Marta Clemente, neumóloga del HUCA: «La variante ómicron se está comportando como un cuadro gripal»

Esther Rodríguez
Esther Rodríguez REDACCIÓN

ASTURIAS

UCI instalada en el gimnasio del HUCA de Oviedo
UCI instalada en el gimnasio del HUCA de Oviedo José Luis Cereijido

La directora del Área de Gestión Clínica del Pulmón del HUCA hace balance de la situación de las plantas habilitadas para pacientes con coronavirus

13 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque la sexta ola detonada por la variante ómicron ha hecho aumentar exponencialmente los casos positivos en el Principado, los hospitales asturianos mantienen controlada la situación. A pesar de llevar semanas superando la barrera de los 2.000 casos diarios, en torno a un 13% de las camas en planta, 20% en el caso de las UCI, están ocupadas por pacientes covid. Un favorable escenario para los centros hospitalarios que está respaldado por la efectividad de las vacunas, ya que «las personas cuentan con una mayor protección frente al virus y por ende de enfermar gravemente».

También se debe a que la nueva cepa es menos virulenta y «se está comportando como un cuadro gripal, sin banalizar lo que es la gripe que tiene su importancia, y  tenemos que intentar ya normalizar todo esto», apunta Marta García Clemente, directora del Área de Gestión Clínica del Pulmón del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).

A día de hoy, en las plantas del HUCA habilitadas para pacientes con coronavirus, los sanitarios asisten a un importante número de individuos de entre 40 y 60 años que no están vacunados y que presentan una neumonía bilateral o insuficiencia respiratoria, tal y como señala la especialista en neumología. No obstante también hay individuos inoculados contra el coronavirus. «En este caso son personas inmunodeprimidas ancianas que cuentan con muchas patologías previas y a veces aunque son positivos ingresan por otro motivos», señala la experta.

Duración de los ingresos en esta sexta ola

De la misma manera, también hay algún hospitalizado de entre 17 y 18 años. No obstante, «estas personas jóvenes, aunque no estén vacunadas y no tienen complicaciones respiratorias en seis días ya reciben el alta», confiesa Marta Clemente. En el caso de los ancianos pluripatológicos los ingresos son más largos. «Como tardan en negativizar y se descompensa todo suelen estar aquí entre dos o tres semanas», añade.

Respecto a las patologías previas, la directora del Área de Gestión Clínica del Pulmón del HUCA señala que son las mismas que se vienen dando hasta ahora. Los factores de riesgo clásicos son la hipertensión, la obesidad y la diabetes. Además, la variante predominante en las plantas del HUCA es la delta. Aunque, «sí que es cierto que hay ingresos por ómicron, pero se da en pacientes no vacunados. Esto nos hace dudar si la variante es más leve o si ha aparecido en un momento con el mayor porcentaje de población vacunada», resalta la facultativa.

Protocolo de ingreso

Dado que el perfil de hospitalizados es muy variado, desde el HUCA llevan a cabo un protocolo de actuación basado en la vacunación. «Si el paciente no está inoculado vamos con cuidado porque sabemos que nos puede generar sustos y complicaciones. Pueden comportarse como al inicio de la pandemia: que la neumonía bilateral progrese muy rápido y deban pasar inmediatamente a  la UCI». En cambio, en el caso de los que sí tienen una dosis o la pauta completa, el personal sanitario decide el ingreso en función de las enfermedades concomitantes y la saturación de oxígeno.

No obstante, lo que apenas ha variado respecto a las otras olas es el tratamiento que se le proporciona al paciente. «Administramos dexametasona, heparina de bajo peso molecular con dosis profilácticas, antitérmicos y antinflamatorios. Lo que no suministramos salvo por otro motivo añadido al covid es antibióticos, ya que eso se trata de una enfermedad vírica», detalla Marta Clemente antes de confesar que «en todo este tiempo no equivocamos muchísimas veces en las apreciaciones en la enfermedad, pero en estos dos años también aprendimos mucho. Ahora, tanto el área de medicina interna como el de neumología sabemos valorar el pronóstico del paciente y las decisiones que se deben tomar al respecto».

Entre dos y tres semanas de intenso trabajo 

Aunque la situación está controlada, ya que «si estos contagios los hubiese habido al principio de pandemia el sistema sanitario no lo aguanta», se esperan dos-tres semanas de intenso trabajo en los hospitales asturianos. «Siempre decimos que los ingresos son siete u ocho días después de los contagios por eso todavía nos toca hacer frente a un incremento de hospitalizaciones», subraya Marta García Clemente, quien vuelve a resaltar la eficacia de las vacunas.

Asimismo aboga por «dejarse aconsejar por las autoridades sanitarias y aceptar las recomendaciones, ya que de alguna manera son los que conocen el entorno epidemiológico». «Esto vino para quedarse con nosotros y hay que intentar normalizar la situación», sentencia.