El Principado avanza a Otea su previsión de renovar las restricciones que estableció para el sector en la resolución del pasado 18 de diciembre
08 ene 2021 . Actualizado a las 21:16 h.Finalizadas las fiestas navideñas y con el horizonte de una nueva resolución el próximo lunes con medidas especiales para la prevención y contención de la crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19, la incertidumbre volvía estos días a muchos sectores económicos de la región, principalmente, al sector hostelero, afectado por rumores de más restricciones o un nuevo cierre total. A expensas de los datos de contagios que salgan durante el fin de semana, el Principado hacía un adelanto a la Asociación de Hostelería y Turismo de Asturias (Otea) de la resolución que tiene en previsión. En concreto, lo que le avanzaba vía telefónica la viceconsejera de Turismo, Graciela Blanco, al presidente de Otea, José Luis Álvarez Almeida, es que se adelantará el toque de queda una hora para que vuelva a ser a las diez de noche, una medida que será de carácter general, y que se dará continuidad a las restricciones que están vigentes actualmente para la hostelería y que se establecieron en la resolución del pasado 18 de diciembre.
Eso significa que, de no haber cambios en lo establecido, en los establecimientos de hostelería, restauración y terrazas seguirá estando prohibido el consumo en las barras. La única excepción para el uso de la barra seguirá siendo la recogida de comida a domicilio. Así, tanto en el interior como en el exterior, los clientes deberán realizar el consumo sentado en mesa y deberá hacer uso de la mascarilla cuando no se esté comiendo ni bebiendo. De igual modo, la limitación de personas en una mesa será de cuatro personas como máximo y la distancia de seguridad entre silla y silla de diferentes mesas será, como mínimo, de dos metros, tanto en el interior del local como en las terrazas.
Lo que afectará nuevamente a la hostelería, aunque en realidad será una medida general, será el adelanto del toque de queda de las once a las diez de la noche, es decir, la vuelta al horario que estaba establecido antes de que se flexibilizara en los días previos a las fiestas navideñas. El hándicap para la hostelería de volver al toque de queda de las diez de la noche podría ser tener que recibir a su último cliente a las nueve de la noche, un horario que choca con los horarios de cena tardíos que acostumbra la población asturiana y que pone el solfa, por tanto, la rentabilidad de muchos negocios del sector.
Un plan de rescate para la hostelería
El presidente de Otea tras recibir la información de la viceconsejera de Turismo del Principado apuntaba que si bien el Gobierno tiene que combatir la pandemia y los contagios y destinar recursos a la sanidad para salvar la vida de los ciudadanos, también tiene que poner en marcha «ya y de forma urgente un plan de rescate» que ayude «a los empresarios que están en números rojos». «Hay que ayudarles y buscar una solución para esos negocios que ya no tienen para sobrevivir», ha manifestado José Luis Álvarez Almeida, que ha querido poner de relieve la incertidumbre que supone para muchos trabajadores la espera por las resoluciones porque no saben si los contratos que les hicieron para el periodo de Navidad se va a renovar o no.
