Barbón: «El debate sobre la financiación autonómica va a ser una batalla encarnizada»

ASTURIAS

Entrevista a Adrián Barbón
Entrevista a Adrián Barbón Tomás Mugueta

El presidente cree que hay margen con los fondos europeos para ampliar las ayudas a la industria asturiana

04 feb 2021 . Actualizado a las 20:19 h.

La situación de la industria y las expectativas de las ayudas europeas son clave en las valoraciones económicas del presidente del Ejecutivo asturiano.

-El resultado final del estatuto electrointensivo ha sido decepcionante para Asturias, lo han dicho los agentes sociales, pero también su gobierno. ¿Qué ha pasado, por qué el Ejecutivo central no tuvo en cuenta las alegaciones que Asturias presentó junto a otras comunidades como Galicia?

-Han influido muchos factores. La Unión Europea estableció determinados límites y así nos lo explicó el Ministerio. Por ejemplo la rebaja de qué se considera electrointensivo, que en nuestra opinión ya ha llegado a unos niveles que no es electrointensivo, pero son exigencias de la propia UE para que no se consideren ayudas discriminatorias. También que, igual que hay comunidades que presionábamos en materia de la hiperelectrointensiva, otras muchas defendieron sus posiciones para que se incluyera un mayor número de empresas. Nosotros lo hemos dicho alto y claro, se lo hemos dicho al gobierno y públicamente: no estamos de acuerdo. Este estatuto no es el que satisface las demandas de Asturias y por tanto vamos a plantear que tiene que haber otras compensaciones que beneficien a la industria hiperelectrointensiva, la verdaderamente gran consumidora de energía.

-¿Qué margen queda realmente para pedir esa ayuda complementaria para la industria asturiana?

-Puede haber margen, por ejemplo, en las compensaciones por derechos de emisión de CO2, si se garantiza que siga al máximo, si desde el gobierno se facilita la negociación en esos contratos bilaterales con empresas energéticas. Puede haber margen si el gobierno destina parte de los fondos europeos a una actualización del sector electrointensivo para ahorrar consumo, que sea menor. Vamos a ver qué conseguimos.

-Ahora que cita los fondos europeos, también en ese debate cada comunidad intentará arrimar el ascua a su sardina.  ¿Qué puede esperar Asturias en este sentido?

-Ha habido una parcial territorialización de los fondos, y se ha hecho siguiendo los criterios de la UE. Uno puede estar de acuerdo o no con ellos, porque a mí me hubieran gustado otros, pero son los que puso la propia UE.  Y queda la segunda parte, los fondos que gestionará el propio estado directamente y ahí hay que presentar proyectos. En materia de fondos europeos nosotros hemos facilitado la gobernanza, con un consejo asesor, una oficina de proyectos europeos, trabajo en la dirección general de Asuntos Europeos para intentar llegar al máximo posible, pero lo que nos interesa no es sólo la gobernanza, sino el hecho de que en Asturias emerjan proyectos. Los proyectos salen de la relación entre lo público y lo privado, estoy convencido de que una gran parte, o lo que va a facilitar que haya proyectos tractores es precisamente fruto del consenso público-privado; y por eso mantenemos reuniones y trabajo  con todas las grandes empresas de Asturias, para animarles a presentar proyectos que sean tractores de transformación de su industria, que la hagan más sostenible y más digital, más eficientes en lo energético y que por tanto garanticen que esa industria permanezca en Asturias y pueda crecer.

-Varios gobiernos autonómicos como Galicia o País Vasco han anunciado planes y proyectos, pero en Asturias ha sido muy cautos y han hablado de que las empresas les piden confidencialidad. El consejero de Industria habló en el parlamento esta semana de 115 proyectos de 45 entidades. ¿Puede especificar qué empresas son y qué tipo de iniciativas?

-Estamos todavía en la fase en la que estamos recopilando la información de todos los proyectos que van surgiendo y también estamos animando a algunos a que se impulsen. Pero la premisa para que estos proyectos den resultado, que compitan y puedan salir adelante, es que salgan de la colaboración público-privada, que puedan ser tractores y de futuro económico y, por tanto, eso hace que hoy por hoy el trabajo sea discreto, porque además las empresas piden confidencialidad y hay que entenderlo también. Hay otra cuestión, a veces escucho a otros gobiernos autonómicos diciendo que van a presentar 150 proyectos.  ¿Pero dónde? Es que no existe. Nosotros mantenemos relación con el Gobierno de España, sabemos de sobra quién va a canalizar los fondos y dónde, que va a ser en Moncloa, va a ser en la Oficina de Asuntos Económicos, dependiente del gabinete del presidente del Gobierno. Todavía no se ha abierto ni el registro, es que eso no existe. El otro día hubo una apertura de una manifestación de interés en el Ministerio de Industria para pedir proyectos pero que tampoco era vinculante, no estamos en esa fase. Nosotros queremos a animar a todas las grandes empresas de Asturias, a las que pueden tener futuro, a que aprovechen la oportunidad de los fondos europeos para transformarse, para digitalizarse, ser más sostenibles. Porque nuestra industria tiene que cambiar sí o sí. La descarbonización ya no es una utopía, es una realidad a la que vamos. En 2050 sabemos lo que va a pasar, sí o sí hay que llegar a ese escenario. Y como nosotros queremos que Asturias siga siendo industrial, queremos que el sector aproveche estos fondos para transformarse. Todo el empuje político del gobierno de Asturias va a estar en esa dirección.

-Aunque se ha demorado mucho, también por la pandemia, en algún momento habrá que abordar el debate sobre la reforma de la financiación autonómica. ¿Es un mal precedente lo que pasó con el estatuto electrointensivo si el Gobierno central tiene que atender a los intereses de Asturias?

-Pero partimos de una realidad totalmente diferente, en esta materia la competición no es entre comunidades del PSOE y del PP, sino entre territorios más poblados y los que pedimos que hay que analizar el coste real de los servicios, con lo que significa el envejecimiento, la dispersión de la población o la orografía; y ahí estamos muchas comunidades. El debate va a ser mucho más duro, uno en el que los bloques responden a dos realidades diferentes y va a ser una batalla encarnizada. Desde luego Asturias va a llegar a acuerdos para fijar posiciones comunes con todos aquellos cuya postura sea similar a la nuestra. Va a ser un sudoku muy difícil de resolver.

-¿Se puede poner números a la cantidad que reciba Asturias de fondos europeos?

-Entiendo el interés periodístico pero yo suelo ser más práctico y hasta que no aterricen, a mí no me gusta hacer anuncios de números y datos que luego no se cumplen. Ahora, la cantidad de fondos que se va a movilizar es ingente y por eso es importante que consigamos esa relación con el ámbito empresarial, eso es clave.