El Real Oviedo trabaja en la rescisión de varios jugadores
08 jun 2018 . Actualizado a las 11:17 h.Con las llegadas de Richard Boateng y Sergio Tejera a un paso de confirmarse, el Real Oviedo sigue trabajando en la composición de su plantilla para la temporada que viene y el tema salidas es otro de los temas importantes a tratar sobre la mesa.
Dentro de la operación salida azul nos encontramos varios casos distintos: jugadores que no han contado casi nada para el cuerpo técnico pero que tienen contrato, otros que llegaron a ser importantes pero no llegan a ser intransferibles y, en un último caso, futbolistas cuya continuidad están ligadas a las llegadas que se puedan ir produciendo.
Valentini y Pucko, obligados a entenderse
A pesar de tener un año más de contrato, Nahuel Valentini y Matej Pucko no cuentan para Juan Antonio Anquela y se les busca una salida. 394 y 217 minutos, respectivamente, son muy poco bagaje en dos jugadores que nunca llegaron a entrar en la dinámica del equipo.
Pero esta operación seguramente no vaya a resultar nada fácil. El poco mercado nacional que tienen ambos futbolistas y el elevado sueldo que conlleva fichar a dos jugadores extranjeros hacen que la negociación de rescisión de contrato pueda complicarse según avancen los días.
Hidi y Verdés, las incógnitas
El de Héctor Verdés, renovado el pasado verano hasta 2019, es un caso especial. El técnico del Real Oviedo nunca ha ocultado su gusto por el futbolista valenciano, pero de nuevo las lesiones se cruzaron en su camino. Tras jugar las primeras ocho jornadas como titular, Verdés cayó en el Oviedo-Tenerife de la jornada 9.
Tras dicho partido llegó la irrupción de Forlín y el nuevo esquema de tres centrales, dejando sin sitio al '4' azul. Cinco titularidades fueron su bagaje durante el resto del curso. Ahora, con Carlos y Forlín como piezas clave y un Christian a punto de renovar su contrato, buscar una salida al valenciano puede ser una opción.
Por su parte, Patrik Hidi ha sido uno de los "parecía que sí" de la temporada carbayona. El mediocentro húngaro dejó buenas sensaciones en las primeras jornadas del curso (asistencia a Berjón incluida), pero una fractura en el quinto metatarsiano del pie derecho en la jornada 3 ante el Reus frenó en seco su adaptación al fútbol español en general y al equipo oviedista en particular.
El húngaro volvió a la dinámica de grupo en diciembre y poco a poco fue contando con (muy) pocos minutos, siendo el 17 de febrero, en la jornada 27 ante el Albacete, su siguiente titularidad. En ningún momento de la segunda vuelta pudo ser ese centrocampista con buen toque capaz de aportar algo distinto al rocoso juego azul, siendo sus apariciones muy escasas.
Con contrato en vigor, Anquela le ha defendido mucho en público. «Hidi ha tenido mucha mala suerte. Cuando estaba jugando bien se lesionó, luego tuvo otro problema familiar, que a todos nos afecta, pero nunca ha dejado de currar. Es un chaval muy honrado. Estoy seguro que el año que viene, con una pretemporada, puede ser importante en cualquier sitio», dijo el técnico sobre él.
La renovación de Rocha, la llegada de Sergio Tejera y el ascenso del filial a Segunda B le pueden dejar el camino cerrado, pero su futuro todavía es una incógnita.
