Sánchez y Díaz se alían para resucitar la coalición frente a la moción de censura de Vox

Luís Pousa Rodríguez
Luís Pousa REDACCIÓN / LA VOZ

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El presidente de Vox, Santiago Abascal y el candidato de la moción de censura, el profesor Ramón Tamames, el pasado jueves, en el Congreso
El presidente de Vox, Santiago Abascal y el candidato de la moción de censura, el profesor Ramón Tamames, el pasado jueves, en el Congreso Jesús Hellín | EUROPAPRESS

Ramón Tamames defiende este martes la sexta propuesta de censura al Gobierno desde 1978

21 mar 2023 . Actualizado a las 09:08 h.

El Congreso de los Diputados acoge este martes la sexta moción de censura contra el Gobierno desde 1978. Vox, que ya fracasó en octubre del 2020 en su intento de desalojar de la Moncloa al socialista Pedro Sánchez, vuelve a la carga con el veterano economista Ramón Tamames como candidato a la presidencia. La iniciativa de la formación de Santiago Abascal, que solo obtendrá el respaldo de sus 52 diputados, sale derrotada de casa como ya lo hicieron en su día las de Felipe González (1980), Antonio Hernández Mancha (1987) y Pablo Iglesias (2017). Y se estrellará por segunda vez contra el único candidato que consiguió sacar partido a este procedimiento, un Pedro Sánchez que llegó a la Moncloa en junio del 2018 tras lograr el apoyo a su moción de censura contra el popular Mariano Rajoy.

El secretario general de Vox, Ignacio Garriga, hizo este lunes un estéril llamamiento a los «diputados del PP, el PSOE o los partidos regionalistas» para que rompan su disciplina de voto y apoyen a Ramón Tamames «en un ataque de conciencia o responsabilidad nacional».

Una vez filtrado el discurso del aspirante —que difundió la semana pasada eldiario.es—, el efecto sorpresa ha quedado calcinado y, salvo cambios de última hora en su intervención, Tamames desglosará en 31 folios su diagnóstico del país sin plantear, como requiere este procedimiento constitucional, una alternativa de gobierno constructiva y sólida. El eje del discurso será describir un paisaje apocalíptico para solicitar a la Cámara un apoyo que dé lugar a la convocatoria de elecciones generales coincidiendo con la cita de las municipales y autonómicas del 28M. 

«Sin frivolizar»

La portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, señaló este lunes en su comparecencia tras el Consejo de Ministros que la moción de censura solo servirá para probar que «la derecha y la extrema derecha se están dando las manos» y aseguró que la decisión de los populares de abstenerse forma parte de las «capitulaciones matrimoniales» del PP con Vox.

Rodríguez recalcó la línea adoptada por el Ejecutivo de tratar esta iniciativa «con la solemnidad que el momento requiere» y «sin frivolizar» con un instrumento de la Constitución.

A preguntas de los periodistas, la portavoz del Gobierno no concretó qué miembros del Ejecutivo intervendrán en el debate (el reglamento permite que cualquier ministro dé la réplica a Tamames). El propio Pedro Sánchez responderá tras las intervenciones iniciales de Santiago Abascal y Ramón Tamames, y desde Unidas Podemos apuntaron este lunes que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, también subirá a la tribuna para defender las tesis del grupo confederal. Se repetiría así el esquema de la moción de censura de Vox de octubre del 2020, cuando Pedro Sánchez y Pablo Iglesias —entonces todavía vicepresidente primero del Ejecutivo— dieron la réplica a los discursos de Ignacio Garriga y Santiago Abascal.

Las declaraciones de Isabel Rodríguez apuntan a que una de las líneas en común de los discursos de Sánchez y Díaz será utilizar la moción y la abstención del PP para subrayar los vínculos entre las dos fuerzas de la derecha. La portavoz recordó que una de las primeras decisiones de Alberto Núñez Feijoo a su llegada a la presidencia del PP fue dar el visto bueno al pacto de ambos partidos en la Junta de Castilla y León, una estrategia que con toda seguridad explotarán este martes tanto el presidente como la vicepresidenta, conjurados frente a Vox para resucitar una coalición en horas bajas.

El duelo entre el PP y Vox marcará un debate del que se ausentará Núñez Feijoo

Como ya sucedió en octubre del 2020, cuando los ataques de Vox se centraron más en el PP de Pablo Casado que en el propio jefe del Ejecutivo, una de las claves de la jornada será el tono que Santiago Abascal —quien intervendrá en primer lugar para presentar a su candidato— emplee con los populares.

El PP insistió este lunes en que la moción de Vox es «un show político» que solo beneficia a Pedro Sánchez y su Gabinete «Frankenstein». Génova ha marcado distancias con la propuesta de Abascal desde el primer instante. Desde la dirección del PP han decidido abstenerse, al contrario de lo que hizo Casado en el 2020, y restan importancia a una sesión abocada a una holgada victoria de Sánchez. Por ello, Feijoo no estará en el Congreso durante el debate y a esa hora participará en un encuentro con diplomáticos en la Embajada sueca.

«Promoción personal»

En su lugar, hablará la portavoz del PP en la Cámara Baja, Cuca Gamarra, quien este lunes subrayó que en su intervención defenderá el «criterio propio» de su formación y una estrategia de moderación «alejada de los bloques y las trincheras». La portavoz parlamentaria del PP también lamentó el uso partidista de un instrumento constitucional como la moción de censura. «No puede utilizarse para la promoción personal o para una operación de propaganda a costa de la calidad democrática del país», criticó Gamarra.

Así se votará la moción

En el Congreso se desarrollará este martes y este miércoles, el debate sobre la moción de censura presentada por los 52 diputados de Vox —la segunda que registra esta formación contra Pedro Sánchez— y que encabeza el economista Ramón Tamames.

¿Cómo arranca la sesión?

La sesión arrancará este martes a las nueve de la mañana con la intervención de uno de los parlamentarios que firma la moción de censura. En este caso, será el propio Santiago Abascal el que defenderá la propuesta de Vox y la idoneidad de Ramón Tamames para sustituir a Pedro Sánchez en la Moncloa. Tamames expondrá luego su programa de gobierno sin límite de tiempo. A continuación, le dará su réplica Pedro Sánchez, también sin un tiempo máximo marcado, al igual que los miembros del Ejecutivo que quieran responder al candidato de Vox. De forma excepcional, Tamames intervendrá desde el escaño de Abascal y no desde la tribuna.

¿Cómo se reparten los tiempos del debate?

Ya por la tarde, tras el receso para comer que fije la presidenta de la Cámara, se retomarán las intervenciones de los portavoces parlamentarios de los distintos grupos. En este caso, hablarán en orden inverso al peso en escaños de cada partido en el hemiciclo, de forma que este martes por la tarde arrancarán las formaciones minoritarias de los grupos Mixto y Plural y los dos partidos con más representantes, el PSOE y el PP, tendrán su turno el miércoles. Para estas intervenciones se fija un máximo de media hora en el turno inicial y otros diez minutos adicionales para la réplica. Ramón Tamames puede ir contestando a cada portavoz de forma individual o dar una réplica conjunta a todos los grupos cuando estos concluyan sus intervenciones.

¿Quién intervendrá por parte del Partido Popular?

Alberto Núñez Feijoo, senador por designación autonómica, no tiene escaño en el Congreso y no participará en el debate. De hecho, ha anunciado que ni siquiera asistirá a la sesión desde la tribuna de invitados. Por parte del PP hablará su portavoz parlamentaria y secretaria general, Cuca Gamarra, que argumentará la decisión de los conservadores de abstenerse.

¿Cómo se realiza la votación?

Para que prospere la moción de censura, se necesita que el aspirante a presidente del Gobierno obtenga el respaldo de la mayoría absoluta de la Cámara Baja (176 diputados). Salvo sorpresa mayúscula, Ramón Tamames contará con el apoyo de los 52 diputados de Vox, la abstención de los 88 representantes del PP y el rechazo del resto de parlamentarios. En este caso, dada la trascendencia del proceso de la moción de censura, la votación se hace por llamamiento por orden alfabético de cada uno de los diputados, que responden desde su escaño en voz alta si optan por el sí, el no o la abstención. Para decidir el orden, se hace un sorteo para elegir el apellido por el que se empieza y, al final, serán los miembros de la Mesa y del Ejecutivo quienes voten.