El presidente del Principado y el de la Xunta de Galicia inciden en la necesidad de cooperación entre las dos comunidades para lograr objetivos comunes
17 nov 2020 . Actualizado a las 15:35 h.Cordialidad, mano tendida y buen tono. Debería ser la tónica habitual entre políticos de distinto signo, pero en los tiempos de la crispación y los reproches, son una agradable noticia. El presidente del Principado, Adrián Barbón, y el de la Xunta de Galicia, Alberto Nuñez Feijoo, han dado una vez más muestras de su buena relación en una nueva edición de los Encuentros en EO, el evento organizado por La Voz de Asturias y La Voz de Galicia que cuenta con el patrocinio del Banco Sabadell. Por primera vez, y debido a la pandemia, el acto ha sido telemático, pero a pesar de la distancia geográfica entre Oviedo y Santiago, los dos líderes autonómicos han defendido que es mucho más lo que une a asturianos y gallegos que lo que les separa. Barbón y Feijoo han conversado sobre el Plan Europeo de Recuperación en las regiones del noroeste, sobre la situación del sector primario y sobre las oportunidades de la sociedad postcovid en las dos comunidades.
Barbón ha querido poner en valor la importancia de un encuentro que «ni la pandemia ha conseguido frenar», se ha referido a La Voz de Asturias como el «medio digital de referencia en la región» y ha dejado claro que «trabajando de la mano, gallegos y asturianos podemos construir muchas cosas». Estas son algunas las principales reflexiones del presidente del Principado.
El Plan Europeo de Recuperación en las regiones del noroeste
En primer lugar, Barbón ha enumerado la principal diferencia en la Unión Europea a la hora de hacer frente a la crisis económica de 2008 y la actual. Mientras que hace más de una década se apostó por los recortes y por contener el gasto, ahora la estrategia consiste en invertir.
El presidente del Principado ha explicado que previamente a los fondos Next Generation, los que ahora se debaten en la UE, ya había dos plataformas en marcha, el Pacto Verde Europeo y los Fondos para la Transición Justa. En cuanto a los retos a los que se enfrenta Asturias, ha destacado como uno de los principales «la transformación de Hunosa para que sea una empresa energética verde de futuro en las comarcas mineras». Y se ha marcado muchos más objetivos. «Lo primero, estamos trabajando en la gobernanza de los fondos. En julio, saliendo de la primera ola, creamos la Comisión Delegada de Asuntos Económicos del Principado para reactivar la gestión de la potencialidad de fondos», y en este sentido se ha referido a tres líneas de trabajo específicas:
En primer lugar, ha señalado que la estrategia de Asturias se enmarca dentro de la de Europa y del Plan de Resiliencia de España. «Ese mapa de estrategias se está discutiendo con los grupos políticos de Asturias para buscar el acuerdo más amplio posible, y ahí también participan las empresas, sindicatos, cámaras de comercio, Universidad y la Federación de Concejos». Barbón ha recordado que su Gobierno ha recuperado la Dirección General de Asuntos Europeos, una herramienta «fundamental para gestionar los fondos, y ahora hemos creado la Oficina de Proyectos Europeos, que será la que se encargue de asesorar y canalizar los proyectos».
Por último ha destacado la cogobernanza con todas esas instituciones «para facilitar que salgan adelante el centenar de proyectos que tenemos en marcha». «Es una oportunidad histórica para la UE, que ha demostrado que va en serio en cuanto a la mutualización de deuda, un paso fundamental, pero nosotros tenemos la aspiración máxima de que el noroeste tenga influencia en la recepción de esos fondos», ha apuntado.
En cuanto al tipo de proyectos, ha señalado que deben ser «de transformación de la actual industria y que esta se adapte al futuro verde. Pienso en grandes compañías que necesitan apoyo público para transformarse». También se ha referido a otro elemento que considera clave, que sean «proyectos de vanguardia, porque cuanto más rompedores sean, pienso en el hidrógeno verde, tendremos mucho adelantado». Y para conseguir todo esto, considera un elemento irrenunciable «que coopere el noroeste, que trabajemos de forma conjunta. Debemos unir esfuerzos para sacar los mayores réditos». Junto a ello, ha defendido la reforma de la administración y facilitar los trámites para agilizar toda la burocracia.
La situación del sector primario
«Durante la pandemia, Asturias y Galicia fuimos la despensa de España», ha afirmado Barbón quien ha incidido en que «por primera vez, la sociedad ha reaccionado al hecho de que este es un sector fundamental que en Asturias supone el 20% del PIB y que está compuesto por más de 700 empresas». De hecho, es el único sector que crecerá en 2020. «Para nosotros es un elemento estratégico, y si no ha habido faltas en el suministro ha sido por garantizar esa cadena alimentaria de primer nivel y calidad», ha añadido.
De cara al futuro hay varios puntos que ha calificado de claves. Por un lado, la PAC. «Es muy importante que la ganadería extensiva se proteja desde el punto vista del entorno natural», ha aseverado Barbón. Además, ha destacado la gestión de los Fondos Leader como apuesta para «fijar población y garantizar el relevo generacional», el tique rural «que permite la inversión y el apoyo de 35.000 euros para nuevas iniciativas en el rural» y la puesta de valor de Alimentos del Paraíso. «Es una marca de referencia que sigue incorporando nuevos productos». «Asturias es una marca de calidad, lo hemos visto durante toda la pandemia», ha recalcado el presidente del Principado.
Oportunidades de la sociedad poscovid
El presidente del Principado ha afirmado que «a consecuencia de la propia pandemia, los ojos se han puesto en el noroeste. También internamente, y se han puesto en valor los pequeños núcleos». Pero para potenciar esta oportunidad que surge de la crisis, Barbón ha hecho referencia a las infraestructuras. «Tenemos la demanda histórica del peaje del Huerna. Es uno de los mayores agravios comparativos que se cometió con nuestra comunidad autónoma y deberíamos ir a una bonificación». Otra de las viejas demandas es el AVE, y ahora se ha puesto de manifiesto «la nueva digitalización».
«Si queremos que lugares como Asturias seas atractivos para vivir es fundamental esa digitalización, especialmente porque puede traer de vuelta el teletrabajo», ha afirmado Barbón. «Es una oferta distinta para muchas personas que se lo pueden permitir y aquí encuentran calidad de vida», ha aseverado el líder autonómico, quien ha mencionado «las amenazas de nuevos confinamientos y el hecho de que los expertos señalen que las pandemias serán más recurrentes» provocan que mucha gente apueste por un estilo de vida diferente en el que Asturias puede ser una buena opción.
Industria
Otro de los asuntos a los que se ha referido Barbón ha sido a la necesidad de apostar por la industria. Aquí, ha puesto sobre la mesa viejas reivindicaciones. La necesidad de que se apruebe un estatuto electrointensivo «en el que se tengan en cuenta las alegaciones de Asturias, Galicia y Cantabria» la compensación de derechos por emisión de CO2 que permita «que lleguen al máximo que permita la UE y que facilite que la transición sea justa de verdad» y la aprobación de un arancel europeo al acero «que evite la entrada de acero sucio que compite con el acero limpio de la UE y que hace que exista una competencia desleal». «Tenemos que avanzar a Europa verde, nos guste más o menos, y para conseguirlo es necesario una adaptación de la industria y reindustrializar territorios como las cuencas mineras», ha apuntado.
La despedida del encuentro ha sido en los mismos términos que toda la conversación entre los dos presidentes. Con la mano tendida. Y para poner el broche, Barbón ha recordado que «el origen del Camino de Santiago es el Camino Primitivo, que nació en Oviedo. Debemos aprovechar para trabajar esto conjuntamente». «Igual que nos unió la historia, tiene que seguir uniéndonos el presente y el futuro», ha concluido el líder autonómico. Feijoo ha recogido el guante y mostrado su predisposición a la colaboración en ese terreno.
