Tranquilidad para volver a la buena senda

Pablo Fernández OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Anquela habla con varios miembros de la plantilla durante un entrenamiento
Anquela habla con varios miembros de la plantilla durante un entrenamiento Real Oviedo

El Oviedo regresa a los entrenamientos pensando en mejorar la imagen ante el Lugo

13 sep 2018 . Actualizado a las 09:23 h.

Los dos primeros tropiezos del Real Oviedo en esta 18/19 han dolido más de lo esperado en el oviedismo. Tras un inicio de Liga prometedor, a pesar del empate en casa ante el Extremadura, las dudas sobre el nuevo estilo y la capacidad defensiva se han multiplicado tras la derrota en Zaragoza y la sosa imagen del equipo en Mallorca.

Ahora, a los de Juan Antonio Anquela les toca volver a ejercitarse en El Requexón y pensar únicamente en la visita al Anxo Carro, donde les esperará un Lugo que, al igual que los azules, solo ha sumado los tres puntos en una ocasión en lo que va de Liga.

Los deberes para recuperar la confianza en el cuadro azul parecen claros: volver a ser peligrosos con el balón en los pies y mejorar la capacidad defensiva del equipo.

Si bien Zaragoza y Mallorca no presionaron de igual forma al Oviedo, consiguieron generarle los mismos problemas en la construcción del juego. Los maños se fueron arriba y taparon la salida por los laterales y ahogaron a la medular azul, mientras que los bermellones dejaron a los cuatro defensas libres, esperaron en su campo y taparon cualquier opción de superar línea.

En defensa, hay que decir que el abultado 0-4 del Zaragoza infla la estadística y quizá, ante los ojos del aficionado, transforma errores individuales en un asunto colectivo. El Extremadura no probó a Alfonso hasta que empató el partido en un córner, el Córdoba se aprovechó de dos errores individuales y el Cádiz marcó tras un penalti clamoroso de Carlos.

Ya el pasado sábado, ante el conjunto blanquiazul, el Oviedo sí se mostró incapaz de frenar a su rival y el Zaragoza llegaba como quería a las inmediaciones del área carbayona.

La tarea está marcada y el tiempo apremia. El apretado calendario exige a Anquela y a su cuerpo técnico preparar la visita a Lugo en tres días (hoy jueves, viernes y sábado), pero seguro que el vestuario del Oviedo espera como agua de mayo el encuentro en la ciudad lucense.