmente existe un caso diagnosticado, entonces intervendrá tanto Salud Pública como el Servicio de Salud del Principado (Sespa). Se estudiarán los contactos estrechos del centro y los personales. Los contactos estrechos tendrán que quedar en cuarentena domiciliaria y dejarán de acudir al centro.

El responsable de Salud señaló de manera expresa que solo se cerrarían colegios o institutos en los que se registre un brote global. Si en las residencias de ancianos un único caso se considera brote, en el ámbito educativo la definición es diferente, más similar al concepto general. Se decretará un brote con tres o más casos, extendidos y sin una relación clara y directa entre ellos. En esas circunstancias será el Servicio de Vigilancia Epidemiológica el que imparta órdenes a los centros sobre el modo de proceder. 

El Sespa designará una coordinadora del ámbito educativo en cada una de las ocho áreas sanitarias. A su vez, cada centro educativo tendrá que nombrar un interlocutor para el coronavirus. Lo que se pretende es que la relación sea fluida y la respuesta, en caso de ser necesaria, lo más rápida posible.

Las PCR a los profesionales

La videoconferencia sirvió también para explicar cómo se organizará las pruebas PCR a los profesionales que trabajarán en los centros educativos. Se utilizarán medios telemáticos. Recibirán un correo electrónico con un enlace adjunto para vincularse a una web segura, donde habrá colgados documentos diferentes. Estarán las instrucciones y habrá documentos de uso interno que se deberán pasar a cada trabajador del centro, para autorizar a la cesión de sus datos, ya que el proceso se hará teniendo en cuenta todos los aspectos. En una hoja Excel se rellenarán los datos personales de todos los trabajadores, incluidos hasta los del comedor y los auxiliares. Esa información recopilada se enviará a cada área sanitaria, para que se pongan en contacto con ellos y les citen para realizar la prueba PCR. El resultado se les comunicará mediante un mensaje SMS. Cualquier positivo entrará directamente en el circuito de vigilancia epidemiológica, al escrutinio de la red de rastreadores.

Todo el personal que a lo largo del curso se incorpore a los centros tendrá que someterse exactamente al mismo proceso. Es decir, si hay sustituciones por bajas o jubilaciones, por ejemplo, tendrán que cumplimentar la documentación y someterse a la PCR. Si se da positivo, quedará a disposición de vigilancia epidemiológica también.

Todos estos aspectos quedarán recogidos en un documento que se remitirá a todos los centros educativos asturianos para que tengan por escrito las directrices.

Salud ha querido tranquiliza a los equipos. Les ha dicho que la escuela no es «un potenciador de brotes», siempre que haya un control de la incidencia y buenas medidas de seguridad dentro de los colegios. Las autoridades han insistido en que en los colegios se mantenga la distancia interpersonal y los ratios, se mejore la ventilación, se extreme la higiene de manos y el uso de mascarilla. La detección precoz es fundamental.