Toché se despide tras haber sido la referencia goleadora en la capital del Principado durante las últimas cuatro campañas
20 jul 2019 . Actualizado a las 02:30 h.Se terminó el culebrón del verano. Finalmente, José Verdú 'Toché' no continuará en el Real Oviedo esta próxima campaña. Un secreto a voces desde la llegada de Sergio Egea, que ya no contó con el murciano para el tramo final de la liga pasada. Con Toché se va un futbolista de importancia capital en las últimas cuatro temporadas en las que anotó más de 40 goles con la elástica azul.
La edad, la necesidad de liberar espacio de masa salarial y la búsqueda de una renovación del plantel han desembocado en la salida del atacante de Santomera, que también deja libre la capitanía del equipo que asumirán Saúl Berjón o Diegui Johannesson.
Decenas de goles a coste cero
El aterrizaje de Toché no fue visto con buenos ojos por un sector de la afición. Delantero de 32 años que llegaba a Segunda División con apenas ocho goles en sus últimas campañas. Todas las críticas se vieron silenciadas por los 35 goles que Toché anotó en sus dos primeros cursos defendiendo el escudo del Real Oviedo (34 en Liga y 1 en Copa). Un ariete por el que hoy en día se pagarían millones en un mercado loco y por el que la dirección deportiva asturiana lleva suspirando los últimos tres veranos.
Tras Toché llegaron Mamadou Koné, Jonathan Pereira, Owusu Kwabena, Olmes García, Joselu Moreno e Ibrahima Baldé. Ninguno de ellos ha conseguido acercarse, lo más mínimo, a las cifras anotadoras del murciano.
La lesión de rodilla padecida en octubre de 2017 ante el Alcorcón en Santo Domingo cortó la racha de un futbolista que amenazaba con volver a repetir otra temporada de primer nivel goleador. En aquel momento, el 9 azul sumaba cinco dianas que habían supuesto ocho puntos para el conjunto de Juan Antonio Anquela.
Para el recuerdo, sus goles de chilena, su oportunismo dentro del área o la imagen más icónica del pasado reciente del Real Oviedo: la celebración, brazalete en alto, que el murciano realizó en El Molinón en el primer derbi de la temporada 17/18. Un gol que perdurará en la memoria del oviedismo y que permite a Toché tener su espacio propio en la historia del club.