El chef del restaurante danés Alchemist ganó por segundo año consecutivo el «The Best Chef Award» en una edición sin españoles en el podio
04 oct 2025 . Actualizado a las 11:48 h.Y el ganador es: Rasmus Munk. Por segundo año consecutivo, el chef del danés Alchemist se alza con el grandilocuente título de mejor chef del mundo, seguido en el podio por la eslovena Ana Ros, de Hisa Franko, y el indio Himanshu Saini, al frente de Trèsind Studio en Dubái. Los ganadores de la nueva edición de The Best Chef Awards se dieron a conocer anoche en Milán, y no traen buenas noticias para la gastronomía patria. Tras años de dominio español (Dabiz Muñoz ganó tres veces seguidas entre el 2021 y el 2023, Joan Roca fue primero en el 2017 y el 2018, y Albert Adrià alcanzó el segundo puesto el año pasado), esta vez no hay presencia nacional en el podio. Sí figuran hasta 54 cocineros españoles en el listado, 14 más que el año pasado, aunque su peso se diluye entre los más de 700 galardonados.
La gran novedad es la entrada de Nacho Manzano, del asturiano Casa Marcial, directo a la máxima categoría. Se suma así a una nómina de tres cuchillos donde ya estaban Joan Roca, Dabiz Muñoz, Albert Adrià, Quique Dacosta, Eneko Atxa, Ángel León, Andoni Luis Aduriz, Bittor Arginzoniz, Martín Berasategui, Paco Morales, el equipo de Disfrutar, Paco Roncero, los Hermanos Torres, Paco Pérez, Diego Guerrero, Paolo Casagrande y Paco Méndez. Con dos cuchillos debutan David Yárnoz (Molino de Urdániz) y Luis Valls, mientras que Jordi Vilà, Juanlu Fernández y Tetsuro Maeda ascienden un peldaño. En esa categoría intermedia también figuran Ricard Camarena, Elena Arzak, Begoña Rodrigo, Toño Pérez, Paulo Airaudo o Jesús Sánchez, entre otros.
¿Quién decide estos premios? Un jurado de 972 votantes, de los cuales más de la mitad son cocineros y el resto se agrupan bajo la ambigua etiqueta de «profesionales del sector». Los artífices de la iniciativa son el italiano Cristian Gadau y la polaca Joanna Slusarczyk. Lo que comenzó como un proyecto en redes sociales derivó, a partir del 2017, en una gala anual que les ha permitido atraer patrocinios y ganar visibilidad internacional. Desde entonces, la ceremonia ha pasado por Barcelona, Varsovia, Madrid, Dubái y ahora Milán.
El sistema de votación no ayuda a despejar dudas. Durante las primeras ediciones, Best Chef elaboraba un listado de los 100 mejores cocineros del mundo; desde el 2024, en cambio, solo se anuncian los tres primeros, mientras que el resto se reparte en las categorías de uno, dos o tres cuchillos. Una fórmula híbrida que mezcla a su manera la lista 50 Best y las estrellas Michelin, intentando arañar protagonismo a ambas y sin desairar a los chefs. En la práctica, el interés se diluye en un evento cada vez más autocomplaciente, donde las grandes figuras de la cocina se limitan a darse palmaditas entre sí.
El nuevo triunfo de Rasmus Munk sorprende poco o nada y alimenta un modelo gastronómico basado en el estrellato en torno a restaurantes para la élite. Su establecimiento de Copenhague ofrece un menú de más de 50 bocados cuyo precio supera los 720 euros -sin incluir las bebidas. Eso si, servido con un derroche de luz y sonido bajo la cúpula de un planetario. En la misma gala que certificó el nuevo triunfo de Alchemist se entregaron además premios específicos entre los que si aparecen varios nombres españoles: José Andrés por su labor humanitaria, Quique Dacosta por su arte culinario y Diego Guerrero por su contribución a la ciencia.