Asturias quiere reducir el metano de los pedos de las vacas y producir lácteos para la longevidad
ASTURIAS
Un proyecto usará magaya de manzana y algas como alimento para los rumiantes. Un estudio del microbioma de personas ancianas permitirá desarrollar un lácteo que ayude a conseguir un envejecimiento más saludable
09 jul 2021 . Actualizado a las 10:21 h.Reducir la huella de carbono que producen los rumiantes, es decir, los pedos que expulsan las vacas y que dañan la capa de ozono, o detectar estudiar el microbioma de personas ancianas para desarrollar un lácteo, tipo yogur, que ayude a conseguir un envejecimiento más saludable. Son dos de las misiones científicas que tiene Asturias y en las que desarrollará un plan piloto antes de que acabe el año.
Los proyectos acaban de arrancar y hoy han celebrado la puesta de largo con la reunión de representantes de todas las empresas y entidades que forman los seis consorcios que participan en este programa pionero entre las comunidades autónomas.
¿Cómo puede contribuir Asturias a reducir los gases de efecto invernadero?
Hay tres proyectos en marcha. Uno de ellos se centra en la Agroalimentación 0 Emisiones. El líder del consorcio, la consultora DEX, y uno de los principales colaboradores, el SERIDA, han expuesto las líneas de actuación. La más avanzada y contundente: controlar el impacto en las emisiones de metano a la atmósfera que producen los rumiantes tras el proceso digestivo. ¿Cómo se va a hacer? Incorporando subproductos o residuos agroalimentarios a la dieta de rumiantes. De entrada, en el plan piloto, se utilizará magaya de manzana y algas.
Las misiones también contemplan trabajos con materias primas estratégicas como «vanadio o cobalto, que se están desechando y se pueden recuperar». David González resalta que en septiembre ya estarán listos los primeros pilotos. Explica que, aparte de los relacionados con el hidrógeno verde, «eHealth es el más avanzado». Se trata de un estudio para la elaboración de un corsé que busca «corregir la escoliosis idiopática a adolescentes, especialmente niñas, para que de mayores no tengan secuelas». Considera que para los pilotos se contempla una salida al mercado en un periodo «de uno a dos años». La idea es «que en Asturias se desarrollen los proyectos».
¿Y cómo contribuir a un envejecimiento más saludable?
Uno de los proyectos, liderado por CAPSA FOOD y cuyo plan piloto desarrollará el IPLA (Instituto de Productos Lácteos), plantea realizar un mapa del microbioma de personas ancianas y estudiar los resultados de introducir en la alimentación determinados probióticos. La idea es hallar biomarcadores que nos orienten sobre qué es lo mejor para nuestra microbiota, qué nos hará vivir más y con mejor salud. El objetivo final, conseguir un alimento lácteo, tipo yogur, que nos ayude a tener una longevidad más saludable.
También hay en marcha un «laboratorio del sector senior» que buscará elaborar un «diagnóstico de todas las personas senior de Asturias para ver cuáles son sus características y tomar decisiones» para un envejecimiento saludable que garantice su autonomía.
Asturias tiene como una de sus misiones de futuro a corto plazo la diversificación y cambio de paradigma de su economía. Un nuevo modelo que permita reorientar el tejido productivo hacia actividades de mayor valor añadido y base tecnológica. Un objetivo en el que la colaboración público-privada se antoja esencial.
En esa línea de lograr una actualización del motor económico en la región, el teatro de la Laboral ha sido hoy el escenario de la presentación de los proyectos del programa Misiones Científicas de Asturias. Las líneas básicas de las misiones son la longevidad y envejecimiento activo y la reducción de emisiones y gases de efecto invernadero. Seis grandes consorcios público-privados son los encargados de desarrollar las primeras misiones científicas de Asturias.
Asturias es la primera comunidad autónoma en poner en marcha el programa Misiones Científicas, adaptando el modelo de la convocatoria nacional a un sistema de colaboración público-privada alineado con las estrategias europeas de innovación.
Los segmentos de actuación de los proyectos son, entre otros, digitalización, el uso de inteligencia artificial, sensorización, impresión 3D, medicina y alimentación personalizada, desarrollo de nuevos materiales biodegradables, recuperación de materias primas esenciales o estudio sobre el hidrógeno.
Al acto asistieron representantes de los seis consorcios de empresas, centros tecnológicos e instituciones que desarrollarán los proyectos; el consejero de Ciencia, Innovación y Universidad, Borja Sánchez, así como el director general de Innovación, Investigación y Transformación Digital, Iván Aitor Lucas.
Borja Sánchez cree que este es «un programa que sitúa a Asturias como pionera en este tipo de iniciativas», las cuales «pivotan en torno a las líneas maestras de la política de I+D+i europea», con un «punto de vista multidisciplinar» que sirve de «muestra del potencial que tenemos en Asturias».
Considera que es gratificante la colaboración entre la «Universidad de Oviedo, CSIC, FIMBA, centros tecnológicos, la gran empresa asturiana…» y otras entidades. Desde su punto de vista «la sociedad tiene que ver ahora para lo que sirve la investigación en Asturias». Además de para el desarrollo de una serie de proyectos piloto, esta colaboración permitirá «tejer alianzas y sinergias» y «convertir Asturias en un polo de innovación». La intención de la de consejería de Ciencia, Innovación y Universidad pasa por «que el año que viene haya una nueva convocatoria».
David González, director de Desarrollo de Negocio y Estrategia en Idonial, socio tecnológico integral para desarrollo de materiales, fabricación avanzada y digitalización de la industria que co-lidera cinco de los seis consorcios de empresas encargados de los proyectos, destaca que hay «dos temáticas» esenciales en los mismos, como son «la reducción de emisiones y envejecimiento activo». Las iniciativas se denominan eHealth, Alimes, El reto de envejecer, Agroalimentación 0 emisiones, Maprestas y Ruta del hidrógeno H2.
