Así son los tratamientos en las UCIs asturianas para salvar vidas de infectados de coronavirus
ASTURIAS
Medicarlos con dexametasona, ponerles ventilación mecánica, colocarlos boca abajo, mantenerlos sedados y nutrirlos adecuadamente está siendo lo más efectivo para tratar de remitir la neumonía bilateral que provoca el coronavirus a los pacientes más graves
25 oct 2020 . Actualizado a las 17:41 h.La sabiduría popular dice que «de todo se aprende», y más si cabe de lo malo. Aplicando esto a la pandemia y a la crisis sanitaria que está sufriendo (literalmente) todo el mundo, ya sea en mayor o menor medida, el primer envite de la covid-19, los fallecidos y los recuperados han dejado unas primeras líneas de enseñanza a los sanitarios de cómo afrontar la neumonía bilateral que genera y qué tratamiento o tratamientos funcionan mejor según el diagnóstico. Así, la ventaja que tienen los nuevos pacientes contagiados de este virus, si es que se le puede llamar ventaja, es el mayor conocimiento que tienen los médicos, enfermeras y auxiliares de los medicamentos que mejor funcionan para la clínica que ocasiona el coronavirus SARS-CoV-2.
Para quien más útil es ese conocimiento es para los enfermos graves que se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en esta segunda ola, que amenaza con tener una incidencia mayor que la primera dada la evolución de los datos en Asturias. Dolores Lola Escudero, la jefa de servicio de la UCI del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) explica que el tratamiento para los infectados con covid-19 se ha simplificado y que el tratamiento con dexametasona (un corticoide que actúa como antiinflamatorio e inmunosupresor) es el que está demostrando «que disminuye la mortalidad», apunta Escudero. Así, añade que se ha reducido mucho el uso del medicamento antiviral Remdesivir porque «no disminuye la mortalidad ni el tiempo de la enfermedad», algo para lo que tampoco funciona la hidroxicloroquina según las evidencias que están teniendo los sanitarios.
Así, una dosis de 6 miligramos al día de dexametasona durante 10 días es el tratamiento inicial que están recibiendo los pacientes por covid-19 que están ingresando en la UCI del HUCA. No obstante, Lola Escudero pone de relieve la importancia de que los enfermos tengan un correcto y adecuado tratamiento de sostén, con ventilación mecánica protectora, colocarles en posición prono (boca abajo), mantenerlos con una analgesia potente y sedados «para que el respirador funcione bien y estén confortables», resume la jefa de servicio de la UCI del HUCA.
Atención a las complicaciones
La misma apunta también que ese tratamiento en ocasiones tiene que ir complementado con tratamientos para otras complicaciones que puedan surgirles a los enfermos como consecuencia de la infección de covid-19, como puede ser un fallo renal. En ese caso, es necesario conectarles a un riñón artificial durante las 24 horas del día, un aparato específico consistente en un circuito con entrada y salida que permite filtrar la sangre y eliminar las sustancias tóxicas.
La evolución de los enfermos de coronavirus en la UCI es variable y por ello el fallo respiratorio puede conllevar «estancias de dos, tres o cuatro semanas, o distrés de larga evolución», comenta Lola Escudero, que destaca la importancia de que en todo ese tiempo los pacientes «estén bien nutridos». Así, como parte del tratamiento está la colocación de una sonda nasogástrica para suministrarle alimentación y utilizar «una vía venosa central para las reposiciones de líquidos y sueros».
La jefa de servicio de la UCI del HUCA, que se confiesa «condenadamente optimista», no oculta su «preocupación» por la virulencia que está teniendo esta segunda ola de la pandemia dado el elevado número de positivos que se están registrando en los últimos días. Y es que la misma apunta que, pese a todo el sobreesfuerzo que se está haciendo o que se pueda hacer, «todo es limitado».
